𝐏𝐀𝐑𝐀𝐃𝐈𝐒𝐄 | 𝑨𝒉𝒎𝒆𝒅 𝑰

Capitulo 16

Fecha: 10 de Noviembre, 1625

Habían pasado unos días desde que un grupo de esclavos habían llegado a Topkapi, entre ellos, estaba María, una hermosa esclava italiana.

María Di'Angelo, provenía de una humilde familia, su familia había muerto durante el asalto, y ahora, estaba completamente sola.

María pensaba en distintas maneras de escapar, pero todas terminaban en muerte, odiaba al Imperio Otomano, odiaba todo lo que tenía parecido.

Un día aparentemente normal, la joven italiana doblaba telas y las metía en baúles, su tarea fue interrumpida cuando un Eunuco se puso junto a la puerta.

─¡Atención! El Şehzade Orhan está aquí.─anunció, para luego inclinarse, con la cabeza agachada

El hombre más apuesto estaba a la vista de María, su cabello castaño y ojos verdes lo hacían más atractivo.

Todas las concubinas se reverenciaron como de costumbre, pero la italiana estaba bastante hipnotizada por Orhan.

Cómo si fuera el destino, el heredero al trono posó sus ojos en la única mujer que no hacía la reverencia.

─¿Quien eres? ─Orhan preguntó, avanzando hacia ella

─Soy María.─contestó

─Espero que te enseñen a reverenciarte ante un principe.─habló suavemente, para luego seguir su camino

María no le prestó atención a nada más que la encantadora voz del Şehzade, sentía que podia desmayarse en cualquier momento cuando aquel hombre le dirigía la palabra.

Beyhan estaba sentada en su sofá, observando como Ayşe Khalfa le contaba cuentos a Mihrimah y a Murad, apartó su mirada cuando vió las puertas abrirse y ver a su hijo mayor entrar.

─Hijo mío.─se puso de pie y se acercó para besar su frente

─Madre.─Orhan abrazó con fuerza a su madre

Las puertas volvieron a abrirse y los gemelos entraron, golpeados y ensangrentados.

─Mi Sultana, los príncipes volvieron a pelear entre ellos.─informó un guardia

Beyhan se acercó a sus gemelos, y los miró molesta.

─¿Tendré que quitarles sus caballos para que aprendan a comportarse? Yo no los crié para que pelearán a casa oportunidad, ustedes son príncipes, no animales.

─Madre, perdóname a mi y perdona a mi hermano, no volverá a pasar.─habló Selim

─Más les vale, o haré que su hermano Orhan los entrene en vez de el Sultan.

14 de Noviembre, 1625

Murad corria por el harem para robar dulces de las concubinas, cuando quiso agarrar un dulce de una parrilla, se quemó la mano, María apareció y agarró la mano de el niño y plantó varios besos.

─¡Murad! ¿Dónde estas? ─Orhan llamaba a su hermano menor, al verlo con aquella concubina, sintió un sentimiento, ternura y... algo que el no sabía que era

─¡Hermano! ─el pequeño Murad corrió hacia el mayor.─Esa señorita hizo que mi mano doliera menos.

El corazón de María se llenó de alegría, al ver lo sonriente que era el príncipe.

─Vámonos, madre te ha estado buscando.─dijo Orhan, mirando momentáneamente a María y luego llendose con su hermanito

Durante el camino hacia los aposentos de Beyhan, Orhan no podía parar de pensar en aquella joven, era muy hermosa, al igual que inocente.

No sabía que era ese sentimiento nuevo que descubría, pero sabía que debía reprimirlo para no tener problemas en un futuro.

─Dame un dulce, por favor.─Mihrimah pidió amablemente a su hermano

A Murad no le gustaba compartir, pero no quería que su hermana mayor se molestará, así que le ido una parte de sus dulces.

Nesrin estaba con sus hijos, haciendo que cada uno se durmiera luego de haberles contado un cuento.

─Cihangir, Hümaşah, Şahihuban y Esmehan.─susurró suavemente.─Hijos míos.

─Te queremos, mamá.─susurraron los niños al mismo tiempo

Una suave sonrisa se dibujó en el rostro de Hatice Nesrin, ella amaba con todo el alma a sus hijos.