Victima de mi Silencio

Mi primer día

Otro día mas sobreviviendo a la misma mierda de vida. Era la primera vez que iba a un psicólogo por mis tendencias suicidas y la verdad que tendría que estar nerviosa como otras chicas, pero yo era diferente y sabia que me divertiría con el idiota al cual le pagan por escuchar y asentir.

Estaba sentada en una silla en la recepción esperando a que me llamen, mientras me tocaba las heridas en el brazo, por alguna razón eso me daba fuerzas, me daban esperanzas y aunque sea retorcida la idea, si, me da esperanzas porque pude sobrevivir aunque dudo que esto no me va a durar por mucho tiempo,aunque al tocarlas también me recuerda mi calvario, mi dolor , mi desesperación.

La puerta del consultorio se abre y un señor de unos 35 años, en forma, ojos castaños al igual que su pelo , salio con un papel en su mano en donde al parecer era la siguiente. Me levante y lo seguí.

La habitación no era algo fuera de lo común, en la misma mierda profesional que lo rodea y le levante su estúpido ego. Así que si quería información de mi, pues que vaya haciéndose la idea de que no se lo pondré fácil, me senté en una silla mientras que el ya estaba en frente de mi en otra.

Se que tenia mi cara de "no me jodas" pero me canse que la gente vea mis brazos y me miren con superioridad como si la perfección fuese una virtud y no una simple etiqueta.

-hola Maia, mi nombre es Esteban y voy a ser tu psicólogo personal. -- Asentí.

-En el informe en la cual me ha dado el señor Browne, dice que te auto lastimas, que no eres feliz,que no tienes amigos y tienes sensaciones de soledad .... a que se debe eso?

- a nada.

-¿ como que nada?¿ como puedes decir que no pasa nada, teniendo todos esos cortes en tu brazo ?

- te lo digo de la misma manera en la cual tu finges que te importo.

Esteban me miraba a los ojos buscando alguna señal de que esto podría mejorar, pero a los minutos se rindió , porque se levanto y se fue a su escritorio a buscar algo

-No me vas a decir nada no? .--Mientras buscaba en su escritorio

-No

En unos de los cajones encontró la carpeta que estaba buscando y al mirar unas hojas dentro de ellas ,sonrió y volvió a acercarse a su asiento, enfrente mio.Supe que algo tramaba porque juro por lo que mas quiero que le brillaron los ojos como cuando un tigre ve a su presa.

- Pero sabes el gasto que le proporcionaras a tu madre, la angustia que le causaras cuando uno de los mejores terapeutas no puede hacer nada ante su pobre hija

Esas palabras me molestaron y no fue el simple hecho de que Esteban notara mi reacción sino la manera en la cual hablo de mi madre como si fuese la típica madre preocupada y cariñosa cuando en realidad es una hija de puta que no piensa mas que en ella.

Me levante de la silla y me acerque a el con todo el odio en mis ojos y le dije

-No tiene ningún derecho hablar así de esa mujer,ni mucho menos hablar de cariño. No sea idiota, no quiero volver hablar de ella sino de lo contrario me largo de aquí. y por cierto, quiero el dinero que por lo visto le tiraron en sus bolsillos por escuchar y afirmar que estoy o no en lo cierto.

Me miro de arriba a abajo y me hizo una pregunta totalmente inesperada ...

- OKEY,puedo ver tu brazo?

Ese cambio de tema me desconserto por unos segundos debido a que al tocar un tema delicado para mi y mas que haya salido con esa pregunta cuando tenia mi guardia baja causo que miles de recuerdos, miedos,dolor,sangre,lagrimas caigan como gotas de lluvia en mi cabeza pero de todas maneras Me remangue la blusa y se las mostré, parecía alguna clase de mapas con rutas , debo confesar que tenia miedo de lo que diría pero aun así lo hice porque tenia que aprender que esto no tenia porque sentirme avergonzada , al fin y al cabo todos llevamos cicatrices , solo que algunas (en su mayoría) no se ven y lamentablemente esas son las peores. El solo las miro sin mostrar ninguna reacción , aunque me cueste decirlo, ese pequeño detalle marco la diferencia y hasta me gusto porque al mirarme a los ojos de nuevo no veía que me iba a juzgar , así que volví a sentarme.Pero el se levanto y se sentó en el sillón que se encontraba atrás mio y me pidió que me sentara a su lado , lo hice.

-Puedo tocarlas?

lo mire extrañada y confundida, no es que tenga un expediente con miles de terapeutas en la cual estuve pero sabia que esto no es algo que ellos harían por rutina,pero levante mi brazo y le deje que me tocara, sus dedos eran frágiles ante las montañas de las cicatrices, algo en esa caricia me tranquilizo, y no pude dejar de mirar como el las tocaba, tan débil , tan frágil.

Cuando dejo de tocarme me sentí vacía, necesitaba volver a sentir ese calor, por alguna razón mi cuerpo, mejor dicho mi brazo necesitaba de esa caricia porque por primera vez no soy la única que las toca, la única que las mira sin juzgarme, sin entenderme ...

-Te duelen?. --me sorprendió su pregunta y cabizbaja le respondí.

-no, pero las cicatrices no es lo que duele.

(podría decirse que esta es una parte de mi primera sección pero para que puedan entenderme les contare el porque de mis cortes, el porque de mis ideas o pensamientos, el porque de mi silencio y el porque de mi sufrimiento. Una amiga una vez me dijo que el mundo se divide estrategicamente en basura ,osea una total mierda. Y la verdad la frase no se aleja demasiado de la realidad o si?)