Ella sólo quería su caramel macchiato habitual, pero también al camarero habitual que lo servía.
❏Miya Osamu x oc.
❏Osamu trabajando en un café.
❏Basada en una canción de HoneyWorks.
❏Capítulos cortos.
-ErrorDai-
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No me interesa lo que digan los demás Nos vemos muy bien el uno para el otro ¿Verdad?
Estamos enamorados Estamos enamorados
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- ¡Samu no puedes dejarme fuera de mi casa!
Los gritos de Atsumu se escuchaban por la puerta mientras que Osamu preparaba la cena para él y Shiori, ya llevaban un mes de novios y ella aún no se podía acostumbrar en su totalidad a la relación que mantenían los gemelos.
- Osamu... ¿No deberías dejar pasar a Atsumu-san?
- No, solo sera un fastidio, ya se aburrirá e irá a molestar a mi cuñado. - Aseguró mientras se quitaba el mandil de cocina.
- Shin-chan puede que me llame si eso sucede.
- Bueno ¿Y qué más da? La comida ya está lista, sería un desperdicio comer preocupados. - Dejó los platos en la mesa de centro y le sonrió.
- En verdad... Es cierto, no importa lo que digan los demás. - Se acercó a abrazarlo y él la besó con cariño.
Pero el beso fue interrumpido al oír una voz extra en el comedor.
- Aw... Que lindos, pero ¡Eso fue grosero, Samu, hasta para ser tú! ¡Agradece que encontre la llave de repuesto y no me morí congelado ahí afuera! - Atsumu le gritó enfadado y entonces miró a Shiori.- Nada contra ti, cuñada, él es el problema.
- Eres una molestia, aunque sí, nos vemos muy bien el uno para el otro ¿Verdad? - Osamu acarició la mejilla de la Kita la cual sonrió.
- Sí, aún así eso estuvo mal... Atsumu-san ¿Quieres acompañarnos para comer?
- ¡Mi cuñada es la mejor, Samu no te merece! - Lloriqueó y la abrazó. - No sé cómo te fijaste en ese feo.
- ¡Somos idénticos, idiota! - Osamu le gritó enfadado. - ¡Y suelta a mi Shiori!
Shiori reía ante las actitudes de ambos hermanos, sin duda agradecia haberse enamorado de Osamu, le agradaba el ambiente familiar que tenían, a pesar de que las peleas de los hermanos fueran casi siempre, de a poco iba tomandoselo a la ligera, tal como su hermano le había aconsejado.
Pero no importaba mucho, todo sea con tal de estar con Miya Osamu, después de todo estaban enamorados.
- Te amo, Osamu.
- Eh... - Osamu dejó de morder el brazo de Atsumu el cual lo golpeaba. - Yo también te amo, Shiori.
- ¡Sigo aquí, bobos!
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