Capítulos Sin censura: Mi Infierno... en el Infierno

Capitulo 75

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(Escuchen: Canon In D)

Eran los que necesitaban estar, no pedía más, bajé la mirada viendo el hermoso vestido de novia que tenía puesto, ahora entendía por que Dina no permitió que lo tocara, era… era lo que hubiera pedido en el día más especial de mi vida, no como el otro que tanta tela me asfixiaba, miré hacia Dimitri, dirigió su mirada hacia mi, brillaban sus ojos tanto que podía ver a través de ellos, esa mirada que por mucho tiempo estaba nublada para mi, ahora se abre con un sentir maravilloso, entregando esa poción de amor que me correspondía, los dos sonreímos, caminamos directo hacia el altar que habían hecho para este momento, era tan hermoso, en verdad cada momento mágico que me hacía seguir en estos momentos me hacías perderme ante la presencia de Dimitri…

Nahir y Valentina con una hermosa sonrisa, Valentina apartaba sus lagrimas, bajé la mirada sintiendo un dolor en mi pecho, pero no era de tristeza, sino más bien en saber que Valentina era la mejor amiga de Beida, que buena o mala, Valentina me ha dado su voto de confianza en llegar a este momento junto al hombre que en verdad quiero corresponder en todo momento. La miré, ella me sonrió asintiendo con la cabeza, Nahir, ni se diga, estaba con las lagrimas a mas no poder. Lo que para ellas debe significar que Dimitri esté frente a un altar conmigo y no con la personas que ellas ya conocían y era parte de su familia, pero en este punto es donde todos tenemos que entender el lugar de cada quien.

Miré hacia el otro lado viendo a las hijas de Valentina, Fiorella con una gran sonrisa, sus hermosos ojos brillosos de amor por su padre, Deani, ufff, mi Deani una preciosidad que no podía evitar esa sonrisa y esos enormes ojos verdes que demostraban la felicidad hacia su padre. Máximo en su portabebe que lo cuidaba la nana. Todos, cada uno los presentes tan importantes para Dimitri como para mi.

Llegamos frente al altar, el cura nos sonrió acercándose hacia nosotros, nos ungió con un aceitito bendito, no sé si este cura sepa quien es Dimitri, pero espero que todos sus pecados hayan sido perdonados en algún momento.

Seal: Estamos aquí ante Dios nuestro señor poderoso, siendo testigos de esta nueva unión de dos personas que se aman y que van hacia una vida llena de buenos y malos momentos, de circunstancias que pueden hacer cada día más fuerte esta relación. Pero sobre todo contar con el uno y el otro para formar la familia que los dos han deseado por mucho tiempo.

Nos hizo seña que nos sentemos, Dimitri muy atento, me acomodaba el vestido, levantó la parte del vestido que había dejado al descubierto mi pierna, rodé los ojos sonriendo, se acercó rosando su mejilla con la mía.

Dimitri: No me gusta que vean lo que es mío.

Le di un golpe en su brazo en forma de juego, él sonrió mirando hacia el frente. respiré cerrando mis ojos tan fuerte, que era como ver a mi madre y a Wellia en este momento, ellas me estaban acompañando en todo momento, quizá no físicamente, pero si en mi corazón y mis pensamientos.

Seal: Hoy estamos frente a Dios, donde cada uno de ustedes ha decidido unir su vida para amarse, respetarse, velar en la salud y en la enfermedad. Así como… Los dos han tenido heridas muy fuertes, cada uno en su versión, pero heridas que han aprendido a curar con la unión y la fortaleza que los dos representan. No hay momento que no digan que el amor es ficticio, que el amor no existe. Claro que existe, pero cada uno lo tiene en diferente manera… Cada uno sabe expresar su forma y su manera.

Dimitri sostuvo mi mano con tanta fuerza, lo miré que él estaba tan atento a las palabras del cura que me bastaba en ver, como la atención de él por momentos bajaba de reojo hacia mi, sonreía mirando de nuevo al cura.

