♡Mente Sobre Máscaras♡

Capítulo 32

Marinette POV

La primera nevada que ocurrió esta semana y me emocionó.

París era más agradable durante la Navidad, las decoraciones hacían que la Ciudad de la Luz cobrara vida y la gente era más amable durante esta época del año.

Las cosas entre Damian y yo todavía estaban tensas. No sabía cómo acercarme a él, a pesar de estar tan cerca. Mis padres se habían preguntado dónde había estado últimamente y no podía darles una explicación directa.

En clase guardamos silencio. Entre nosotros no se intercambian bromas, ni bromas, ni palabras.

Damian se estira y el suéter se le arruga en el brazo. Hay un gran hematoma que se extiende a lo largo de su antebrazo, pero Damian, tan rápido y con indiferencia como puede, se baja el suéter para cubrirlo.

Quiero preguntarle si está bien, pero de repente me doy cuenta. Damian tiene un hematoma exactamente donde Robin debería tener uno. Exactamente donde le di una patada en el brazo para quitarle la espada de las manos.

Sin procesar lo que está a punto de salir de mi boca, le pregunto: -¿De dónde sacaste ese moretón?-

Damian responde de inmediato: -Grayson es oficial de policía, me enseña defensa personal. Entrenamos y perdí-. La forma en que lo dice no me convence.

Asiento con la cabeza, -Sólo me estaba asegurando de que estés bien-.

Mi mente está dando vueltas con posibilidades, cuando suena la campana del almuerzo y me dirijo a la biblioteca, porque necesito tiempo para pensar.

Camino sin rumbo, preguntándome si Damian Grayson, en realidad Damian Wayne, podría ser Robin.

Mis ojos se abren cuando pienso en la vez que fuimos a tomar un helado y el mío era rojo, verde y amarillo. Pensé que era una especie de broma porque eran los colores de Robin, pero si Damian era en realidad Robin, tenía mucho sentido. Y Damian Wayne es de Gotham City, al igual que Robin. Esto significa...

Una mano golpea la mesa, interrumpiendo mis pensamientos.

-Maritrash, ¿qué estás haciendo aquí?- Lila se burla por encima de mí.

-Es la biblioteca, se me permite estar aquí-. Respondo, sonando tan aburrido como siempre.

-Estás en mi mesa-. Lila afirma,

Miro a mi alrededor, observando las cuatro mesas vacías que nos rodean. En lugar de señalárselos, decido presionar sus botones: -No eres dueño de nada-.

-¿Está usted seguro de eso?- Ella pregunta y mis venas se hielan. -Toda la clase está bajo mi control. Si grito y me caigo, creerán que me empujaste fuera de mi asiento-, dice Lila con una sonrisa, dando vueltas lentamente alrededor de la mesa.

-No, no lo harán.- Una tercera voz se suma a la situación.

Es mi caballero en brillar armadura. Damián.

-¿Por qué te creerían, chico emo?- Lila intenta insultarlo. Quiero reírme, porque todo lo que viste Damian es negro. A veces gris. Pero no le he visto ningún otro color.

-Porque estaba grabando todo. Si intentas culpar a Mari, puedo garantizar que todos recibirán una copia de esto y sabrán la verdad. ¿No es así, Lily Ross?-

Lila se congela, un ciervo ante los faros. Ella reconoce el nombre.

- ¿Lily Ross? Repito confundido.

-Ganas esta ronda, Marinette. Pero no ganarás la próxima vez-. Lila dice, alejándose enojada.

Damian se acerca y se queda donde solía estar Lila. Parece en conflicto, sin saber si alejarse o sentarse. Tikki me empuja desde el interior de la bolsa y sé que tengo que hacer algo.