Jueves

Capítulo 4

Miércoles,10 de marzo del 2004.

Ya era otro día, David se había levantado tarde, de nuevo, había tenido un hermoso sueño con la chica del tren, como el mismo la había llamad.

Cuando el hombre vio la hora salio disparado de la cama,cayendo torpemente por tener las sábanas enredadas entre sus piernas, aun así se levanto y se fue corriendo hacia el baño a asearse.

Ya limpio y despierto completamente David, se dirigió a su dormitorio rápidamente a buscar que ponerse,el chico no estaba ansioso por llegar temprano al trabajo, no,el quería llegar a tiempo para poder encontrarse de nueva aquella chica que llamo tanto su atención ayer.

(...)

Por otro lado la hermosa chica estaba tumbada en su cama con un fuerte dolor de cabeza y en la parte baja de su espalda, la raíz del dolor no lo sabia, solo había llamado al trabajo para avisar de su fata y tomar el día libre,ya mañana ella sabia que estaría mejor pero su día seria fuerte ya que todo lo que tenia para hoy lo había pospuesto para el día siguiente.

(...)

Ya David estaba en la estación del tren,el rizado esperaba con ansias al la rubia, llevaba mas de 30 minutos esperando al parecer su esperanza de que ella aparecería en cualquier momento.

El muchacho se volteo y se dio cuenta que una mujer anciana lo estaba observando con ternura y curiosidad.

El tren llego justo en el momento de que el chico le iba hablar a la mujer, todos entraron y el chico perdió las pocas esperanzas que le quedaban al no ver a la rubia entrar.

En cambio a eso la señora se sentó al lado de el.

-¿La esperas verdad?.-le dijo la señora llamando al distraído chico.

-¿De que habla?.-murmuro el chico mirándola confundido,claro que el sabia perfectamente de que la mujeres anciana hablaba.

-A ella, a la rubia de ojos azueles.-informo la mujer, riendo un poco ya que el chico obviamente se estaba haciendo el desentendido.

-N-no se de que habla.-tartamudeo el chico, el solo nombramiento de Bianca lo ponía nervioso, se sonrojo al darse cuenta de la mujer ya lo había descubierto.

-Por lo visto no vino hoy.-murmuro la señora buscando a la joven por todos lados del vagón, sin éxito alguno.

Volcó su vista de nuevo al muchacho y se percato que el muchacho de nombre desconocido estaba haciendo lo mismo que ella hace unos segundos, clara que los dos consiguieron el mismo resultado.

La señora de edad vio al muchacho de la misma forma que vio a la chica, con ternura y admiración,ternura por estar buscado a un segura desconocida,y admiración al darse cuenta que el amor qué los dos jóvenes poseían las mismas similitudes que tenia el noviazgo y matrimonio con su difunto y amado esposo.

Una lagrima corrió por la mejilla de la mujer al recordar como comenzó todo, como ambos se conocieron,rio ante el pensamiento que fue ella que tomo el primer paso,recordó también sus momentos felices, cada abrazo,beso y te amos que salió de la boca y del corazón de ambos, recordando su hermoso matrimonio y cuando nacieron sus hijos, cuando conoció a la familia de el, y el día de la boda cuando ella creyó que en cualquier momento el la dejaría plantada en el altar,recordó y revivió en su mente cada una de las cosas que sucedieron con el amor de su vida, con el hombre que después de todo cumplió su promesa,"Que nadie ni nada los separaría,solo la muerte".

Una mirada melancólica se posó en sus ojos y una lagrima solitaria se volvió abrir pasó dibujando un camino mojado por la mejilla de aquella noble mujer,que recordaba una vida junto a su alma gemela que tristemente se fue por una enfermedad que lo arrastro sin el quererlo,que se llevo a un gran hombre, un asombroso amigo, un fabuloso amante y por sobretodo las cosas el mejor amor que ella había podido tener.

-No la dejes escapar hijo.-volvió a hablar la mujer de avanzada edad después de un rato recordando toda una vida con su amor, logrando tomar la atención de joven hacia ella.-No dejes que ella tome el primer paso.-la mujer llamada Anne poso su vista a la dirección donde se encontraba David.

El muchacho pensó que la mujer estabas loca o que no debía tomar en cuenta lo que decía, pero en realidad todo lo que decía era verdad, no podía dejar escapar a la hermosa mujer que usurpo en sus sueños la noche anterior, el tenia que convertirse en un caballero, en quien tomara el primer paso y no dejarla a ella, eso seria totalmente descortés, aparte que lo haría a el quedar ante los ojos de la rubia desconocida como un total patán...Y eso no lo quería el,no claro que no, a el le gustaba la chica y había algo en la mirada de la chica que lo atraía y casa vez que la muchacha posaba sus ojos en el había algo inexplicable que hacia querer que ella jamás la apartara de el, no sabia si eran esos bellísimos ojos azules quienes lo atraían o todos los secretos que el quería saber, aun no sabia,que era lo que hacia que la atención de el solo se posara en ella.

-Ella..-el muchacho se quedo en aquella palabra dándose cuenta que no sabia donde se encontraba ella, montones de preguntas, dudas y preocupaciones....

¿Y si le había pasado algo?...¿Y si al ir ayer en la noche a su casa le ocurrió algo?...¿Y la había...?,no eso no podía ser, su instituto de protección se activo justo en el momento de que esas preguntas y dudas comenzaron a llenar y a atormentar su cabeza.

Sacudió su cabeza de un lado a otro dispersando cada una de esas ideas, pero su instinto de protección y preocupación en ningún momento se fue en cambio creció grandemente,haciendo que al muchacho se le oprimiera el corazón.

-Ella, es una buena chica hijo y aunque me tomes cómo loca.-continuo Enna por el y lo miro con ojos soñadores, en los ojos del chico la mujer vio preocupación y angustia.-Pero los dos están forjando un amor que rebasa,las fronteras que ambos pudieron entre si.-culmino la señora,dejando un buen rato pensativo al joven con quién charlaba.

-Yo..-Justo antes de que David le dijera a Anne que ella tenia razón,que el comenzaba a sentir algo por la ojiazul. El recorrido en el tren acabo dejando a todos los pasajeros en su respectiva estación y al chico con las palabras en la boca..

...