Mi Príncipe Azul [#2]

Capitulo 19

  Levante la mirada, la última vez que escuche su voz fue en aquella llamada telefónica, aquella que no debí haber contestado. Me encontré con sus ojos, esos ojos que lograban derretirme, y que ahora están completamente vacíos. ¿Dónde esta esa mirada que me ponía completamente nerviosa? Siento la respiración acelerada y las ganas de llorar me abundan, mi cuerpo tiembla de nervios. –Vineexactamente por eso, es hora de hablar Zo-Dijo con serenidad, no es él, es completamente otra persona, sus ojos, su voz, me resultan completamente vacíos. ¿Qué le paso a mi Ian?

-No tengo nada que hablar contigo-Conteste de la misma forma, completamente lo contrario a lo que siento. –Y suéltame-Dije zafándome de su brazo. Él fijo su mirada en mi, observa cada fracción de mi rostro con la mirada perdida. Luego de un momento volvió a mirarme a los ojos. Ahora parece triste.

-Tienes un prometido-Susurro. Un nudo apareció en mi garganta y mis ojos comenzaron a humedecerse lentamente. –Dijiste que no ibas a casarte-Dijo en el mismo tono y agacho la mirada hacia un costado. Me parte completamente el alma, pero debo ser fuerte, aun sigo muy enojada y dolida por él.

-Eso no es problema tuyo-Mi respiración se me entrecorta pero mi voz sonó mas fría de lo que esperaba. Levantó la mirada y me observó con desconcierto, movió su cabeza de un lado al otro negando.

-Zoe tú no tienes porque hacer eso-Dijo en un susurro pero en forma enojada. Levante la mirada y me encontré con su mirada perdida. Se siente raro, sus ojos están fijos en mi dirección pero no esta mirándome, su cuerpo esta junto a mi pero parece estar a kilómetros de distancia.

-Esto no es problema tuyo Ian-Trate de conservar el mismo tono de voz, pero comienza a fallarme. Revise cada fracción de su rostro. Esta congelado, sus ojos perdidos, siguen sin observarme, está concentrado en otra cosa. Observe sus ojos, están brillando más de lo normal. ¿Son lágrimas? No puedo evitar fruncir el ceño levantando apenas mis cejas, y apretar mis labios, mis ojos se llenaron completamente de lágrimas, me está partiendo el alma. "-Eso no es problema tuyo-.-Claro que si, Zoe, nosotros...-No somos nada" Recordé aquella discusión, ¿Estará pensando en eso? Parpadee y una lagrima cayo por mi mejilla, en ese momento él reacciono, me moví solo un poco y seque aquella lagrima, no quiero que me vea llorar. Él simplemente me observa, ahora si lo esta haciendo.

-Todo lo que tenga que ver contigo es problema mío Zo-Susurro, firme y completamente serio. Esta frunciendo el ceño, sus cejas están casi unidas en una línea, y ha quitado su mirada de mí. Moví mi cabeza de un lado a otro negando.

-Ian... eso no es verdad, no es necesario, tu y yo ya no somos...

-No lo digas-Me interrumpió. Su mirada esta en el piso, no puedo ver su expresión. –No podre soportarlo una vez más-Susurró y su voz fue apenas audible. 

Levanto la mirada y se acerco un poco a mí. Tengo la vista nublada, las lágrimas me obstruyen la visión. Esta muy cerca de mí, pero aun así no puedo sentirlo, ni siquiera su respiración, es como si realmente no estuviera. Está observando cada fracción de mi rostro sin siquiera moverse. Levanta su mano y la deja suspendida cerca de mi mejilla. Entrecierro los ojos, quiero volver a sentir una de sus caricias, pero no lo hace. Vuelvo a abrir los ojos, él me está observando perdidamente. Un sollozo sale de mi sin que pueda contenerlo, no quiero comenzar a llorar, pero siento que en cualquier momento ya no podre retener las lágrimas, odio que me vuelva tan débil, odio sentir este nudo en la garganta. Con sus dedos corrió un poco mi flequillo que está molestando mi visión. Lo hace lentamente sin tocarme. Quito mi mirada de sus ojos, bajo la mirada y observo estúpidamente mis pies, mientras que una lagrima cae por mi mejilla.