26. Perdí una batalla más no la guerra

1.3K 71 9
                                    

–Decidan quien se queda con mi cama, iré al sofá a dormir.-bostezó Martin luego de ver en su celular que ya era de madrugada. Se puso de pie y tomó algunas mantas.

–Seguro alcanza para dos.-propuso Violeta poniéndose de pie también luego de que todos estuvieran jugado al UNO en la alfombra de Martin por petición de Chiara.

–No lo creo.-se negó Martin sin fuerzas para soportar un enfrentamiento más entre ambas pelirrojas. Al principio de la noche era divertido, pero luego de ver como ambas se peleaban por quien le abría primero la puerta de su cuarto a Chiara, pensó que era el colmo.

–Yo sí.-insistió la pelirroja tomando asiento en la cama.–¿Kiki quieres dormir aquí conmigo?.-la nombrada abrió la boca sin saber muy bien que decir.

–Esta bien, Vio, tu puedes quedarte con la cama.-sugirió cordialmente y Ruslana no disimulo la risa ante el rechazo a su propuesta.

–No, tú quédatela.-resignada se bajo de la cama recogiendo el UNO del suelo, buscando con que entretenerse a ver si cambiaba de opinión.

El silencio reino el cuarto y Martin salió deseando buenas noches creyendo que la decisión ya estaba tomada.

–Chicas, a mí no me molesta dormir en la alfombra, puede quedarse una de ustedes con la cama.-dijo Chiara con timidez jugando con el dobladillo de su blusa.

–No.-hablaron ambas al mismo tiempo y la ojiverde soltó una pequeña risa.

–O podemos intentar dormir las tres juntas, solo no hay que moverse mucho.-propuso Kiki y cuando Ruslana estaba por negarse, Violeta se aventó a la cama.

–La mejor idea que pudiste tener, Kiki.-la felicitó dando palmadas al colchón para que se acostara de una vez a su lado. La mencionada sonrió y se recostó junto a ella.

Ruslana estaba harta. La manera en que odiaba admitir que Violeta era mucho más directa y lanzada que ella, dando obvias indirectas y coqueteando con Chiara en cada oportunidad que se le atravesaba. ¿Por qué ella no podía ser así? Ruslana era mucho más tímida y precavida al momento de acercarse a Chiara, respetando siempre su espacio personal y temiendo hacer o decir algo que la incomodara. A Violeta en cambio, le daba igual. "Eso es porque es mucho más segura que tú" pensó Ruslana frustrada por sentir que se estaba quedando atrás. Frustrada por sentir que llevaba un mes interesada en Chiara, y una chica que la conoció de hace un par de días ha logrado mucho más que ella.

–Ruslana, ¿vienes?.-salió de sus pensamientos al escuchar la voz de Kiki.

La manera en que a pesar de todo Chiara siempre la consideraba y estaba al pendiente de ella, era lo único que la mantenía con esperanza.

–Esta bien, yo me quedo en la alfombra, me muevo mucho al dormir.-dijo con el mejor tono que pudo y cuando Chiara estaba por insistir, Violeta habló.

–Es una pena, ni modo, buenas noches.-sonrió falsamente y Ruslana aprovechando que había apagado la lampara rodó los ojos.

Por supuesto que quería dormir con Chiara a su lado, el simple hecho de imaginarlo le provocaba un hormigueo en todo el cuerpo. Solo que no así, no con otra pelirroja a un lado de Chiara.

Reconoció que aquella noche pudo haber sido una gloriosa victoria para Violeta. Pero la dejó disfrutar y ser feliz por un momento porque estaba segura de que no iba a rendirse tan fácil, y que las próximas batallas serían de ella.

Kivi/Ruski INSTAGRAMWhere stories live. Discover now