✉Minchan
| En proceso |
En el mundo hay personas sin escrúpulos y desafortunadamente, Christopher ha conocido muchas de ellas a lo largo de su corta vida. Aún siendo un joven delta de diecisiete años, era bastante ingenuo para...
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Los pasos resonaban en el lobby de la empresa, el enigma salía con algo de premura, siendo perseguido por su secretaria. Yeji gruñó al no conseguir alcanzarlo, con su colega encargada del lobby riendo detrás de su escritorio, la chica se metió en el ascensor justo cuando este estaba por cerrar.
Minho no se inmutó con su presencia, demasiado sumergido en su celular, ignorando de forma olímpica su presencia, Yeji bufo, observando la hora en su reloj, aún no era tiempo de almorzar, pero su jefe se estaba retirando sin explicación de por medio.
—¿A dónde vas con tanta prisa? —Cuestionó la chica, arrojando su cabello detrás de su espalda, Minho la observó por un instante antes de regresar su atención al dispositivo donde texteaba con rapidez
—Al hospital
—¿Estás enfermo? —El mayor negó, consiguiendo que la alfa lo observará con extrañeza —¿Entonces?
—Hoy es el ultrasonido con Christopher, vamos a saber el sexo del cachorro
La alfa asintió, desviando su vista al frente en el momento justo que las puertas se abrieron y Minho se apresuró a salir del pequeño espacio, Yeji soltó otro bufido, persiguiendo de nueva cuenta al mayor —Iré contigo
—Gracias, pero no gracias Yeji —Negó el mayor, entrando en el estacionamiento tras saludar al guardia con un ademán
—¿Por?
Minho le dio un rápido vistazo a la chica, para después retomar la palabra —Es un momento íntimo, ¿sabes? Apreció tu interés, pero es algo que prefiero hacer solo
La chica cruzó sus brazos sobre su pecho, deteniéndose delante del auto del mayor en cuanto este lo hizo —Tengo un mal presentimiento de esto Minho, me gustaría estar ahí para ti
—Yeji, no —El hombre reafirmó, colocándose frente a frente con la menor
—¿Por qué? —La chica frunció sus cejas —Solo quiero estar segura de que no hay nada malo
Pellizcando el puente de su nariz, el enigma volvió a negar —¿Por qué siquiera sigues pensando que hay algo malo dentro de todo esto? No puedes, no sé, ¿estar feliz por mí?
—Realmente no —Masculló Yeji entre dientes
—¿Disculpa?
—Realmente no puedo estar feliz cuando tus crías nacerán de un delta que no conoces para nada, ¿acaso soy la única a la que esto le huele raro? ¿La que ve extraño que estés feliz por una camada que no sabemos si realmente es tuya?
La alfa supo que había errado con sus palabras en cuanto la mirada de Minho se endureció, pero no se retractó, se quedó de pie ahí observando como el mayor le daba la espalda —Soy un hombre adulto completamente capaz de cuidarme solo, Hwang Yeji y creo prudente recalcar tu posición, porque a pesar de soportar tus quejas y seguir tus bromas no eres más que mi secretaria, soy mayor a ti y me debes respeto Hwang
