CALL OF DUTY // ONE-SHOTS

[Ghost]

Al fin llegaban los días de descanso para los soldados que habían sido enviados a Al-Mazrah, entre tantos que irían a tomar un descanso en bares o en hoteles, algunos irían a sus hogares a ver a sus familias para verlos y darles a saber que estarían a salvo más tiempo.

Entre ellos estaba Ghost, quien en silencio se marcho de la base cuando recogió sus cosas de la habitación, tenia un vuelo importante que se dirigía hacia Italia, donde tenia su casa lejos de la demás gente que lo conocía en el reino unido.

No dio avisos a nadie que se iría, er4a muy reservado en ello, sentía que no era necesario que se metieran en su vida, sobre todo el sargento escoses que parecía como un chicle preguntándole sobre que tanto hacia en Italia. Ya se podía imaginar lo que pensaría el crestón sobre sus actos secretos en aquel país.

Para el ingles era satisfactorio bajar del avión y irse en su auto hacia su hogar, sabia que lo esperaba la calidez que siemp0re añoro. El camino era tan calmado, estaba planeando que hacer al llegar, una larga lista que hacer en un mes entero o si era posible pediría otro mes para relajarse. 

(&)

- ¿___? - hablo Simón cuando abrió la puerta de la casa u escucho la música suave venir de la cocina, aunque no duro mucho ya que fue opacada con los pasos rápidos y delicados de alguien.

El hombre fue rápido y sostuvo en sus brazos el cuerpo de la fémina con firmeza, dejo que las piernas de la mujer se enrollaran en su cadera y sentir como ella lloraba, sus sollozos eran notables.

- Estas aquí - fue lo primero que dijo ella cuando pudo sentir como el cuerpo de su amado reaccionaba a su tacto, sentía sus brazos rodearla con esa necesidad y amor - me tenias muy preocupada cariño, ¿Por que no me avisaste?

- Quería que fuera sorpresa - dijo Simón apretando a la fémina más a él, como si la fuera a perder en cualquier momento.

- Me alegra tenerte aquí de nuevo, te extrañamos mucho - dijo ___ pasando sus manos por las mejillas del hombre con suavidad, sabia que sus toques hacían que él entrara en aun más calma.

- ¿Dónde esta? - a la mente del fantasma vino de inmediato el rostro del otro ser humano que hacia su vida tan brillante. 

- Esta en la sala, en su cuna, de seguro ya debe estar despierta para verte - dijo ella bajando de los brazos musculosos del hombre y lo dejo caminar directo hacia donde le había indicado.

Simón fue emocionado hacia allí, quito su chaqueta dejándola en uno de los sillones y pronto vio la pequeña cuna donde se escuchaban leves balbuceos de lo que parecía ser un bebé. El soldado no dudo en acercarse allí y tomar el pequeño bulto entre sus brazos, las pequeñas carcajadas y balbuceos, cosa que provoco una sonrisa en los labios de Simón, ver a su pequeña feliz lo era todo para él.

- Hola mi pequeña - dijo el hombre pasando su mano por la pequeña mejilla de su hija, esa felicidad en su rostro lo era todo - te veo tan feliz de ver a papá, vine para quedarme contigo mucho tiempo. 

La pequeña bebé empezó  a reír más fuerte mientras agarraba la mano gigante de su papá entre sus manitas. Sus dulces ojitos lo miraban  con felicidad, al fin tenia a su papá en casa, hace ya unos 2 meses que le hacia falta a la pequeña, aun así el mayor cumplió su promesa de regresar rápido a casa.

-¿No hiciste enojar a mamá? - decía Ghost mientras agarraba un pie de su bebé escuchando sus risitas cálidas y risueñas.

- Si que lo hizo, ahora resulta que es una niña nocturna - dijo la mujer detrás de Ghost dejando sus  manos en los hombros de su esposo.

- Bueno con papá aquí eso cambiara, yo me hare cargo en la noche - dijo Simón sin dejar de ver a su hija con amor, era el mayor regalo que le había dado su esposa.

- Pero papá debe bañarse y ponerse la pijama - dijo ___ con suavidad tomando el rostro de Ghost entre sus ojos y dejo un dulce beso en los labios de su esposo, esto quitando la mascara un poco para poder hacerlo.

- Seria agradable si fuera con mamá - susurro este con suavidad sobre los labios de la mujer soltando una leve risita.

- Pero mamá debe cuidar a la bebe - ___ se sonrojo por la propuesta de su esposo, quería tomarla pero ahora era mamá y debía poner mucha atención a su hija - tal vez mas tarde cuando este dormida.

- Me gusta esa idea - dijo Simón pasando sus labios por los de ella dejando un tierno roce entre ambos.

¿Qué mas podía pedir el hombre? Tenia una vida secreta y que era perfecta, algo que ni por imaginación había planeado, pero de alguna forma tener ese privilegio de una familia lo hizo sentirse lleno de amor y compañía, ya no se sentía solo.