El estaba a punto de tomar tu propia vida y acabar con todo lo que le hacía infeliz, pero no pensó que tomar un último café lo terminaría enamorando perdidamente de esa omega recesiva con aroma a pan recién horneado
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Pov's Omnisciente:
Ser la novia de Manjirou Sano significaba tanto para ellos y Venus en eso debía ser perfecta.
Venus y Emma habían acordado encontrarse en la tranquila cafetería de la esquina, un lugar acogedor que a menudo elegían por su atmósfera íntima y discreta. Ambas sabían que la conversación que tenían pendiente era de suma importancia, especialmente considerando la cercanía de Emma con Mikey, cuyos asuntos últimamente se habían tornado complejos y necesitaban ser discutidos con delicadeza.
Cuando Venus llegó, encontró a Emma ya sentada en una mesa al fondo, con dos tazas de café humeante esperando. Tras un breve saludo y un intercambio de sonrisas tensas, ambas mujeres se acomodaron, sabiendo que las palabras que estaban a punto de intercambiar podrían alterar significativamente sus relaciones y decisiones futuras.
-Gracias por venir, Emma- Comenzó Venus, notando cómo Emma asentía, su expresión seria y considerada- ¿Para que me citaste?-
La tensión podría cortarse con un cuchillo y de repente...
-Tenemos que hacerte ver cómo la esposa de un capo de la mafia- Venus casi se atraganta con el café al punto de casi escupirlo-
-¿Disculpa?-
-Si bueno, de estas cosas Mikey no se suele preocupar pero yo sí y como la futura esposa de mi hermano hay cosas que debes de aprender- Dijo Emma-
-Ya veo...¿Que dices que necesito?- Pregunto Venus algo preocupada-
Emma tomó un momento para organizar sus pensamientos antes de hablar. Sabía que lo que estaba a punto de decir podría ser mucho para Venus, pero era esencial para que comprendiera la vida que le esperaba junto a Mikey.
-Venus, ser la prometida de Mikey no es sólo una relación personal, es también una posición de mucho poder y responsabilidad. Dada la posición de Mikey como líder, cada detalle cuenta, incluso cómo te presentas en público- Comenzó Emma, su tono serio pero amigable, tratando de guiar a Venus a través de este nuevo panorama-
Emma tomó un sorbo de té.
-Debes entender que la imagen es crucial. Mikey no solo es mi hermano, es también el líder de una... organización muy influyente. Su pareja debe reflejar su estatus. Esto significa que debes estar siempre impecable, usar ropa que no solo sea hermosa y femenina, sino que también proyecte poder y sofisticación. Queremos que el mundo vea que él está con lo mejor- Explicó Emma, intentando suavizar la crudeza de sus palabras con una sonrisa- Además, hay ciertos modales y comportamientos que debes adoptar. Debes ser encantadora y amable, pero también firme y respetable, en todo momento. Debes ser alguien a quien Mikey y todos a su alrededor puedan respetar y admirar, alguien que pueda manejar cualquier situación con gracia-
Emma hizo una pausa, permitiendo que Venus absorbiera la información.
-Sé que puede parecer mucho, y no esperamos que seas perfecta de inmediato. Pero es importante que empieces a familiarizarte con estas expectativas. Si necesitas ayuda, puedo mostrarte todo sobre modales, elegir tu vestuario, incluso cómo hablar en eventos. Estamos aquí para apoyarte-
Venus asintió, tomando todo en serio. Aunque la realidad de su nueva vida era abrumadora, también sentía una oleada de determinación. Sabía que tenía mucho que aprender, pero también entendía que no estaba sola en este viaje. Emma estaba allí para guiarla, y juntas, podrían enfrentar los desafíos que venían, claro hasta que tuviera a su hijo.
-Y....¿Por donde debemos de empezar?- Pregunto Venus-
-Facil tu aspecto- Dijo Emma- No te preocupes no será nada de cirugía plástica, eso a Mikey no le gusta-
-O-ok-
Emma tomó la mano de Venus con determinación y la guió fuera de la cafetería, con un propósito claro en mente. Venus, aún asimilando todo lo que Emma le había explicado sobre las expectativas y el rol que ahora jugaba en la vida de Mikey, se dejó llevar, sin saber exactamente a dónde se dirigían.
Al llegar a un exclusivo salón de belleza en una zona chic de la ciudad, Emma no dejó espacio para la duda.
-Vamos a empezar por aquí- Dijo, empujando suavemente a Venus hacia el interior del elegante establecimiento-
Dentro, el ambiente estaba lleno de aromas dulces y relajantes, pero a Venus poco le importaba. Antes de que pudiera asimilar su entorno, fue saludada por un equipo de estilistas y especialistas en belleza, quienes, bajo las indicaciones de Emma, comenzaron a trabajar en ella.
Lo que siguió fue una serie de tratamientos estéticos, algunos de los cuales Venus nunca había experimentado y que resultaron ser bastante intensos. Primero, se encontró sometida a una sesión de depilación láser, que picaba y quemaba con cada pulsación del láser. Aunque los especialistas fueron profesionales y tan suaves como podían, el proceso era innegablemente doloroso.
Luego, Venus fue llevada a una silla para una microdermoabrasión facial, un tratamiento que, aunque prometía dejar su piel radiante, se sentía como si le raspasen la cara con una lija muy fina. Cada nuevo tratamiento parecía traer un nuevo tipo de malestar, desde peelings químicos hasta envolturas corporales que estiraban y tiraban de su piel.
A través de todo esto, Emma se mantuvo a su lado, ofreciéndole palabras de ánimo.
-Esto te ayudará a estar a la altura de las expectativas, y con el tiempo, te acostumbrarás- Le aseguraba Emma, intentando distraerla de la incomodidad con conversaciones sobre los eventos y las reuniones sociales a las que pronto asistiría-
Varias horas después, cuando finalmente terminaron todos los procedimientos, Venus se miró en el espejo. No podía negar que los resultados eran impresionantes—su piel brillaba, su rostro lucía más definido y fresco, y su cuerpo entero parecía rejuvenecido. A pesar del dolor y la incomodidad, empezaba a ver una imagen de sí misma que nunca antes había imaginado.
Agradecida pero exhausta, Venus le dio las gracias a Emma, quien sonrió con una mezcla de orgullo y alivio.
-Es solo el principio- Dijo Emma, ayudando a Venus a levantarse de la silla- Pero lo estás haciendo increíblemente bien ¿Tú qué piensas?-
-Que quiero regresar a casa con Mikey y abrazarlo-
-Jajaja, ven vamos a la peluquería-
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