Pequeñas Historias De Amor Con Las Tortugas

✨❤️💙 Altar 💜🧡✨

Caminabas por aquel pasillo decorado con una gran alfombra roja y con algunos pétalos de flores que antes habían sido lanzados. Miraste a un lado para observar a tu mamá sonriéndote con orgullo, emoción y cariño, era increíble para ella ver a su hija casarse. Y según ella, con un gran chico. 

Ríes al recordar el día en el que tu -en pocos minutos- esposo conoció a tu madre, era un buen recuerdo de sus nervios y de como el primer comentario que hizo, te hizo avergonzar por lo tonto que había sido. Claro que al final del día se la ganó luego de que viera el increíble novio que tenías y de como te trataba. Al final obtuvo su aprobación. 

Del brazo te llevaba Splinter, quién como un padre te cuidó desde que lo conociste. Tu vínculo con él era muy fuerte, él realmente te adora como una hija y está orgulloso de saber que eres tú quien se casará con su hijo. No puede pedir menos como padre. Eras increíble y él realmente estaba encantado de poder llamarte su hija, la futura esposa de su hijo y quién lo amaría para siempre. 

Al final del pasillo, frente al altar, te esperaba tu futuro esposo. Con un traje negro y una corbata de su color representativo. Hoy no llevaba bandana, realmente se veía apuesto. Recodaste también la primera vez que lo conociste, la primera vez que se besaron y se dijeron "te amo", cuando se comprometieron y prometieron estar junto al otro por el resto de sus vidas. 

Y allí estabas ahora, caminando para hacer esa promesa real. 

Se movió inquieto al verte. Con ese gran vestido blanco que te hacía ver como una princesa, no, corrección, como una diosa. Con un peinado que dejaba descubierto tu rostro y un maquillaje precioso que resaltaba cada parte de él. Él realmente quería correr y besarte enfrente de todos. 

Caminaste por el gran pasillo, pensando en todo, en lo que serán ahora, en la familia que formarán y el futuro que los esperaba. 

Tu sonrisa no daba más de felicidad. Solo querías correr a él y gritar el "Si" de una vez por todas. 

—Puede ser un tonto... – Comenzó a decir Splinter mientras la distancia que había entre tu futuro esposo y tu era más pequeña —Pero gracias por amarlo. –

Realmente querías llorar. 

—Lo amaré toda mi vida, Splinter. –

⊹⊹

❤️ Raphael ❤️

Raphael no podía creerlo. 

Te veías preciosa. Hermosa. Dios mío, eras el ser más hermoso que alguna vez haya visto en el planeta. Y él era el afortunado que se casaría contigo. 

 Sus manos temblaron al verte caminar por el pasillo, sus ojos brillaron y una gran sonrisa orgullosa se instaló en su rostro. Era imposible no verla. 

Le sonríes de vuelta, con una tímida sonrisa por verlo así.

Y Raphael no lo pudo aguantar. 

Se puso a llorar, mientras su cola se movía feliz de verte caminar al altar para casarte con él. 

Llegaste frente a él, sus lágrimas manchaban su rostro y todo el público susurraba un suave "Aww" enternecida por la adorable escena de ustedes dos. 

—No llores amor. – Le susurraste. 

Él tomó tus manos negando. Sin poder realmente detenerse. 

—Es que te amo tanto.– 

Raphael desde el momento uno, supo que serías la mujer de su vida. Tanto como tu le entregaste tu corazón a él desde que lo viste.  

⊹⊹

💙 Leonardo 💙

Leonardo sonrió con una gran sonrisa boba, apretando sus manos al verte así. 

Sus ojos se abrieron en grande al verte caminar por aquel pasillo. Te veías tan hermosa en aquel vestido. ¿Realmente esto no era un sueño? 

Raphael tocó suavemente su hombro, dándole apoyo al verlo tan emocionado. 

Sorbió un poco e intentó hacer que el llanto no se escapase de sus ojos. 

Pero no pudo cuando alzaste tu mirada y lo viste a los ojos. 

Diablos, eso fue directo a su corazón enamorado. 

Corrió hacia ti, atrapando tu cintura para atraerte a él y besarte frente a todos. 

—¡Leo! – Te quejaste riendo con timidez. 

Pero Leonardo volvió a besarte.

—Tenía que hacerlo, preciosa. – Y volvió a atrapar tus labios, sin poder ocultar el gran desborde sentimientos que sentía al verte. 

Él solo quería poder decir que ambos eran del otro. 

⊹⊹

💜 Donatello 💜

Su mirada parecía seria. Pero no lo estaba. 

Por dentro se estaba muriendo, estaba gritando de felicidad y se notó en su cola y en sus mejillas rosadas. Sus ojos brillantes que intentaban ser serios por el momento pero que aún así lo delataban también.

Y Leonardo lo notó. 

—Se ve preciosa ¿Verdad? – Susurró hacia Donatello. 

Llegaste frente a él, sus manos atraparon las tuyas y no pudo evitar sentirse como el ser más afortunado de todos. Realmente nunca se había visto casándose, pero tú cambiaste todo eso cuando te conoció. 

Y asintió a la pregunta de su hermano, besando tus manos antes de atraerte y abrazarte con cuidado para no arruinar tu vestido o maquillaje. 

—Te ves tan hermosa, amore. – Susurró para ti antes de besar tus labios en un beso fugaz. 

⊹⊹

🧡 Angelo 🧡

Angelo quiso despertar. Era como un sueño. 

No disimuló su llanto ni su sonrisa mientras lloraba. Su cola se movía con felicidad y sus mejillas estaban rojas, no sabes si por el llanto o no. Pero Angelo no podía disimular su felicidad, la euforia de poder casarse y llamarse a si mismo tu esposo. 

Apenas llegaste frente a él te atrapó con fuerza, alzando tu velo y poder así besarte en los labios. 

—Angelo... Aquí no... – Dijiste avergonzada. 

—¿Cómo no podría? – Te respondió acunando tu rostro con amor. 

Angelo soñó cada noche con este momento, y ahora, nada podía comparársele. Era afortunado. 

Y lo supo cuando tomó tu mano por primera vez, cuando le sonreíste y ahora, caminando hacia él.