05

77 12 0
                                    


CAPÍTULO 5 

EL RUMOR DE LA FIESTA FUE BASTANTE FÁCIL DE extender, solo tuvimos que contárselo a una persona, y al cabo de una hora una cuarta parte de la isla ya estaba enterada

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

EL RUMOR DE LA FIESTA FUE BASTANTE FÁCIL DE extender, solo tuvimos que contárselo a una persona, y al cabo de una hora una cuarta parte de la isla ya estaba enterada. Que la gente se enterara tan rápido de absolutamente todo tenía tanto una parte buena, como una mala, dependiendo del rumor extendido. 

Solo estábamos nosotros cinco en la playa preparando la cerveza. JJ y John B se encontraban junto a un barril de cerveza sirviéndose vasos mientras reían y hablaban, Kiara y Pope estaban sentados conmigo a unos pocos metros de distancia. El moreno no paraba de parlotear sobre lo que había ocurrido esa mañana, y de que, seguramente, esa fiesta no era una buena idea. 

- Vamos, papá - le dije tirándole todo el humo de mi boca en la cara con una sonrisa -, suéltate un poco. Solo es una fiesta más. 

Me levanté de la arena y fui hacia donde estaban los chicos, mis otros dos amigos no tardaron en venir con el resto. La gente no tardó en llegar, y pronto aquella playa que estaba vacía hace unas horas, en esos momentos no cabía ni una sola aguja. Aparecieron incluso algunos Kooks, entre ellos Topper, Sarah Cameron, aquella última me dirigió una sonrisa desde lejos. 

Mi relación con los Kooks no solía ser muy buena, pensamientos distintos, manera de vida distinta, y amigos distintos, pero los hermanos Cameron eran la excepción. Desde que era pequeña mi madre siempre había sido vecina de su familia, por lo que nosotros tres nos veíamos muy a menudo. A medida que fuimos creciendo nuestra relación cambió, o al menos con la chica. Rafe continuó teniendo en contacto conmigo, y aunque varias veces chocáramos en algunas cosas, solíamos arreglarlo en algunos días. 

Vi como se formó un corro alrededor de unas personas las cuales cada una de ellas gritaba animando a quien quisiera que estuviera ahí. Me acerqué hacia la gente para ver que al chico, o más bien a los chicos, que animaban eran a JJ ya otro chico que no conocía. Los dos bebían del vaso de cerveza lo más rápido que podía y ganaba quien se lo acabase antes. Un juego bastante típico y un tanto absurdo. 

La gente empezó a vitorear al rubio cuando ganó a ese pobre chico que rápido fue consolado por su novia con una sonrisa. JJ se giró para encontrarse con mis ojos y en su rostro apareció una sonrisa ladina, seguida de un movimiento de cabeza invitándome a jugar contra él. 

Puede que el juego fuera absurdo y bastante típico, pero esa sonrisa podía convencer a cualquiera que estuviera allí. 

Me acerqué y cogí uno de los vasos que me tendió un chico, el cual le paso uno al rubio con la misma cantidad de cerveza. Nuestros ojos se encontraron y una sonrisa traviesa apareció en mi cara, a lo que él me respondió con un guiño. Cuando el chico nos gritó para que el juego empezara, por mi garganta pasó a la mayor velocidad que pude la cerveza. Cuando tiré el vaso a la arena y levanté mis brazos vi como a JJ le quedaba aún líquido por beber. A los segundos el rubio levantó los brazos en señal de rendición y el resto que nos rodeaba comenzó a silbar y a volver a vitorear. 

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Mar 26 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Amor a la deriva [JJ Maybank]Where stories live. Discover now