Demon Slayer: El viaje silencioso

141 Lirio araña azul

[Punto de vista de Seiji]

"Hay demonios en este mundo, criaturas que se alimentan de carne humana. Cazan de noche, matando gente para saciar su hambre insaciable. Para combatir a estas criaturas y proteger a la humanidad, se creó nuestra organización, Demon Slayer Corp". Comencé mi explicación a Kie Kamado.

Le expliqué con un poco de detalle qué eran los demonios y cómo se los podía matar con la luz del sol o usando una espada específica. Aunque podrías pensar que era innecesario, era necesario para calmar su preocupación.

Imagínate que alguien te dijera que los demonios existen pero no te dijera cuáles son sus debilidades ni cómo combatirlos. Al menos, cuando supo que los demonios no eran todopoderosos, se sintió un poco aliviada.

También le informé de mi puesto en la organización, que sólo está por debajo del de máster, y le expliqué el motivo principal por el que quería hablar con ella en primer lugar.

—El demonio vino específicamente para matar a tu familia —dije.

—¡¿Qué?! ¿Por qué? —preguntó, sin que su rostro indicara por qué un demonio los atacaría.

"Descubrimos que tus antepasados ​​tenían una conexión con Demon Slayer Corp en el pasado. No sabemos cómo, ya que fue hace mucho tiempo. Pero sé que Hinokami Kagura es una técnica de espada oculta en una danza", dije, contándole cosas que necesitaba saber de ahora en adelante.

"Entonces tu familia será trasladada al Cuartel General de Demon Slayer para que podamos protegerte. Los demonios no se detendrán, vendrán por ti nuevamente", dije y después de un momento de silencio, ella asintió.

"Entiendo,"

Eso era mentira, ella no entendía nada. De hecho, todavía estaba en medio de la asimilación de la existencia de los demonios. Pero confiaba en mí, así que estaba de acuerdo con todo lo que yo decía. Supongo que valió la pena cultivar su confianza al final.

"Y por favor, escucha atentamente lo que voy a decirte a continuación. El demonio que vino a por ti no solo tenía como objetivo asesinar a tu familia, sino que también buscaba algo. Algo que estaba seguro de que tú sabrías", dije y la miré fijamente a los ojos.

Intento no parecer tan desesperada pero quizá fallé con las emociones que leí en su rostro.

—Una flor, un lirio araña azul. Permitirá a los demonios arreglar su única debilidad que es el sol —dije y pude ver que ella sabía de qué estaba hablando.

-¿Sabes dónde está?- pregunté y ya sabía que ella lo sabía.

Ella permaneció en silencio por un largo rato, preguntándose cómo responder a mi desesperada pregunta. Parece que hay algo complicado en la ubicación de la flor.

"Sé dónde está..." dijo finalmente.

"Llévame allí"

Ni siquiera esperé su respuesta y la tomé en brazos. Mi cuerpo me dolía en señal de protesta, pero le dije que se fuera a la mierda. No descansaría hasta conseguir esa flor, hasta que estuviera seguro de que había una oportunidad de ayudar a mi mejor amiga después de haber cometido un error tan grave.

Corrí a través del bosque destruido con Kie en mis brazos. Ella era mi guía, me decía a dónde ir y qué montaña escalar. A diferencia de lo que pensaba anteriormente, la ubicación de la flor estaba a una distancia considerable. Requería atravesar rutas complicadas y cuevas para llegar allí.

No estaba en condiciones de moverme rápido, así que cuando llegamos a nuestro destino, el sol ya estaba en el horizonte, indicando que era temprano en la mañana.

Llegamos a un claro oculto al borde de una montaña, al que solo se podía acceder a través de una cueva. Desde allí, podíamos ver el terreno que había debajo y el río que bajaba por la montaña.

Era un lugar hermoso. La luz del sol se reflejaba en el agua y el brillo blanco de la nieve hacía que pareciera que brillaban como joyas.

Y, sin embargo, no pude tomarme un momento de respiro para disfrutar de la vista. Toda mi atención estaba centrada en la única planta que había en el pequeño claro. Parecía una planta normal, salvo por los pocos capullos de flores que vi en ella.

Mis ojos atravesaron la tierra y vi los restos de alguien debajo de la planta. Llegué a la conclusión de que se trataba de una tumba de alguien importante.

Me volví hacia Kie y le pregunté: "¿Es esto todo?"

"Sí. La flor que estás buscando, el lirio araña azul, solo florece unas pocas veces al año y, además, solo durante el día", me informó.

Sentí que la realidad desterraba mi ilusión de encontrar la flor y convertir a Rengoku en humano lo antes posible. Por supuesto, no sería tan fácil, pensé.

"Ya veo", dije. Aunque era una lástima no poder conseguir la flor ahora, al menos sabía dónde estaba.

"¿Sabes cuándo florecerá la flor?", pregunté a lo que Kie asintió.

"Por supuesto. En nuestra familia siempre hemos tenido la tradición de cuidar las flores y llevar a nuestros hijos al menos una vez en la vida a verlas florecer", dijo y sentí que me quitaban un peso de encima.

Puedo trabajar con eso.

"Gracias", dije y centré mi mirada en la flor. Estudié la planta lo más que pude, tratando de ver qué la hacía diferente del resto.

Muzan y yo perdimos la batalla. Él no pudo matar a la familia Kamado ni a nadie más, mientras que yo no pude matarlo a él. Pero, al mismo tiempo, ambos ganamos algo importante de la batalla.

Muzan obtuvo información sobre nosotros en la batalla. Ahora sabía sobre las marcas de Demon Slayer e incluso sobre mi Respiración Solar. La próxima vez que nos encontremos, será mucho más cauteloso y peligroso.

Por otro lado, salvé a la familia Kamado, obtuve la sangre del mismísimo Rey Demonio y encontré la ubicación del lirio araña azul.

La flor fue un punto de inflexión en este mundo. Podría ser la clave para crear una poción que pudiera convertir al Rey Demonio en un ser humano, tal como lo convirtió en un demonio hace mil años.

O podría ser mi carta de triunfo si me encontrara incapaz de derrotar a los demonios.

Muzan se convirtió en un demonio al consumir el lirio araña azul. ¿Podría hacer lo mismo si comiera uno? ¿O podrían Shinobu y Tamayo recrear la poción que convirtió a Muzan en un demonio?

No me importaba convertirme en un demonio si eso significaba que podía aniquilar a los demonios que provenían de Muzan. Lo odiaba tanto ahora. Le otorgó el mismo destino a mi mejor amigo.

"Pero por ahora,'

Me desplomé en el suelo. Kie inmediatamente se acercó a mí y me prestó su cuerpo para apoyarme.

"Estoy exhausto"

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