SESENTA Y SEIS

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en realidad no sabía como había podido tener la valentía para mirar al chico frente suyo y lanzarse a su pecho a llorar con total alegría, miro a los ojos nuevamente al muchacho para finalmente besarlo apasionadamente; Usagui profundizo el beso poniendo sus manos en la nuca de la muchacha para hacerlo, el mundo a su alrededor se paralizo y solo existían ellos dos en ese mágico momento. minutos después cuando sintieron que ya no les quedaba aire, se separaron viéndose con una sonrisa; Karai lo miro con los ojos llenos de lagrimas, mientras que Usagui se encargaba de limpiar aquellas lagrimas de felicidad para que no ensuciaran el hermoso rostro de la muchacha, la pelinegra le sonrió mientras sentía como las cosquillas en su estómago comenzaban a desvanecerse.

-¡SI QUIERO!

(........)

entro lentamente al cementerio sintiendo inmediatamente el sepulcral silencio que inundaba ese misterioso lugar, con un ramo de flores en su mano comenzo a caminar a la tumba destinada; se sentía terriblemente mal, ya que no había pisado ese lugar en meses, de alguna manera sentía que lo había abandonado. Cuando llego a la tumba de Benjamín, soltó un suspiro y cerro los ojos por un momento, se arrodilló frente a su amigo y sonrió dejando que algunas lagrimas cayeran.

-lamento haberte abandonado por un tiempo- suspiro arrepentido- no era mi intención,  es solo que...........no se realmente lo que pasa conmigo, solo se que me  haces mucha falta

Acomodo las flores en un florero vacío, se había enterado hace poco que los padres de Benjamín se desligaron de visitarlo por la terrible depresión que estaban pasando; lo último que sabía era que ellos habían decidido regresar a su país natal para pasar su duelo con toda calma, y no con todo el revuelo que eran las conferencias de prensas y los medios de comunicación. Leonardo no los culpaba, al final, ellos eran sus padres, y aun les dolía la perdida de su único hijo. Miro con tristeza la lápida, acerco sus dedos a ella y la acarició tiernamente, como deseando poder tocar por última vez el rostro de su  compañero; sonrió débilmente mientras intentaba no llorar con tristeza, si no, demostrar que ya no estaba triste, si no, resignado a que Benjamín ya no volvería. 



-he aprendido a vivir con el dolor de saber que ya no te veré nunca mas- suspiro mientras sonreía levemente- es un dolor que se, que nunca desaparecerá por completo........pero aun así, estoy muy feliz de saber que te encuentras bien donde estas.....

una fresca brisa comenzo a correr, el pelinegro cerro los ojos sintiendo casi de inmediato como algo lo abrazaba con ternura; sonrió, cuando sintió un aroma parecido al que siempre portaba Benjamín. 

-nunca te olvidare......amigo mío-

(........................)



Mona lisa estaba demasiado emocionada como para soltar el teléfono en ese momento, Karai había llamado a su mejor amiga para contarle lo que había pasado; tanto como la pelinegra y la castaña gritaban de emoción ante el relato de Karai, Mona lisa esperaba que su amiga no omitiera ningún detalle de su cita con aquel chico.

-¿te propuso matrimonio?- pregunto sin dejar terminar a su amiga, Karai sonrió nerviosa y comenzo a negar con la cabeza 

-claro que no- se quejo- solo me pidió ser su novia, es tan lindo y romántico..........es un sueño...

-y........¿leo?- pregunto borrando un poco la sonrisa de la pelinegra- lamento que te tenga que mencionar esto y arruinar tu momento, pero...........se que ha pasado tiempo, pero por lo que se veía, tu estabas locamente enamorada de Leonardo hace unos pocos meses........

-¿a que quieres llegar con eso?- pregunto sin entender, y un tanto molesta

-no, nada, olvídalo- río- sigue contándome 

-es un chico maravilloso- conto enamoradamente- obviamente le dije que si, no se que hizo como para tenerme así de boba jejeje

-es el amor querida amiga- sonrió, Karai se sonrojo de inmediato- pero bueno, algún día te tenía que tocar un enamorado como el. me alegra que eso ya haya sucedido

-si, me encanta 

Karai colgó la llamada mucho antes de que su amiga se despidiera, odiaba esos momentos de incomodidad que aparecía cada vez que ella hablaba de el amor; ya estaba claro que ella hace unos cuantos años si estaba locamente enamorada de Leonardo, y que aunque el la hubiera rechazado por tanto tiempo ella todavía tenía la esperanza de que el la amara. pero ahora que ella tenía una relación de verdad con un chico maravilloso, no podía hacerles caer en razón a sus amigas de que ya no sentía absolutamente nada por Leonardo Hamato.

¿Qué tan difícil es hacer entrar en razón a sus amigas que su enamoramiento de Leonardo ya había pasado?, le tenía cariño, si, pero como un hermano o como un amigo y como nada mas; Leonardo había sido parte de su pasado, un simple amor de verano pasajero. 

-ahora tengo una relación con Usagui- sonrió mientras abrazaba con fuerza una almohada de corazon de color rosado- estoy tan feliz.............



(........)

Renet miraba con impaciencia el techo de su habitación, sentía una extraña sensación en su pecho desde hace más de 2 días; era una sensación extraña, como si un bloque de cemento hubiera caído en su pecho.

_¿Que será esto?_ preguntó mientras acariciaba la zona, suspiro_ no creo que nada malo suceda ¿O si?

Quería intentar convencerse de que nada malo sucedería, pero, no estaba muy segura de que eso sería así; la sensación del pecho ya la tenía ahogada,   sofocada. Se levantó de su cama, y decidió salir a tomar aire fresco.

Aún con la sensación en su pecho, abrió la puerta principal de la entrada y salió; respiro profundamente, sonrió tratando de que ese presentimiento desapareciera

_nada malo sucedería_ decía en su mente con una sonrisa en su rostro





Continuará......












TOMAR NUESTROS CAMINOS  [TEMPORADA 2]✓Where stories live. Discover now