Jimin como tu novio, y Jeon como su hermano te desprecia.

10 | Final.

Estaba en la habitación cuando escuché que cerraron la puerta fuerte, me levanté rápido para ir a ver y era Jeon.

Corrí a él. -¡Jeon!, ¿Qué sucedió?, ¿Por estás todo golpeado?-. Él no respondía nada, pero su mirada era penetrante, sus ojos reflejaban enojo. -Jeon, háblame por favor-.

-No tengo nada que decir-.

-¿Cómo que no tienes nada que decir?-. Él me interrumpió y golpeó la pared.

-¿Por qué me dejaste solo?, ¿Por que no has confiado en mi?-. Me miró fijamente.

-Jeon, yo... Tú sabes, pense que estabas coqueteando con esa chica, ¿Fue asi?-.

Él volvió a golpear la pared y tiró unas cosas que habian en la mesa.

-Jeon, me estás asustando, ¿Qué te pasa?, ¿Por qué actúas así?-.

No podia creer que él no me prestaba atención, me acerqué a él y lo abracé para que se tranquilizara.

Sentí sus brazos en mi cintura y su cabeza en mi cuello. -Perdóname, no quise asustarte-. Me abrazó.

-Sí, está bien, entiendo, pero... ¿Quién te hizo esto?-.

-No sé, habían unos tipos de negros que me golpearon, nunca los habia visto-. Él se separó de mi.

(Narra Jimin).

-Jennie, gracias por avisarle a Aurora que estamos aquí-.

-Le dije, pero no todo, cuando ella me dejó el visto no pude seguir hablándole más-.

-No importa, al menos Jeon recibió su merecido-.

-Jimin, yo creo que ya deberías dejarlos tranquilos-.

(Fin de la narración).

-Perdóname si-. Él me abrazó. -Pensé que al fin habia podido superar esto de los ataques de ira, pero creo que no-.

Cuando dijo eso quedé sin palabras por un momento. -Jeon, no importa, yo te amo y sé que podrás superarlo-.

Él me dio un beso en la frente. -¿Puedes entender que solo quiero estar contigo?-.

-Sí, lo entiendo-. Le sonreí.

-Tengo que decirte algo, que... Te amo demasiado Aurora, ¿Te gustaría permanecer a mi lado?-.

-¡Sí Jeon, sí!-. Grité de felicidad.

-Hoy vamos a ir a cenar a un restaurante bonito-.

(Al rato después).

Nos dimos una ducha para ir allá...

Llegamos y todo estaba bien lujoso. -¡Wow, que encantador!-. Hablé.

-Verdad que sí-.

Nos sentamos en una mesa especial y estuvimos un buen rato hablando y riéndonos.

No quise comentarle a Jeon sobre el mensaje de Jennie, pero ahora las cosas iban a cambiar y por fin vamos a estar bien.