OS Katelena

Katelena

Kate.

— Solo faltan veinte minutos para irnos, Kate. Deja de ver el reloj así o lo desgastarás— comentó gracioso Peter— Sabes que ni aunque lo veas durante mucho tiempo se moverá más rápido, ¿cierto?

— Sí, Peter, lo sé.

— Tranquila, en veinte minutos podrás ver a tu noviecita, ¿ella vendrá a verte?— asentí entusiasmada.

— Pasará por mí, luego de eso nos iremos a su casa a ver películas, me quedaré a dormir porque hoy es viernes.

— Claro, a ver películas.— murmuró burlón.

— Te lo juro, Peet. Solo iremos a ver películas, si se atraviesa otra cosa, pues ya es cosa del momento.— sonreí.

Ojalá fuese así, Yelena suele ser muy cuidadosa cuando se trata de eso y sabe que estará su madre, por lo que nunca intentaría algo. No le gustaría dejarme en vergüenzas con Melina, aunque ella sea un amor claro que me daría pena estar teniendo cosas con su hija mientras ella está en casa. Pero mi novia sería tan compresiva que es capaz de echarse la culpa; es decir, decirle a su madre que ella fue la que me indujo a follar con ella ahí, tiene tan poco tacto que podría decirle "oh, sí. Yo le dije que follemos, perdón".

Dios, qué vergüenza me daría si Melina se enterara que la nuera que me sentada en la sala de su casa y que ella cree que es una santa hace tantas cosas su pequeña, aunque supongo que lo precisamente porque Wanda y Nat no son precisamente silenciosas cuando están juntas y mi rubia que ha contado de varias que les han hecho a Melina, tanto que ya las ha cachado... Más de cinco veces.

No sé durante cuanto tiempo estuve pensando en ello, que, cuando me di cuenta, la voz de la profesara me sacó de mis pensamientos.

— Señoritas y jóvenes, ya pueden retirarse, solo faltan cinco minutos para que se retiren oficialmente, vayan guardando sus cosas y pueden ir.— me paré rápidamente y comencé a guardar todo en mi mochila.

Una vez tenía todo listo en mi bolsa escolar, salí rápidamente del aula rumbo a la salida.

- Kate, Kate...- llamó Carol. Levanté la mirada- ¿Te parece si salimos a comer algo? Quiero salir contigo y...

- No puedo, lo siento.

- ¿Por qué?- preguntó alarmada.

¿En serio nadie la ha rechazado nunca? Pensé que era broma.

- Mi novia está esperándome fuera, quedamos en ir a su casa, lo siento- ella asintió sorprendida.

- Oh, bueno, otro día será.

No lo creo. Pensé.

Carol ha intentado coquetearme desde que estoy de novia con Yelena, sin éxito, claramente.

Yelena y yo nos conocimos en una fiesta de Peter por su cumpleaños, pues su padre, Tony, invitó a sus amigos, a los cuales Parker llama tíos, dentro de ellos se encontraba Natasha, la hermana mayor de mi rubia. Natasha había llevado a Yelena puesto que su madre, Melina, tenía cosas que hacer y Alexei, su padre, se encontraba trabajando, como habitualmente lo hace.

Aún lo tengo como un recuerdo reciente y ha pasado hace más de cinco años.

*Flashback*

Estaba de camino a casa del señor Stark, Peter nos ha invitado a mí, a MJ y a Ned, tristemente para él, Ned ha ido a acompañar a su nana en una reunión con sus otras amigas, pues lo había prometido desde hacía un mes y medio.

— ¿Tardaremos mucho en llegar?— pregunté desesperada a mi madre.

— Tranquila, ratoncita. Llegaremos en menos diez minutos según el GPS— contestó sin despegar la vista del camino— Además, aún es muy temprano, ¿por qué la prisa?