𝙽𝚘 𝚖𝚎 𝚒𝚖𝚙𝚘𝚛𝚝𝚊 | 𝙻𝚊𝚛𝚒𝚜𝚜𝚊 𝚆𝚎𝚎𝚖𝚜 𝚇 𝙵𝚎𝚖 𝙾𝙲

Cap. 9

POV Larissa

Elena tenía una expresión en la cara que le cambió a los segundos de entrar en mi despacho.

-No tengo nada que hacer, ¿Quieres qué te ayude en algo?- me preguntó no muy convencida.

- Si, ayúdame con las matrículas le los alumnos del próximo curso porfabor-

Se sentó enfrente y le cedí algunas de las matrículas, nos mirábamos a ratos, se la veía muy ida, como si estuviera pensando demasiado.

Comenzó la dinámica avitual; ella se levanta, le da la vuelta a la mesa y toma papeles que están justo a mi lado, era tan bella, tan tentadora, y para variar, hoy estaba preciosa, más de lo avitual.
Con el verano próximo, la ropa se terciaba a ser más fina y en menos cantidad, ella llevaba unos vaqueros que le quedaban perfectos, y una blusa con un escote cuadrado, yo hacía de todo para no mirarle el pecho, sus hombros marcados, su cuello.., habría leído cuatro veces lo mismo por mí poca concentración.

Elena se levantó y en vez de dar la vuelta, se inclinó sobre la mesa, no terminaría nunca con ella aquí. Sólo me gustaría darle un beso, con un solo y único beso me basta.

Luché por mantener la concentración mientras Elena revisaba los documentos a mi lado. Su cercanía siempre me perturbaba, pero esa tarde parecía más intensa. ¿Qué estaba pasando?

"Creo que esto está listo", murmuró, pasando una mano por su cabello mientras se lebantaba de la silla y se dirigía a mi lado. Su perfume llenó el aire, y fue como si una chispa invisible encendiera algo en mí.

Tomé una respiración profunda, tratando de despejar mi mente de pensamientos inapropiados. Sin embargo, era difícil ignorar la atracción que crecía entre nosotras. ¿Qué estaba pasando conmigo? ¿Y con ella?

Cuando ella se inclinó hacia mí para entregar los papeles, nuestros rostros estuvieron tan cerca que por un instante, pude sentir su aliento. La tensión entre nosotros era palpable.

Elena retiró rápidamente su mano, parecía sorprendida por la cercanía. Pero en sus ojos, vi algo más. ¿Era posible que sintiera lo mismo?

Decidí arriesgarme. "Elena, ¿puedo preguntarte algo?", dije con voz apenas audible, tratando de ocultar mis propias emociones.

Ella asintió, con una mirada expectante, ahun depie a mi lado.

"Esta tensión entre nosotros... ¿la sientes también?" confesé, sintiendo cómo mi corazón latía con fuerza, temiendo su respuesta.

Hubo un momento de silencio, donde nuestras miradas se encontraron y parecía que todo el aire se había escapado de la habitación. Ella asintió lentamente, sin apartar la mirada.
Estaba petrificada, tanto tiempo esperando estarespuesta y no puedo hacer nada. Elena me tomó de la mejilla y se inclinó a darme un beso. Nuestros labios se encontraron en un beso suave pero cargado de esa tensión acumulada, la pasión reprimida se liberaba en ese momento. Fue como si todo cobrara sentido en un instante.

Respondí al beso con la misma intensidad, parecia como si estuviera esperando ese momento más que yo. Nuestros corazones latían al unísono mientras nos sumergíamos en esa conexión que finalmente se había manifestado.

Cuando nos separamos, nuestras miradas lo decían todo. Habíamos cruzado un límite, pero ambos sabíamos que era lo que habíamos estado evitando admitir.

-Lo siento, no debí...- comenzó a decir, preocupada por haber arruinado la dinámica laboral.

-No te disculpes.

No podía más, la  tomé de la cintura y la senté en mi regazo, la sorpresa se reflejo en sus ojos mientras me aferraba a ella con determinación. Un instante de incertidumbre llenó el aire, y fue entonces cuando decidí arriesgarme y besarla apasionadamente. Nuestros labios se encontraron en un beso lleno de deseo contenido durante tanto tiempo. El mundo a nuestro alrededor desapareció mientras nos sumergíamos en esa conexión eléctrica que siempre estuvo presente.

Elena respondió con la misma pasión, enredando sus dedos en mi cabello mientras nos entregábamos a la intensidad del momento. El tiempo parecía detenerse mientras explorábamos nuestros cuerpos con frenesí y pasión desbordante. Cada beso, cada caricia, era un eco de los sentimientos profundos que habíamos mantenido ocultos por tanto tiempo.

Después de aquel momento ardiente, nos separamos con la respiración agitada y las miradas llenas de asombro y deseo. Nos quedamos en silencio por un momento, intentando asimilar lo que acababa de suceder.

Y así, entre sonrisas nerviosas, ambos supimos que ese beso era solo el comienzo de algo que iba más allá de lo profesional, algo que no podríamos ignorar más.

POV Elena

Cuando entre perdí todo el valor que tenía y me limite a callarme, nunca me hubiese esperado esto, parecía un sueño.

- ¿Y no tendríamos que terminar con el papeleo?-

- ¿Qué papeleo?, nosotras tenemos una conversación pendiente - me dijo con una sonrisa de complicidad.

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