Thirsty.- Jaeyong

2019

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Así como si nada y de repente había perdido la virginidad con Jungwoo. Fue más placentero de lo que pudo imaginar, lamentablemente una parte de él seguía preguntándose como hubiera sido perderla con Taeyong.

Se había alejado de él hace tiempo siendo incapaces de si quiera compartir más que monosílabos. Los miembros se acostumbraron a la nueva dinámica poco a poco, también al nuevo carácter que mostraba.

Por alguna razón su personalidad se deformó a ser retraído y alejado. Le molestaba el afecto, prefiriendo pasar tiempo a solas o con Johnny quien, sin quererlo, se convirtió en su confidente.

—¿Cómo fue? —su amigo se encontraba sentado inclinado hacia el frente con los codos apoyados en sus rodillas y las palmas de las manos sosteniendo su cabeza al nivel de la mandíbula.

La posición de cotilleo más común.

—Fue bueno, solo odio que Jungwoo ahora piensa que puede besarme y abrazarme cuando quiera.

—Si, debe ser odioso; después de todo tu siempre has puesto límites con él. Por ejemplo esa vez que te beso y le seguiste el juego —sonrió inocentemente—, ¡Ah! Tambien la vez que te hizo una mamada y no lo detuviste. O esa ocasión donde se desnudo frente a ti y decidiste regresarle el favor. Claro que debe ser desesperante.

Un calor se instauró en sus orejas avisándole que estas estaban completamente rojas.

—Solo es sexo y se lo he dejado claro.

—Supongo que lo entiende.

—Lo entiende pero es demasiado empalagoso. Me exaspera.

—Tu eras igual antes.

Era verdad, no podía pasar más de una hora sin abrazar o repegarse a Taeyong. Al parecer su capacidad de contacto humano desapareció cuando le rompieron el corazón.

—Ya no más.

—Si, cambiaste mucho. Todo cambio mucho.

Solo atino a asentir.

Después de todo aún nadie sabía porque se habían distanciado tanto, no obstante seguramente el mayor ya había hecho sus conjeturas. Y tenía material para hacerlas; Ten era el confidente de Taeyong por lo que no dudaba que la pareja en sus ratos libres comentaba uniendo información.

—¿Sabes? Taeyong ha estado muy mal. Hace poco sacaron unos rumores demasiado problemáticos.

Lo sabía, estaba al tanto de todo.

—No lo sabía.

—Si, incluso dijeron que es un mal líder. Creo que es una de las peores cosas que se le puede decir, tiene una obsesión con cuidarnos a todos y ser el ejemplo.

Era un líder excelente pero falló al cuidar su corazón, el corazón de su Dongsaeng.

—Es verdad.

Quería dar respuestas más largas o profundas sin embargo nada salía. Odiaba ver a su Hyung tan decaído, quería arroparlo y decirle que todo estaría bien.

Quería hacer muchas cosas.

Esas cosas a veces salían a la luz en los programas o entrevistas. Tae aprovechaba a acercarse y demostrar un poco de cariño; al ser algo tan público no podía mostrarse ajeno o grosero.

Aunque claro, también se dejaba hacer porque lo extrañaba.

—¿Por qué no hablas con él? Sigo sin entender porque frente a las cámaras son cercanos y en privado son... Parece que se odian —dijo más para sí, asintiendo al terminar la oración viendo a la nada.