𝐏𝐚𝐫𝐭𝐞 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 𝐲 𝐔𝐧𝐨

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𝐀𝐫𝐫𝐞𝐬𝐭𝐨
𝐁𝐞𝐬𝐨𝐬

𝐀𝐫𝐫𝐞𝐬𝐭𝐨 𝐁𝐞𝐬𝐨𝐬

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Jeannette había recibido las cosas que había llegado desde el condado Margarita. Su tía había mandado dos sirvientas con las cosas y aunque parecían estar tranquila, también se notaba preocupadas y lo atribuía a lo que ocurrió en la segunda visita de su tía. 

FlashBack

El carruaje de su tía llego al frente del palacio topacio, seguía siendo tal y como lo recordaba. Su tía bajo siendo ayudada por una de las escoltas, llevaba un vestido largo y hermoso, con varias capas de tela como a ella le gustaban y soñaba diariamente en ocupar. Cuando ingreso al pequeño salón de té que tenía el palacio Topacio, la miró.

—Tía— saludo ella con alegría, lastima que aunque estaba feliz de ver a su tía, está misma estaba asqueada con la imagen que tenía frente de ella—. ¿Por qué me ves así, tía?

—Porqué te veo así, ¡Ja! Solo mírate— había dicho ella mientras señalaba el vestido que estaba llevando en ese momento—. Vistes como si fueras una campesina y no la princesa de Obelia 

—¡Pero tía!— exclamó, mirando a la mayor —Esta es la ropa que me ha dado padre, ¡No he podido conseguir nada más!

—¿Qué? ¿Solo te ha dado eso?— pregunto sorprendida, y asqueada —¡¿Entonces porque mando a llamar a la modista más importante al palacio?!

Zenit muerde su labio, bajando la mirada, apretó sus puños.

—¡Debió de ser para esos niños humildes!— chasqueo la lengua molesta y apretó con fuerza su abanico —No encuentro otra lógica, ¡Debe de ser así!

—Ropa nueva, ¡Ellos tienen ropa nueva y yo con estos harapos!

—Niña tonta, tú eres la hija de un condado, no importa si esos niños son hijos de unas supuestas princesas, ¡Puede incluso que ni siquiera sean nietas de los emperadores de Shiodonna!— exclamó, segura de sus palabras, Rosalia 

—Pero tía, se parecen mucho— aseguró Zenit, recordando al hombre y a la mujer que habían escoltado a sus humildes hermanos 

—¡Ja! Mi querida Zenit, ¿No sabes que hay magia que permite el cambio de apariencia de las personas?— la miro —Solo tienes que saber que objeto ocupan más y romperlo, así la farsa acabará 

𝐄𝐥 𝐏𝐫𝐢𝐧𝐜𝐢𝐩𝐞 𝐃𝐞 𝐀𝐭𝐡𝐚𝐧𝐚𝐬𝐢𝐚² «𝐏.𝐄»Where stories live. Discover now