Dominación Verdadera (High School DxD)

Capítulo 7: Tramas y planes: sin sexo

Sentado solo en la barra con la barbilla en la mano izquierda y un vaso en la derecha, Issei enfrentó los pensamientos que plagaban su mente con un largo suspiro.

'¿Por qué seguimos comprando esta basura? El whisky nunca mejora.

El líquido ámbar rodó alrededor de su vaso como si estuviera ofendido mientras él gruñía en voz baja para sí mismo y se obligaba a tomar otro sorbo con una mueca de dolor. Nunca fue su bebida preferida, pero con todo lo que había sucedido recientemente, se sentó y pensó que podría ser apropiada. Eso, y todos los demás de alguna manera, de alguna manera, habían logrado drenar el resto de su alcohol hasta la más mísera GOTA y nadie se había molestado en pedir más caldo. Pero por supuesto que no lo habían hecho.

Ese era el trabajo de Chi-chan.

"Estás haciendo pucheros otra vez".

Una voz interrumpió sus pensamientos en medio de su repentino descenso cuando Issei giró la cabeza y encontró a Toro dejándose caer en el asiento a su lado. Simplemente demostraba lo fuera de lugar que realmente estaba si incluso el toro pesado de un hombre que había conocido desde que era un niño pudiera acercarse sigilosamente a él, en el centro de su propio territorio para empezar.

"No estoy haciendo pucheros". Él refunfuñó, tomando otro sorbo y silenciosamente atragantándose por el sabor áspero.

"Tch, seguro que lo estás", se burló Toro y tomó la botella medio llena entre ellos, saltándose un vaso por completo y simplemente bebiéndolo directamente de la fuente con un chasquido de agradecimiento en sus labios. “Es la misma expresión estúpida que has tenido desde que eras niño y Chi se negó a dejarte comer helado de sus tetas. ¿Recuerda eso?"

"Por supuesto que lo recuerdo". Issei puso los ojos en blanco, luchando contra una sonrisa mientras pensaba en todos esos años de hace tanto tiempo. “Ni siquiera tenía problemas con sus senos. Ella simplemente dijo que comer tanto helado frenaría mi crecimiento”.

Toro chasqueó los dientes.

“Ojalá te hubiera dejado. ¡Recuerdo cuando apenas llegabas a mi pecho y ahora eres incluso más alto que yo! No es justo."

"Ahora, ¿quién está haciendo pucheros?". Issei sonrió, evitando el codo que intentaba meterse en sus costillas mientras Toro refunfuñaba.

“Mocoso estúpido, te dejamos divertirte demasiado. Algo que pareces haber aprendido de nosotros…”

Los dos se giraron simultáneamente para mirar el resto de la habitación a su alrededor. Si bien solo estaban ellos en el bar, eso no significaba precisamente que fueran los únicos allí. Sólo los dos únicos despiertos . El resto estaba desmayado a su alrededor, habiendo caído como moscas de la fiesta que habían tenido para celebrar la milagrosa recuperación de Chi, y todos lucían algún tipo de hematoma, mancha o falta de ropa que resultaba con demasiada frecuencia de ocasiones como estas . .

"... Sí, bueno, necesitaban desahogarse". Issei se encogió de hombros y se volvió hacia la barra mientras Toro resopló y extendió la mano para ajustarse las gafas.

"Buen intento. Sé que la culpa por tenerlos caminando sobre cáscaras de huevo te estaba afectando. Eres demasiado blando a veces, ¿sabes? Los subordinados son subordinados por una razón”. Lo regañó, luego suspiró mientras el chico más joven se encogía de hombros sin importarle. "Bueno, parece que la niña al menos se divirtió".