Capítulo 30

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Naruto escuchó susurros, abrió sus azules viendo que había una cortina a su alrededor, suponía que para ocultar su presencia -no puedo entender, ¿qué clase de misión era Shisui?, Itachi nunca había llegado de esta forma, ¿gastar sus reservas de chakra?, ¿qué demonios fue lo que hicieron?- el comandante veía a su tío con seriedad -tenían que sellar a un demonio, al parecer era bastante poderoso, era la energía negativa de los bijuus, su compañero llegó aún peor, estuvo a punto de morir, pero al final el demonio fue sellado, hokage-Sama me dijo que Itachi se derrumbó aquí en el hospital, dejando a salvo a su equipo, soportó bastante- guardaron silencio -anikki siempre demuestra ser el mejor padre- Fugaku sonrió orgulloso -es verdad Sasuke- Mikoto acariciaba el rostro de su heredero- ser madre de un shinobi en verdad es horrible, cada misión debo pedirle a kami y prometer bastante- sonrieron al escucharla.

-Un día me matarán en serio de la preocupación- Naruto escuchaba como la familia del Uchiha estaba preocupada, sonrió ligero, ahora él también tenía familia, la puerta se abrió dejando ver a la Senju, realizaron un leve reverencia -le agradezco Tsunade-san por cuidar a mi hijo- la rubia negó -yo soy quién está agradecida con él, salvó al mío -abrieron sus ojos con sorpresa, la Senju entró en la cortina, Naruto levantó su mirada, sonrió lindo ligero- ¿cómo te sientes mocoso?- el rubio sonrió -mejor, aún siento mi chakra al límite- la rubia suspiró -serán al menos dos semanas de descanso, sufriste bastante, tus órganos a pesar de estar sanos deben estar bajo vigilancia, desconectamos bastante para inducir el coma, el chakra oscuro fue demasiado, tu red de chakra se siente un poco dañada, supongo la presencia del chakra del demonio, del biju, el de la naturaleza y el tuyo, sobrecargo tu red-

Naruto asintió suponiendo lo mismo- tenemos que hablar, encontré algo en tu sistema- el rubio levantó su mirada, mordió su mejilla con vergüenza -¿se dió cuenta?- la rubia lo vió con seriedad, asintió- mientras no diga nada puedo seguir mi vida normal, no tiene porqué enterarse nadie sensei- la rubia suspiró con fastidio, levantó su dedo, apretó suavemente su frente con la yema de este -mamá, grábatelo, quiero vivir la experiencia completa -Naruto sonrió con diversión, asintió -entiendo, si en un futuro decides retirarla, podemos buscar la manera, aunque siento que Minato también debería saberlo- el rubio asintió -le agradezco, mamá-

Tsunade sonrió -me da estatus, iré con el pervertido, le prometí una cita por traer al tres colas- Naruto sonrió con diversión -sí se pasa de listo aunque sea ji-san, lo golpearé -Tsunade soltó una carcajada -¿ahora tengo a un pequeño guardaespalda?, recuerda que tu madre es poderosa mocoso -se levantó sonriendo- vendré después- Naruto asintió viéndola salir. La Senju vió a Shisui fuera de la cortina -Qué nadie más entre, sigue manteniendo a oso en la entrada -el comandante asintió viendo a la rubia irse, la familia Uchiha veía la cortina con duda- ¿Tsunade-sama tiene hijo?- susurró Fugaku, el comandante carraspeó incómodo -no estoy autorizado para hablar -guardaron silencio entendiendo, eso fue algo sorpresivo, que el clan Senju esté con vida era algo bastante sorprendente, entendían el porqué del secretismo.

….

Naruto veía al huésped en la cama a su lado, observaba su rostro con cuidado, se veía tan serio y apacible cómo siempre, sonrió ligero sin perderlo de vista, su rostro le daba paz, lo vió apretar el ceño y abrir sus ojos lentamente, onix y azules se conectaron, el rubio sonrió haciéndose bolitas en la cobija manteniendo el rostro fuera, Itachi lo vió con atención, se veía adorable -gracias Itachi-san, salvó mi vida- el azabache sonrió, no podía moverse, su cuerpo dolía un infierno -no des las gracias, con ver que estás con vida es suficiente para mí-

Naruto se sonrojó por sus palabras- siempre me ayudas Itachi-san, ya te debo bastantes favores, no sé cómo pagarte- el azabache sonrió ligero- te dije que con ver que estás con vida es suficiente -el pequeño negó -no, debo hacer algo, ya llegará mi turno de ayudarlo- Itachi sonrió- eres demasiado terco y orgulloso, ¿no te haré cambiar de parecer?- el pequeño negó -entonces, ¿te parece si me acompañas por dulces cuando salgamos de aquí?, tal vez también quiera ir a la feria y comer un poco en el lugar- Naruto sonrió quedito -nunca he ido a una, me esforzaré por ganar algún juego -Itachi sonrió -deja de esforzarte, sólo hazlo y que salgan las cosas como tengan que salir, haz dado demasiado de ti, ahora eres poderoso, estás seguramente en la mira del Hokage para sucesor, deja que todo se dé naturalmente- Naruto levantó un puchero -¿no dice eso para relajarme?, Itachi-san también es candidato, aún somos rivales- el Uchiha sonrió -talvez me atrapaste- ambos sonrieron cómplices.

La puerta trató de abrirse, se escuchó una voz conocida- señorita, no puede pasar a esta zona, está restringida- la chica negó a oso -tengo que ver a Itachi-kun, será un momento por favor -el Uchiha volteó los ojos con fastidio -demonios, no se cansa- Naruto lo vió con sorpresa, sintió algo de incomodidad -¿es su novia?, tal vez debería dejar que en… -Itachi negó con velocidad preocupado -no, no es nada mío, no pienses mal- el rubio parpadeó con sorpresa por su reacción -es sólo una fanática que no se rinde- el Uchiha sonrió ligero al ver las enormes gemas verlo con curiosidad- por favor, sólo un momento, estoy preocupada -oso respondió -se encuentra bien, ahora puede retirarse señorita- Itachi veía al pequeño buscando algo que le indicara que había celos en él, pero su actitud le decía lo contrario, cerró sus ojos con frustración, debía ser paciente.

Noppera bo (Itanaru)Where stories live. Discover now