Wednesday: El psíquico más fuerte

156- Crackstone III

Luke y Wednesday crearon sus respectivos escudos contra la enorme bola de fuego que ya descendía sobre ellos.

Luke creó un escudo telequinético que se alzó como una barrera transparente, vibrando intensamente. Parecía una pared cristalina que brillaba con un brillo tenue.

El escudo de Wednesday, por otro lado, era de una densa y profunda oscuridad. Cuando los dos escudos se encontraron, su efecto protector se amplificó.

La telequinesis de Luke se entrelazó con la oscuridad de Wednesday, fusionándose para formar una barrera aún más poderosa. Esta fusión emitió un aura extraña: un remolino de blanco y negro que se movía en patrones caóticos pero armoniosos.

La bola de fuego golpeó el escudo combinado con un rugido ensordecedor. Las llamas crepitaron y silbaron al contacto, extendiéndose hacia los lados en una ola de intenso calor. El escudo tembló bajo la presión, pero se mantuvo firme, manteniendo a raya la fuerza del fuego. Finalmente, la bola de fuego explotó en una nube de llamas y energía, una erupción cegadora que iluminó toda la Isla Raven.

Aunque el escudo absorbió la mayor parte del impacto, la explosión lo atravesó parcialmente, abrasando el suelo y prendiendo fuego a los árboles cercanos.

Cuando el escudo se disipó, Crackstone frunció el ceño al darse cuenta de que sus enemigos ya no estaban a la vista. Se quedó inmóvil, con los ojos escudriñando cada rincón de los alrededores, buscando rastros de Luke y Wednesday. La neblina de la reciente explosión todavía flotaba en el aire, haciendo que cada sombra pareciera más espesa y engañosa.

De repente, sintió algo inusual: una sutil perturbación en uno de los árboles altos, donde las sombras parecían moverse de forma antinatural. Al principio, dudó, pero agudizó sus sentidos y finalmente detectó un zumbido débil y creciente.

Al centrar su mirada en el árbol, Crackstone pudo distinguir una distorsión en la oscuridad: exactamente donde Luke y Wednesday se escondían.

Wednesday los había envuelto en un velo de camuflaje sombrío, una negrura que se mezclaba a la perfección con las sombras del bosque.

Solo alguien con sentidos tan agudos como los de Crackstone podría haberlos encontrado tan rápido. Pero para entonces, ya era demasiado tarde.

Luke ya había ganado los segundos que necesitaba para concentrar su energía en una esfera telequinética vibrante, zumbando y lista para ser liberada.

Lanzó el orbe telequinético hacia Crackstone. La esfera se disparó hacia adelante con una velocidad impresionante, casi desdibujándose mientras cortaba el aire.

Wednesday actuó simultáneamente, liberando tres orbes de oscuridad, cada uno del tamaño de una pelota de baloncesto, que siguieron al orbe telequinético como satélites oscuros.

Crackstone intentó moverse, flexionando su cuerpo en un intento de esquivar el orbe telequinético, pero los orbes oscuros de Wednesday lo hicieron mucho más difícil. Las tres esferas oscuras actuaron como anclas invisibles, tirándolo en diferentes direcciones.