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Domingo

Abrí los ojos lentamente, estiré mi brazo hacia el costado derecho de la cama pero se sentía vacío. Me senté rápido y confirmé que no estaba, miré a mi alrededor y un rayo de luz alcanzaba a entrar por el ventanal.

La habitación estaba ordenada,como si nada de lo de ayer hubiera pasado. Busqué mi celular, se encontraba en la mesita de noche pero al lado había una pequeña bolsa de plástico y una nota frente a esta.

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Shiori, tuve que irme por un asunto y no quise despertarte.

De todas formas, no olvidé que ayer no nos cuidamos y fui a la farmacia a comprarte unas cosas, están en la bolsa.

Te veo despues

-Choso

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Abrí la bolsa: venía una caja de Postday y una botella de agua.

Suspiré.

—Tan atento y a la vez tan idiota.

Agradecía que fuera considerado pero estaba empezando a odiar su forma de irse.

Cada vez que lograba avanzar mi "relación" con Choso, él mismo me hacía retroceder dos pasos, su maldita costumbre de desaparecer era algo que estaba comenzando a fastidiarme.

Me tomé la píldora y busqué mi ropa para vestirme. Caminé en dirección a las escaleras pero cuando bajé el primer escalón sentí un fuerte dolor en las piernas que me hizo flaquear, obligándome a tomar asiento en una de ellas.

Esperé unos segundos y me levanté porque mi mamá no crió a una debil.

Bajé las escaleras y fui a la cocina a prepararme algo de desayunar. 30 minutos después, me senté a comer y revisé mi celular.

Pensé en si debería llamarle a Choso pero finalmente no lo hice. En cambio decidí llamarle a mi amiga y contestó al primer timbre.

—¡Hola Shiori! —saludó animada.

—Utahime ¿estás ocupada? —pregunté.

—No, estoy en mi departamento acostada viendo televisión —rió. —¿Para qué me llamabas?

—Necesito contarte algo.

—¡Ay! Es sobre tu novio¿verdad? —preguntó emocionada.

—Yo... Yo no te conté todo —suspiré.

—¿De qué hablas? —se escuchaba confundida

—Esa vez que vino a visitarme y las demás veces que lo viste conmigo... sí éramos algo, pero no novios.

—Me estás diciendo que tú y él son amigos... ¿Con derechos? —dijo asombrada.

—Sí, eso —susurré.

—Estoy sorprendida, tú siempre has sido de relaciones serias pero eso no importa ¿Qué es lo que pasa?

—Bueno —pausé. —Yo... Yo me acosté con él.

—¿QUÉ HICISTE QUÉ? —gritó al otro lado de la línea. —Y dime... ¿Qué tal lo hace? ¿Es bueno? —preguntó divertida.

—¡Utahime! —exclamé. —No te hablé para eso.

—Solo contesta con un "sí" o un "no" y prometo que no insisto más —respondió.

—¡Ay! —tardé unos segundos en responder. —Sí —hablé bajito. El grito de felicidad de Utahime me confirmó que me había escuchado bien y claro.

—¡Lo Sabía! Es mejor que Naoya en todo sentido —gritó.

—No empieces con eso —me quejé. —Tengo un problema y necesito un consejo.

—Soy toda oídos.

—Me gustó casi desde el momento en que lo conocí y mientras más lo trataba más me gustaba —suspiré pesado. —Acepté este tipo de relación por eso, pero me estoy encariñando tanto con él y siento que... —me callé.

—¿Qué te estás enamorando? —terminó la frase por mí, lo cuál era cierto. —¿Le has dicho como te sientes respecto a tus sentimientos?

—Quisiera hacerlo pero tengo miedo de arruinar el tipo de relación que tenemos.

—Esa relación tiene arreglo, si te corresponde es por algo. A este punto deberían tener una relación formal. —sugirió.

—Lo veo imposible —reí amargamente. —Tiene una ex novia que fue muy importante para él y si somos amigos es porque no se siente listo para otra relación.

Pasaron varios segundos y Utahime volvió a hablar.

—No puedo dar una opinión concreta porque solo traté a Choso un par de veces y ante mis ojos parece ser un buen hombre pero... —pausó. —Solo toma en cuenta que no estás para consolar ni mucho menos para ser un reemplazo.

—No lo seré, yo sé que puedo cambiarlo —respondí.

—Eso decimos todas —suspiró. —Si crees poder: adelante, sigue intentando —continuó. —Pero no olvides lo que te dije ¿De acuerdo?

—De acuerdo, te hablo después y gracias por contestarme —le agradecí.

—Sabes que me puedes marcar cuando quieras Shiori —dijo. —Cuídate.

Terminé la llamada y también mi comida que ya se estaba enfriando.

El día de hoy no tenía nada que hacer, me estaba aburriendo, así que preferí quedarme en la sala y mirar la televisión.

No podía concentrarme, a pesar de estar viendo la televisión lo que dijo Utahime se repetía una y otra vez en mi cabeza.

¿Choso me quería o simplemente me estaba usando?

Scary Love  |  ChosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora