Start The Game #1

capítulo 4

"I'am so sick of running as fast as I can

Wondering if I'd get there quicker if I was a man"

(Estoy tan harta de correr tan rápido como puedo

Preguntándome alcanzaría el éxito más rápido si fuera un hombre)

—The Man, Taylor Swift

IV | Potencial

Mis pulmones se sintieron fatigados con el pasar de los segundos, parecía eterno y caótico a pesar del sigilo que se mantuvo a mi alrededor.

—Esto debe ser una broma—Mire a los chicos que seguían parados detrás de mí—, dudo que siquiera ella pueda teclear algo decente.

Los examiné a uno por uno.

El más bajito y joven de los tres tenía el cabello pintado de rojo, en sus manos lleva puestos anillos y pulseras. Su vestimenta consistía en unos tenis converse a conjunto con pantalones negros roto y una camiseta de una alguna banda de rock. Lo que más resaltaba en él, eran los tatuajes sobre su brazo izquierdo, son pocos, pero sin duda llamaba la atención al igual que su pelo.

El segundo era normal a comparación de los otros dos. Su cabello era castaño sin ningún peinado en particular, solo estaba hacia atrás fijado con más gel de lo que contiene el bote, trae una camiseta color crema, pantalones de mezclilla azul claro y unos tenis deportivos blancos. Ni un accesorio ni nada diferente, era el que más me miraba con recelo.

De los tres, el pelinegro era el que más resaltaba por su aspecto físico.

Era mucho que decir comparado con el pelirrojo que estaba a su lado.

Sus rasgos asiáticos son los que más destacaban, al igual que sus labios son carnosos y pequeños, tiene una nariz recta y ojos café oscuro-grandes. Su cabello es negro en forma de libro abierto, era lo suficiente largo para hacerlo ver bien, no es feo y el peinado lograba que luciera mejor. De su ropa no puedo decir mucho, era un estilo informal casual.

—Alex, cállate. —Regaño el asiático y al único que reconocí por estar viendo su perfil, él es Levi, la persona que se metió a mi directo y por la cual fui tendencia estos días.

Sentí mis mejillas calentarse un poco, a pesar de que no le di más vueltas a ese tema, no podía ignorar el hecho de que era algo vergonzoso el cómo las personas en internet nos hacían videos juntos.

—Por favor, Levi—se acercó a él y lo abrazo por los hombros—. Si ella es Bec traería problemas, una chica en el equipo nos haría ver débil, no podemos permitirnos eso con el torneo a la vuelta de la esquina.

—¿Por qué supondría uno? —me cruce de brazos esperando la respuesta más obvia.

—Sin ofender, corazón, pero dudo siquiera que podrías aportar algo más que enseñar los pechos o la carita.

La sangre me hervía mientras él seguía hablando y suponiendo cosas de mí.

Lo que más me enerva es el hecho que ninguno de sus compañeros decía algo para detenerlo. Todos los ojos estaban puestos en él.

Mi mamá opinaba que ante este tipo de circunstancias siempre me recomendó quedarme callada. Mi lengua suele ser muy suelta cuando se trata de personas que decían algo sobre mí. El querer ser mejor en los ciberdeportes o como streamer me hace quedarme callada y no poder decir todo lo pienso.