Dicen que me prendo rápido
que soy una maleducada por estar protestando,
que debo callar, porque lo que digo no es cierto,
que las mujeres no sufrimos, que solo exageramos.
Siento que soy fuego consumiéndome poco a poco,
este mundo no está preparado para arder,
pero a veces, contra todo pronóstico, llega un incendio.
No me mandes callar, pues sólo avivarás la llama que acabará contigo.
Ahora comprendo que la llama soy yo misma,
pero también es el resto de las mujeres cansadas de este mundo,
es también las mujeres que lo sufrieron.
Es lo que acabará con todo lo que se ponga por delante.
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Cuando te necesites
SpiritualEste libro no se lee en orden, sino que contiene diferentes microtextos que tienen la finalidad de que conectes contigo misma y tus emociones, que seas capaz de integrarte en historias que, pese a ser personales, te involucren de alguna manera. Una...
