Capitulo 17. Finn y Fann.

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Haytlin.

- Pero, ¿Qué haces aquí?- le pregunto cuando dejamos de abrazarnos, pero no aparto mis manos de ella. Me parece tan irreal que esté aquí.

- ¿Además de que mi supuesta mejor amiga no me escribe o llama últimamente? - me lanza una de sus miradas acusadoras - Nada, realmente. Sólo mudarme aquí.

Sus palabras me dejan en shock.  Mi boca se abre tratando de formular una oración en respuesta, pero nada sale de ésta. Ni siquiera sé cómo reaccionar ante esto. No quiero emocionarme para que al final resulte ser una broma, aunque ahora mismo mi yo interior está saltando de la emoción.

- ¿Mudarte aquí? - miro a papá y a mamá en busca de respuestas.

- ¡Sí!

- ¿Cómo? ¿Por qué?

- En resumen, tus padres le hacen un favor a los míos - tuerce el gesto -, pero, ¿Eso qué importa? ¡Ahora vamos a vivir juntas! - pone sus manos en mis hombros y me sacude con entusiasmo.

- ¿Esto es en serio? - miro a mamá y a papá, que ahora entró a la habitación y me mira con la misma sonrisa que mamá.

- Claro que sí - responde mamá.

- Estoy tan feliz por eso - expreso y abrazo a Ceila  -. No sabes lo difícil que ha sido, de verdad.

- Y por eso ahora yo estoy aquí; para que me cuentes todo.

No perdemos el tiempo, subimos a mi habitación y comenzamos a ponernos al día con todo. Ella me contó de cómo van las cosas en casa, y yo traté de explicarle de varias cosas de aquí.

La verdad es que no quería entrar en detalles con algunas cosas que han pasado para no amargarme la noche. Omito algunos detalles para luego.

(...)

- Oh, Dios, mira que hora es - dice ella mirándo el reloj -. Es mas tarde de lo que creí.

- Estúpida, esa es la hora de aquí - le digo propinándole un golpe en la cabeza.

- Sí... cierto. Olvidé que hay horas diferentes.

El timbre de la casa suena y llama la atención de Ceila.

- ¿Quién es? - me pregunta curiosa.

- No sé, Ceila, no soy adivina - agarro mi celular y verifico varios mensajes.

- ¿Y si vamos a ver? - se inclina hacia mi con la mirada atenta. Sé que si no me levanto y voy con ella, ella irá a ver de todas formas. Unas de las cualidades más grandes y destacadas de Ceila es, sin duda, su curiosidad. Con ella no hay un "la curiosidad mató al gato" en la manga.

Resignada me levanto la cama y Ceila me regala una amplia sonrisa. Bajamos las escaleras y nos encontramos con mamá y los gemelos.

- ¡Oh! ¿Ellos son Finn y Fann? - me pregunta Ceila, y no disimula al hacer la pregunta en voz alta frente a ellos.

Finn y Jack fruncen el ceño, ambos divertidos.

- ¿Finn y Fann? - cuestiona Jack con diversión.

Recuerdo un día, los primeros días en los que estuve aquí, para ser exactos; hablé con ella y había puesto unas fotos de ellos. Parece que con la mala recepción ella sólo alcanzó al escuchar el nombre de Finn. Todos los gemelos o mellizos que Ceila y yo conocemos tienen nombres demasiados obvios y similares, así que, supongo que Ceila encontró lógico que Jack fuera "Fann".

- Es que ella nunca se supo el nombre de Jack - les digo.

Ambos asienten comprendiendo, pero no dejaron de sonreír por ello. Finn, como, supuse, señala a Jack con burla.

Locos por Ella= Yo la vi primero. [Gemelos Harries]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant