24 - Las mismas preocupaciones de siempre

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Descargo de responsabilidad: No soy dueño de Naruto

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Capítulo 24

"¿Así que esta chica es del clan Kurama?" preguntó Naruto con curiosidad mientras él y el Sandaime se abrían paso a través del bosque situado a las afueras de Konoha. El anciano, que ciertamente no estaba preparado para correr por los árboles en su estado de recuperación, se limitó a asentir. Naruto estaba seguro de que habría dado una calada a su pipa si la nin médica no se lo hubiera prohibido prácticamente, al menos hasta que se recuperara. El pelirrojo tenía que decir que nunca había visto al viejo Hokage más inquieto o agitado que aquellos primeros días sin su calmante pero lamentablemente insalubre tabaco.

"Sí, Yakumo Kurama, una historia bastante trágica, me temo". Contestó Hiruzen en voz baja, sus ojos delataban el pesar que sentía por lo que fuera que le habían hecho a la niña. "Era una niña con muchas esperanzas puestas sobre sus hombros, la salvadora potencial de su clan. Fue la primera en despertar su Kekkei Genkai, dormido durante mucho tiempo, en generaciones, una muestra de lo cual has visto hoy". Naruto se limitó a asentir con la cabeza; aún estaba intentando asimilar todo ese asunto de "pintar relámpagos para que existieran".

"¿Así que su Kekkei Genkai consiste en pintar algo y hacerlo real?". Preguntó, estremeciéndose ante la idea; ésa podía ser una habilidad terrible y peligrosa si se utilizaba incorrectamente; era como tener una pequeña cantidad de poder sobre la realidad. Sin embargo, Hiruzen negó lentamente con la cabeza, soltando un largo suspiro.

"Me temo que nada tan específico; el clan Kurama siempre ha estado profundamente basado en el Genjutsu, era natural que sus habilidades inherentes lo reflejaran. No, su Kekkei Genkai consiste no sólo en producir algunos de los mejores Genjutsu fuera del clan Uchiha, sino en hacer brevemente real todo lo que contiene ese Genjutsu. Yo mismo lo he visto desarrollarse de muchas formas diferentes; una vez incluso supe de un joven que cantaba para producir sus técnicas, y la propia letra se convertía en realidad mientras la cantaba." Naruto hizo una mueca al oír aquello, incapaz de superar lo roto que sonaba todo aquello como habilidad.

"¿Y si una de ellas no requiriera un medio, como la pintura, o... el canto para producir este efecto?". preguntó Naruto, casi dudando de la respuesta; sin embargo, para su alivio, el anciano se limitó a encogerse de hombros.

"Que yo sepa, nunca ha ocurrido, pero el clan Kurama es antiguo; mucho más que el Sarutobi, sin duda. Si existiera una persona así, estoy seguro de que sería inmensamente poderosa". El hombre parecía casi nostálgico ante aquello mientras miraba hacia una gran cabaña hacia la que se dirigían. "Hacer o deshacer el mundo a su antojo, dentro del alcance de su capacidad de Chakra; sería verdaderamente temible". Naruto sólo pudo asentir mientras se dirigían al encuentro de los dos guardias que les esperaban frente a la entrada principal.

Iban vestidos casi como ninjas médicos, lo que hizo que Naruto se preguntara cuál era su propósito aquí. Encontró un rostro más familiar cuando un ANBU pareció aparecer ante ellos, arrodillado ante el Hokage. Su presencia era comprensible para Naruto; por lo que parecía, los poderes de esta chica eran una especie de lastre y su estado mental era, en el mejor de los casos, cuestionable. Aunque, al parecer, eso no le había impedido dar un paseo y casi vaporizar tanto a él como al Hokage; así las cosas, iba a tener que volver a construir aquella mesa de mapas desde cero.

"Entonces, ¿cuál es exactamente el asunto aquí?" habló Naruto, volviéndose hacia el anciano Kage. "Por tu forma de hablar, parecía que los poderes de esta chica debían estar sellados; ¿por qué va por ahí atacando a la aldea?". Hiruzen hizo una mueca, indicando a la pelirroja que le siguiera al interior mientras los guardias se ocupaban de sus asuntos.

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