Capítulo. 5

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—¡Lo que ese cuerno prueba de que nos han robado más de una cosa! —Gritó Nikabrik furioso.

—Yo no les robe nada —Se defendió el príncipe.

—¡Mentiroso! —grito una centauro.

—¿¡Qué no has robado nada!? ¿Te enumeramos todas las cosas que nos han quitado?

—¡Nuestros hogares! ¡Nuestra libertad! ¡Nuestras vidas! ¡Nuestro rey!

—¿Quieren hacerme responsable de los crímenes de mi pueblo? —Pregunto Caspian.

—Responsable y también castigable —, dijo Nikabrik.

—¡Ah! Es un descaro viniendo de ti enano —, opino Reepicheep — ¿O acaso ya olvidaste que tu pueblo luchó junto a la Bruja Blanca?

—Y con gusto lo haría de nuevo, si eso nos ayuda a deshacernos de estos bárbaros —, se justifico Nikabrik mirádo con a Caspian.

—Menos mal que no está en tu mano hacer que vuelva —, dice Buscatrufas detrás de Caspian. —¿O estás sugirieron que le pidamos al chico que se enfrente a Aslan? —ante eso, la gran mayoría grita.

—¡ORDEN! ¡ORDEN! Orden, mis queridos Narnianos —. Los Narnianos hicieron caso a su líder —, no deben de pelear entre ustedes, recuerden quien es el verdadero enemigo.

Caspian veía al líder muy atento, ya que su identidad es secreta, sin embargo la armadura se le hacía familiar, notaba que la estatura es similar de su prima Magalie.

—Tiene razón su majestad. Tal vez lo han olvidado, pero yo recuerdo muy bien, que Narnia nunca estuvo en orden, excepto cuando llegaron los reyes y reinas de narnia. Aunque varios vieron al gran rey como un tirano pero solo hacía lo que un rey hacia.

—Es un Telmarino.

—El rey Alexis también lo era —y yo también —dijo el líder descubriendo su rostro, Caspian sonrio al ver a su prima y la mencionada también sonríe a su primo.

—Más allá de estás tierras... soy un principe... el trono de los Telmarinos es mío por derecho, vamos a recuperarlo y la paz reinará entre nosotros.

—Tiene Razón, este es momento —, comento el líder de los centauros —, yo vigilo los cielos, pues esa es mi misión...así como la del tejón es la de no olvidar, el señor de la victoria y la señora de la paz. Una vez más se reúnen en el cielo...y en la tierra nació un hijo de Adán para devolvernos nuestra libertad.

—¿Es verdad? Que tengamos paz...¿de verdad lo creen? —pregunto la ardilla mirando a los primos.

—Hace dos días...nunca creí que existían criaturas parlantes o enanos, o centauros y aquí están. En mayor número que los Telmarinos hubiésemos imaginado...no sé si este cuerno sea mágico o no —, comenta el príncipe, mostrando el cuerno —.Sin embargo estamos aquí reunidos para recuperar lo que es nuestro.

—Sí tú nos guías, mis hijos y yo te seguiremos con nuestras espadas —, dijo el centauro y sus hijos sacan sus espadas y después todos levantaron sus espadas.

—Y nosotros nuestras vidas, sin reservas —, dice Reepicheep, haciendo una reverencia.

—Si queremos derrotarlos necesitamos armas y armamentos —, cofienza Magalie.

...

—Lucy, ¿Estás despierta? —pregunta Susan a su hermana. Susan se apoya en su antebrazo izquierdo para para mirar a su hermana, la cuál está observando las estrellas.

—Sí—respindio lucy muy bajo.

—¿Por qué? Creés que no ví a Aslan.

Lucy gira su cabeza para ver a su hermana mayor, la valiente tardó unos segundos en hablar.

Las Crónicas De Narnia: Los Primos Telmarinos Where stories live. Discover now