Sexomnia // Ashton Irwin

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Desperté debido a la falta de sueño. Ashton estaba a mi lado, abrazándome por la cintura. Aparté cuidadosamente su brazo de mí, para no despertarlo.

Me senté en la orilla de la cama y sonreí al recordar la noche anterior, no me cansaré de decirlo jamás... Bendita sea la sexomnia de Ashton.

Abrí el cajón de la mesita de noche que se encontraba al par de la cama, para sacar alguna de las pastillas de emergencia, ya saben, para cuando no usas condón.

−Mierda –exclamé por lo bajo. Ya no había pastillas, se me habían acabado muy rápido.

Tendría que ir a comprar más. Me cambié el pijama con lo primero que encontré y tomé algunos billetes de Ashton, seguro no le importaría.

Salí de la habitación y caminé hasta el elevador del hotel. Las puertas se abrieron y me encontré con Michael, se veía cansado y al parecer traía resaca.

−Hey –saludé.

−Hey –contestó y salió del elevador− ¿A dónde vas?

−A... No te importa, ¿O sí? –levanté una ceja.

−Tienes razón, no me importa. –rió un poco, pero después soltó un gemido de dolor y se tocó la cabeza− En fin, ¿Ya hicieron las maletas? Las vacaciones casi acaban y tenemos que volver a Sidney mañana.

−Hmm... No, no las hemos hecho, pero cuando regrese le diré a Ashton, eh... ahora ya me voy –sonreí un poco nerviosa.

Mike asintió y yo subí al elevador.

-~-

Las puertas del elevador se abrieron y salí de este. Caminé por el pasillo hasta la puerta de nuestra habitación y la abrí.

¿Qué mierda? –pensé.

Ashton estaba sentado en la orilla de la cama, en sus manos tenía una cámara de video, él estaba llorando mientras veía lo que sea que estuviese viendo.

− ¿Ash? –lo llamé.

Dio un pequeño brinco al percatarse de mi presencia. Dirijo su mirada hacia mí, sus ojos estaban rojos y salían muchas lágrimas.

− Ashton, ¿qué tie... −me interrumpió.

− ¿¡Qué es esto, Narissa!? –se levantó furioso y se acercó a mí, me mostró la cámara.

Quedé paralizada. Mis ojos se abrieron más de lo normal y presentía que en cualquier momento comenzaría a llorar. Tapé mi boca y de poco a poco comenzaron a salir lágrimas, como lo había presentido.

− ¡Respóndeme, Narissa! –lanzó la cámara a la cama y me tomó de las muñecas apretándolas.

−Me duele... −susurré.

−Me importa una mierda que te duela, ¡explícame todo! –estaba furioso, pero las lágrimas seguían saliendo de sus ojos.

−Cálmate, por favor...

− ¿¡Cómo quieres qué me calme!? –gritó furioso−  ¡Es como si me detuvieras violando! -me soltó y cayó al piso llorando.

Tomé la cámara de la cama, era de visión nocturna, al parecer Ashton la había colocado en algún lugar y nos grabó por la noche mientras teníamos sexo, y él estaba dormido.

Pausé el video y dejé la cámara donde mismo.

Me acerqué hasta Ashton, el seguía llorando en el suelo. Me agaché a su altura y aparté su cabello de su cara, pero al hacerlo el apartó mi mano de él con asco. Eso me dolió y me dieron ganas de llorar más.

−Ashton, déjame explicártelo, pero cálmate...

Pareció pensarlo un poco, pero asintió. Se levantó del suelo y se sentó en la cama.

−Tienes mucho que explicar, Narissa. –dijo frío. Estaba muriéndome internamente.

Me senté a su lado y respiré profundamente.

−Ashton, tú tienes sexomnia.