Shirou Emiya en Arcane

Mi nueva oportunidad

*3 días después*
Me levanto de la camilla con hambre, esperando que sea la hora del almuerzo. Terminé contándole algunas cosas a Viktor, sin entrar en muchos detalles. Después de todo, él fue testigo de lo que hice. Sus ojos se iluminaron cuando le dije que era un mago. Su rostro pálido y delgado contrastaba con su cabello negro y su bata blanca. Su pierna izquierda estaba reemplazada por una prótesis metálica, que emitía un leve sonido al moverse.

Él solo apuntó todo en una libreta y casi salió corriendo, solo frenado por su pierna. Ser cojo debe ser duro, *suspiro*. No tenía planeado contarle, pero tampoco tenía otra opción. Me sentía culpable por ocultarle la verdad, pero también temeroso de las consecuencias

Viktor entró a mi habitación, interrumpiendo mi reflexión. Me miró con curiosidad renovada mientras revisaba sus notas. Su expresión era seria y concentrada, pero también se notaba un brillo de emoción en sus ojos.

-Tus análisis son poco comunes. Tu recuperación es asombrosa -dijo contemplativo-. Cuéntame más de tus habilidades.

Dudé en revelar demasiado. Aunque Viktor me había salvado, desconocía sus motivaciones reales. ¿Qué quería hacer conmigo? ¿Qué esperaba de mí? Opté por detalles vagos de nuevo, esperando que no se diera cuenta de mi nerviosismo.

—Como te dije ayer, puedo fortalecer mi cuerpo y crear armas simples. Pero solo soy un mago de tercera categoría—respondí con humildad—No tengo mucha experiencia ni conocimiento sobre la magia. Aprendí lo básico por mi cuenta, sin ningún maestro ni libro que me guiara—.

Con lo poco que me mostró Kirotsugo...

—Imagino tu potencial -meditó Viktor-. Hay muchas aplicaciones para tus habilidades, si pudiera reproducirlas tal vez yo... —se detuvo antes de seguir y tosió un poco— ¿Qué te parecería trabajar conmigo?—me propuso con una sonrisa.

La oferta despertó mi interés, aunque temí ser una herramienta. Viktor notó mi indecisión y trató de convencerme.

—Serás respetado, no un objeto. Con tu ayuda, mejoraremos vidas en Zaun y Piltover. Tendrás techo, comida... ¿Qué dices? -me ofreció con sinceridad—.

Ponderé la situación. Podría usar mi don para aliviar sufrimientos, tal vez y solo tal vez, eso me ayudara a sentirme en paz... Recordé mi pasado, las cosas que hice y las que no pude hacer. Las personas que perdí y las que lastimé. ¿Podría redimirme de alguna forma? ¿Podría encontrar un propósito en este mundo?, ¿Ellos podrían ayudarme a ver a mi hermana nuevamente?. Asentí lentamente. Viktor sonrió.

—Bien. Ya casi te dan de alta. Cuando estés listo, iremos a mi laboratorio. Quiero que conozcas a mi colega. Él adora a los magos, ¿sabes? Se llevarán excelente—me dijo con entusiasmo.

Después de aceptar la oferta de Viktor, me preparé mentalmente para lo que vendría. La idea de trabajar con él en su laboratorio era emocionante y aterradora al mismo tiempo. ¿Podría estar a la altura de sus expectativas? ¿Sería capaz de utilizar mis habilidades de manera efectiva en su investigación?... No lo sabía, pero estaba dispuesto a intentarlo.

—Que importa, se lo dejaré al yo de mañana—. Dije en voz baja antes de dormir.

*2 días después*

Mientras salía del hospital junto a Viktor, mi mente estaba llena de preguntas. ¿Qué tipo de proyectos desarrollaba en su laboratorio? ¿Qué tipo de tecnología usaba? ¿Qué tipo de personas trabajaban con él? Intenté mantener la calma, recordándome a mí mismo que esta era una oportunidad única para aprender sobre este lugar. Conozco bien Zaun, pero se poco sobre Piltover.

Viktor me guió por las bulliciosas calles de Piltover hacia su laboratorio. Mientras paseábamos, noté las miradas sobre mí. Algunas eran de curiosidad, otras de desprecio, otras de miedo. Tal vez seguir usando las ropas andrajosas no fue la mejor idea, pero... Quería seguir junto a ellas. Eran un recuerdo especial en este mundo.