ME ENAMORÉ DE UNA ARMY 2

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—Deja de decir tonterías, no vas a dejar nada. A veces eres demasiado extremista.

Jungkook empieza a reír.

—Ahora tienes la oportunidad de quedarte conmigo para tí solita, ¿No es eso estupendo, y lo que malditamente querías?

Ahora los dos se miraban demasiado serios, la cosa se estaba poniendo bastante mal.

—¿Pero para que quiero que estés a mi lado así de amargado? Tu vida es la música y si la dejas sufrirás mucho —TN se sintió mal por verlo tan fuera de lugar.

—¿Pero si no me respetan para que quiero darle mi música? —se sentó de nuevo en el sillón de golpe y sin ganas de nada—. Me han seguido hasta el lugar donde hago ejercicio y eso no está bien, no me gusta sentirme perseguido. ¡No quiero que me persigan cuando estoy viviendo mi vida privada!

—¿Cómo dices? ¿Se han atrevido a hacer eso? —se indignó TN.

—Lo han hecho cuando hacía un live mientras mostraba mis ejercicios de boxeo junto a mi profesor, cuando terminé y quise volver a casa no me sentí seguro y me quedé por dos horas más en el interior. Estuve allí sentado pensando si merecía la pena estar cabreado y frustrado por no poder ni volver a mi casa. ¿Eso es respeto cariño? —la miró queriendo que lo comprendiera.

—No, no lo es...pero en verdad sí te respetan Jungkook, la mayoría del fandom lo hace, te cuida como la buena persona que eres, pero algunos no saben lo que quieren —dijo enfadada—. A veces creo que esas pocas te siguen porque creen que te van a conseguir como el que obtiene un peluche en una tómbola. ¡Quiero a un JK de esos que salen en la televisión y voy a por él aunque le haga daño con mi conducta idiota!... Son tan egoístas —suspiró enfadada y luego volvió a ser positiva—. Pero no puedes lapidar a todos cuando te dan su mejor atención y cariño, no son iguales todos los que te siguen y sé que te quieren de verdad. Así que no pienses dejarlos sin tu voz ni sin tus canciones.

Jungkook sonrió feliz, se quedó allí admirando a la mujer que estaba defendiendo su posición de ARMY verdadera, era la primera de un fandom que suspiraba por su atención...la jefa de su corazón y la madre de su hija.

—Eres la mejor de las ARMYS cariño —se levantó y fue hacia ella—. Bienvenida a casa, te eché de menos.

Sus cuerpos temblaron al sentir la energía que ejercían el uno sobre el otro.

—Vaya, creí que no me ibas a saludar como era debido —le hizo una mueca de enfado falso—. Yo también te eché mucho de menos y estaba deseando volver. Siento haberte dejado tanto tiempo solo. Últimamente no te está sentando nada bien no tener tanto trabajo.

Él la agarró por la cintura y la atrajo hasta dar contra su pecho duro. Una sensación que TN necesitaba volver a sentir después de esos días terribles que había pasado.

Jungkook se echó en su cuello para besarlo.

—Es que ya no sé vivir sin tí cariño, mira como me comporto cuando no estás —mediante besos se fue acercando poco a poco a sus labios, paró y la miró a los ojos—. Ya eres parte de mi vida y de mi mundo y te necesito para poder seguir adelante, voy a ser el hombre más afortunado del mundo cuando seas la señora Jeon.

Ella lo cogió de las mejillas con las dos manos y apretó un poco haciendo que sus labios parecieran graciosos.

—Tú no necesitas a nadie para brillar, lo haces por tí mismo desde siempre. Que nadie se le ocurra apagar tu luz porque sabrán quién es TN. Me verán bien enfadada por primera vez en mi vida.

—¿Serías mi guerrera favorita, esa que tiene unas uñas tan afiladas que las sacaría como una fiera indomable para defender a su novio y futuro esposo? —se lo dijo sonriendo  abiertamente.

—Sí...y lo haré, si es necesario estaré ahí para ser tu escudo.

La agarró de las muñecas que aún estaban estrujando su cara y tiró de ellas con fuerza hacia abajo, las dejó en su espalda y le sonrió de forma sexi y posesiva.

—Mi escudo una polla. A quién se le ocurra tocarte conocerá mi parte más oscura y no le quedarán más ganas de acercarse a tí —le dijo mirándola como el hombre más peligroso y hermoso del mundo.

Después la besó con fuerza presionando sus labios y atrapando con ganas su lengua. La abarcaba con sus grandes brazos para tenerla lo más cerca posible, con ello le demostraba la falta que le hacía estar de esa forma.

TN lo separó después de tenerlo un buen rato haciéndola delirar. Lo miró a los ojos que estaban encendidos por la pasión y el alcohol.

—Apestas, ¿Lo sabías?...es muy tarde y no te has duchado, eso no es muy de tí, con lo que te gusta bañarte —le acarició el pelo con los dedos, los metió para sentir lo suaves que eran.

—Es que esperaba que lo hicieras tú —la provocó con voz ronca y mirada sexi.

Ella empezó a reír por saber la suerte que tenía de poder tocar su cuerpo.

—Que suerte que sea la única que oiga decir a Jeon Jungkook que quiere que lo ayude a bañarse.

A él le cambió la cara, y ella lo notó.

—¿Qué es? ¿Porqué esa cara ahora de repente?

—Tengo que contarte algo, fue en un arrebato tonto y no sé porqué lo hice —le explicó de forma penosa.

—No me asustes, ¿Quién hubo aquí en éstos días? —se puso unos pasos lejos TN poniendo su mano en su pecho.

—¡Nadie! He estado solo, no te hagas ideas que no son —le respondió Jungkook asustado porque creyera otra cosa.

—¿Entonces de qué se trata?

—Es que él otro día en el live que hice para weverse, pues dije...

—Ayyyy señor a ver con lo que me sales ahora —dijo más para sí misma que para él.

—Mira, es una cosa muy tonta, es para reírse y todo —se mordió el labio—. Así que no quiero que te molestes porque fue una broma ¿Eh?

—Si fue broma o no lo decidiré yo cuando lo sueltes, porque veo que te cuesta contarlo —resopló ella.

—Fue que yo estaba hablando tan normal y me dió por decir que no me había bañado, una tontería ya ves. ¿Qué le importa eso a nadie? En fin que solté que tenía flojera por darme un baño solo y que si alguna me quería ayudar con eso—puso una sonrisa de arrepentimiento.

—¡Santo Dios! Mira que te gusta provocar —negaba con su cabeza y soltó el aire por la boca.

—No te preocupes, porque no era verdad. No dejaría a ninguna hacer eso excepto a tí.

—Eso espero Jungkook....eso espero, así que venga vamos que es muy tarde y necesitas dormir para aclarar tus ideas.

Lo cogió de la mano y tiró de él. Pero no estaba para que lo trataran como a un niño pequeño.

—Ven tú —la acercó de nuevo de un tirón—. Aunque tengas la exclusividad no te va a ser tan sencillo. Así que me baño si lo haces tú conmigo en esa gran bañera que tenemos. Sería un desperdicio de agua si la llenamos solo para mí...