Opción Perfecta ||NamJin||

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Con las vacaciones forzadas de una semana por parte de todo el personal de Kim's la compañía se vio envuelta en días de extrema ocupación, cada empleado (por temor a ser rotados más que nada) había puesto empeño en cada tarea hecha e incluso habían aumentado su velocidad para hacerlas. Realmente podía decirse que estos últimos días habían sido de los mejores (hablando en productividad) que habían tenido desde hace tiempo.

Y es que, aunque esas cuantas vacaciones no habían significado pérdidas para la compañía tampoco habían significado ingresos, por lo que los encargados de cada departamento hicieron saber a cada empleado que tenían que ponerse al corriente con el trabajo.

Por su parte tanto NamJoon como Jin igual tenían una cantidad inmensa de trabajo, pero a diferencia de todos los demás ellos no debían de asistir a las oficinas para llevar a cabo sus funciones.

Después de haber hablado del bebé en su encuentro de hace días habían tocado el tema de la compañía y Jin le había cuestionado cómo formaría a su hijo parte de su vida, pues ahora tenía una responsabilidad y debía de hacerse cargo de ella día con día. Bastó con algunos cuantos minutos para que ambos encontraran la solución perfecta: por el tiempo que necesite Taehyung para estar bien de salud tanto su padre como Jin trabajarían vía remota en la casa del mayor, así NamJoon (que en realidad eran ambos) podría cuidar de su hijo y ejercer su paternidad.

No fue una gran sorpresa que los primeros dos días Jin quiso muchas veces lanzarle su zapato a su jefe, Joon podía ser la persona más desesperante del mundo si se lo proponía, pero aún así al final del día el rubio lo terminaba con una sonrisa en su rostro de camino a casa.

Lo cual en gran parte se debía a los morochos.

Las cosas habían resultado mejor de lo esperaban, no podía mentir y decir que era un padre asombroso pero NamJoon ya conocía más sobre ser padre; había dejado de lado el asco y al menos ya podía cambiarle el pañal a Taehyung, su hijo.

Justo como ahora que le estaba terminando de colocar el pantalón después de cambiarlo y ponerle esa ridícula pomada que las primeras veces solía olvidar con frecuencia.

—¿Por qué me ves así? —le preguntó con un tono suave a Taehyung quien lo miraba atento mientras él tiraba el pañal en un cesto de basura cercano—, sabes que me toca a mí cambiarte.

Aunque a su hijo no le convencía mucho ambos mayores se habían puesto de acuerdo para cada cierta vez cambiarle el pañal al bebé, se turnaron cada vez que era necesario y ésta última le tocaba a él. Apesar de que no era obligación de su asistente estar al tanto de su hijo porque claramente no estaba en su contrato cuidar de un bebé, el rubio le había dicho que el podía ayudarlo sin ningún problema pues realmente le había tomado cariño al niño por todo el tiempo que pasaron juntos, además su instinto paternal estaba en lo más alto por lo que cada que podía estaba al pendiente del pequeño; NamJoon en agradecimiento por la ayuda y la enseñanza de ser un buen padre (porque era obvio que Jin lo sería) aumentó su salario, y aunque tuvieron una pequeña discusión por ello bastó con llamarle a Jimin para que le dijera al rubio que debía de aceptar si quería cumplir prontamente su sueño, ¿Cuál era? Ni idea, pero el morocho pensaba que probablemente se trate de unas vacaciones a Bacalar o cualquier lugar turístico, las personas no tenían mucha imaginación cuando deseaban hacer algo de ese estilo.

Aunque fue algo complicado para ambos poder balancear la carga de trabajo con las responsabiidades del cuidado de un niño, cada que éste dormía aprovechavan el mayor tiempo posible y se dedican a realizar las tareas que se precisaban con mayor urgencia.

Y si antes de eso ya convivían de una manera muy cercana, ahora podía decirse que estaban juntos la mayor parte del tiempo; en el corporativo el escritorio de Jin se encontraba fuera de la oficina de NamJoon para estar siempre al pendiente de lo que pasaba fuera de ella, y aunque ambos tuvieran vista del uno al otro gracias a la cantidad de actividades que realizaban al día no convivían y estaban tan juntos como actualmente. A pesar de que el mayor podía ponerle una oficina en su casa a su asistente no pensó que fuera lo mejor, pues por el tipo de acciones que realizaban necesitan mantenerse en comunicación, además le encantaba tener al rubio siempre cerca, era un empleado muy útil y un soporte personal bastante satisfactorio; por lo mismo, lo que había hecho era conseguir un escritorio que fuera casi igual al de la compañía y lo había colocado en su misma oficina, por lo que ambos pasaban gran parte de su día en esas cuatro paredes trabajando.