Capitulo 17

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- Muy bien, no todo en la vida es un acogedor agujero, su alteza también vino a ver hoy la destreza de sus guerreros- Una voz habló desde el costado de Milo, el dejó de mirar al sirviente y redirigió su atención al guerrero que empezaba a situarse en pie. Era Aioros, éste sostenía su espada y hacia tronar los duros músculos de su cuello, Camus aprovechando la distracción del rubio rápidamente huyó

Aioros avanzó hacia la tarima de en medio, el gritó:

- Y bien ¿ Quien se anima a estirar los músculos?

Y fue así que empezó la ronda de combates, Milo vió ensimismado cada batalla, bebió vino y sonrió suavemente cada vez que veía a sus guerreros salir victoriosos. Los del clan de hombres lobos eran grandes y poderosos, tratándose de fuerza muy pocos eran los que salían vencedores contra éstos. Camus también veía todo a una distancia prudencial, sosteniendo su jarra de vino. Él buscó la mirada de Degel y cuando la encontró este también lo miró, ambos se vieron por largos segundos. No es la primera vez que el Heredero del norte se quedaba viendolo así, siempre pareciendo mirarlo de una manera que a Camus por alguna razón le estremecía. Incómodo Camus dejó de mirar hacia su actual esposo, a su alrededor las risas se escuchaban distantes y también los vitoreos, solo ellos y los rehenes de la nación del norte no sentían ganas de reír, contrario a eso muchos sintieron una inexplicable amargura en sus corazones.

- Mi turno.

Alguien habló entre la multitud, Camus miró en dirección a la voz, para su sorpresa era el hombre a quien sirvió vino la mayor parte del banquete

- Máscara de Muerte es el más fuerte y sanguinario¡ Nadie puede contra él!

- ¡Déjalo!¡ cayó ante el trasero de uno de los prisioneros del norte!  Déjenlo que consiga su parte

Muchos hombres gritaron inconformes. Máscara de muerte los ignoró, avanzó hacia la tarima y una vez en ella dedicó una reverencia a su príncipe, luego empezó a girar incitando de una manera provocadora a sus demás camaradas: 

- ¿Quién sigue?

- Sigo yo.

Una voz fuerte y varonil se hizo escuchar a su vez que un hombre avanzó a pasos firmes caminando en círculos al rededor de la tarima. Máscara miró los fríos ojos negros que lo veían a través del casco. Es la primera vez que veía a éste soldado

- ¿ Quien eres?

Indagó curioso, Degel giró a verlo, su postura firme y elegante, de alta estatura, espalda ancha y fuerte con músculos en V que enseñaban una cintura  perfecta,  largas piernas enfundadas en un par de botas de cuero. Degel se despojó de su casco arrojando éste aún lado, sus cabellos eran negros como la noche, al igual que sus ojos, su mirada era afilada y congelante.

- Frost, soldado de segunda categoría, quinta división.

Respondió Degel, su aura más amenazante que nunca, Máscara de muerte sonrió nervioso ¿ Acaso él había ofendido al soldado de alguna manera?. Él espetó:

- Bien.

Un poco más arriba la batalla también había llamado la atención de Milo. Frunció las cejas al ver al guerrero de negros cabellos. Tanto su voz como su rostro y cuerpo. Eran idénticos a Degel  Verseut. Milo miró sádicamente, su cuerpo se estremecía de rabia de tan solo pensar en la osadía que debía tener el príncipe heredero del norte al venir a provocarlos en su propia base militar


No muy lejos de él, la reacción de Camus había sido similar. Por poco había dejado caer la jarra de vino debido a la impresión que le había causado. Miró ansioso hacia Milo y hacia Degel que permanecía firme en el escenario. Camus sintió morir de ansiedad, ésta vez era seguro que los descubrirían

Explota en la Sangre (DegelxCamus)Where stories live. Discover now