Seal: Tener presente en nuestra mente y en nuestro corazón que el AMOR ES UN DON DE DIOS. “Ni el que planta ni el que riega son nada. Es Dios el que da el incremento”. El hombre no puede vivir sin amor. Él permanece para sí mismo un ser incomprensible, su vida está privada de sentido si no se le revela el amor, si no se encuentra con el amor, si no lo experimenta y lo hace propio, si no participa en él vivamente. Por esto precisamente, Cristo Redentor (…) revela plenamente el hombre al mismo hombre. “El amor es concreto, está más en las obras que en las palabras”. No es amor decir solamente: “te amo, amo a todas las personas”. No. ¿Qué haces por amor? El amor se da”. Podemos hacer esto porque de esta manera ama Dios a su pueblo, cuando lo escogió y también cuando lo perdonó. El amor, de hecho, “escucha y responde, el amor se realiza en el diálogo, en la comunión: se comunica”. Un horizonte que toca primero que nada el mundo de la relación con el otro, subrayando el respeto: “El amor es muy respetuoso de las personas, no usa a las personas, es decir, el amor es casto.

Tragué saliva mirando hacia Dimitri, negó con la cabeza bajando la mirada con esa sonrisa, por que sinceramente así que se diga que castos, castos, pues ni de los oídos, todo en nosotros era como la lujuria que iba rodeando nuestro cuerpo, deseando que llegue el momento de estar solos y aprovechar cada segundo que pudiéramos satisfacer lo que nosotros llamamos necesidad, otros lo llamarán la perdición, pero siempre quiero estar perdida con Dimitri, él ha sabido encontrarme cuando no me hayo. Así que bueno, he conocido la parte casta de él, y él la mía.

Seal: el verdadero amor nos muestra cómo es el Cielo… "el corazón anhela cosas grandes, tan grandes como el Cielo, por eso nada en este mundo lo puede llenar salvo un amor que sea tan grande como para prometer vida eterna". En ese sentido, se dice que "el verdadero amor entre los esposos significa empezar a degustar ese amor de otro mundo en este". "El hombre puede ver en la mujer y la mujer en el hombre un trozo de Cielo, alguien que le complementa y le dice que el amor para el que estamos hecho existe". El matrimonio cristiano de verdad es pre-gustar el Cielo, pero al mismo tiempo la otra persona no puede darme la perfecta felicidad porque es limitada". "A veces esperamos que el otro dé lo que es imposible que dé porque sólo Dios puede dar", les digo y destaco que "el matrimonio es un camino precioso de amor para ayudar al otro a llegar al Amor". "Y es difícil pues requiere dejarse amar como uno es y amar al otro como es, no pasarse la vida tratando de cambiarle y proyectando las frustraciones propias", aseguró. Para concluir, les recuerdo a los futuros esposos que tienen "una gran responsabilidad en su matrimonio de ayudar a la otra persona a ir al Cielo que tanto anhela su corazón".

Asentí con la cabeza, era tan cierto, que no me importaba que dijeran que Dimitri era un Demonio, para mi, era el ángel más bello que halla podido conocer, ayuda a muchas personas, ha salvado muchas vidas, las de Santino, sus hijas y hasta el mismo Bastian, pero la lista de él era interminable y todos estaban tan agradecidos por el simple de echo de ser quien es  y no esperar de nadie algo que no desea.

El cura nos hizo señal de que nos quería de pie, así que nos levantamos, los dos miramos hacia él que sostuvo su incensario, empezaba a removerlo junto a nosotros, los dos bajamos la cabeza en respeto a lo que significaba este signo…

Hasta el aroma de su incensario era tan particular, entraba por mi nariz, armonizando por completo dejando en paz interior, en verdad que me gustaba este tipo de signos de lo católico. Levantamos la mirada hacia el cura.

Seal: Sobre ustedes dejo caer, el incienso del signo de la protección a cada uno.

Nos tomamos de la mano, el cura se dio la media vuelta dejando ese aroma por todas partes, les hizo seña a los presentes que se pusieran de pie, ellos lo hicieron, donde empezó a dejar su aroma igual hacia ellos. Los miraba tan serios que ni pareciera que eran esos asesinos de los que siempre hablan, parecían tan calmados y creyentes que no rompían ni un solo plato.

Se retiró acercándose hacia el altar, lo iba moviendo de un lado y del otro terminando por dejarlo en una de las mesas que estaban a un lado. Se dio la media vuelta caminando frente a nosotros.

Seal: Esta noche, uniremos en uno solo a esta pareja que está frente a nosotros, para contraer el sacramento del matrimonio. TODOS DE PIE.

Las niñas estaban preparadas con las argollas, esperaban ansiosas igual que yo, era el momento más fuerte de la celebración donde nuestros votos también eran parte de este sacramento, ni había preparado nada pero tendría que salir todo de mi corazón.