Desastres (Rubelangel) Parte 5

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PARTE 5

Rubén le había exigido el celular a Mangel casi arrebatándoselo, entro a twiter con la cuenta de su amigo, no podía creer las menciones que este tenía con fotografías suyas y su pierna a la vista de todos, las imágenes eran borrosas lo que le daba un aire drogado a su rostro y su pierna faltante en algunas cubierta por las sabanas pero en otras, por lo que dedujo de los videos que también encontró, destapada por el ajetreo que la gente había creado, había caos, personas que preguntaba como estaba, se mostraban preocupados, hasta ahí todo parecía lógico hasta que comenzó a ver capturas de noticias, los medios regaban por todos lados esas imágenes retorciéndolas, gente que ponía que él se veía drogado, especulaciones en donde decían que parecía estar bajo una especia de sobre dosis, salió de twiter para entrar al buscador de internet, a YouTube, los reporteros, noticieros, programas de espectáculos, heaters e incluso otros Youtubers retorcían y hacían especulaciones de su estado a base de esos videos y las fotografías ligando con enfermas teorías el por qué su desaparición repentina después del terremoto que había atacado Madrid, algunos compadeciéndole otros juzgándole de drogadicto, de inhumano, incluso personas que se habían dedicado a escarbar y sacar heridas viejas de lo más profundo de las entrañas de sus historia, escándalos, insinuaciones, argumentos de que se veía venir por ese estilo de vida extraño de los Youtubers de fiestas sin fin, es asunto con Jen, fotografías que no sabía de donde las habían sacado de el en su infancia, con su hermana, con su madre, memes con sus videos haciendo mofa de su pierna, mapas sin fin incluso de happy weels muy retorcidos, y todas estas teorías también se colgaban de Mangel, acusándolo de ser el que le ayudaba, quien le aplaudía su comportamiento, quien tal vez incluso detrás de cámaras le incitaba a hacer todo aquello, siguió leyendo sin parar se había aislado tanto del mundo desde el accidente que no podía creer el caos que estaba reinando afuera durante su ausencia, Mangel era nombrado en muchas partes como el que le manipulaba a hacer todas esas acusaciones falsas y enfermas incluso gente que le culpaba diciendo que abusaba de la confianza de el para parecer ser el héroe del día siempre, haciéndole sentir una marioneta de su amigo, el que seguro le intento tapar esa sobredosis que le había llevado al hospital...

MAL EJEMPLO, ENFERMO, MISOGINO, ADICTO, DESCONTROLADO, MANIPULABLE...

-Que mierda está pasando? Que está pasando?...

La clásica máquina que marca el pulso empezó a sonar de manera acelerada y Rubén empezó a hiperventilar, sentía frio en la punta de los dedos de manos y pies, sentía vértigo, sus poros se la habían erizado, su piel había perdido el color, sus ojos estaba abiertos de par en par dando la sensación a quien le mirase que estaba a punto de sufrir un ataque de histeria, Mangel le retiro el teléfono y releyó lo último que su amigo había estado examinando, su rostro no pudo ser peor que el de Rubén hasta que a este último se llevó la mano al pecho enterrándose los dedos, la máquina que marcaba su pulso se volvió loca soltando un ruido de alerta mientras la nariz de Rubius comenzaba a sangrar...

-Rubiuh! RUBIUH!- Mangel boto el teléfono mientras el enfermero corrió hacia ellos, evitando que Mangel se le acercara- QUE LE PASA!!

-Está teniendo un infarto!!- Mangel se quedó frio, repentinamente sus oídos se habían tapado mientras oía como en ecos al enfermero presionar la alarma de las enfermeras mientras pedía ayuda por radio.

Todo lo que sucedió después Mangel solo pudo percibirlo como si lo viese atreves de un cristal, una película en cámara rápida de la que el solo era el espectador, la puerta de la habitación fue abierta de forma estruendosa entrando enfermeras y lo que el creía doctores con una maquina extraña y medicamentos pero en la habitación no solo ingreso el personal del hospital, varios enfermeros intentaron contener la avalancha de personas que había corrido junto con ellos a la habitación, solo veía la habitación bañarse de luces de flash, de voces de gente, de gritos que pedían espacio para atender al joven dentro que ya había dejado de retorcerse y ahora lucía un aterrador color blanco mientras su cuerpo parecía completamente maleable, derramarle, como una marioneta de trapo bajo las manos de los doctores y la extraña máquina que inundaba de shocs eléctricos su pecho ahora desnudo y libido cubierto de gel brillante, el sonido uniforme de la máquina de pulso le taladraba los sesos en una nota eterna que parecía jamás tendría fin, los enfermeros lograban controlar la gente que empujaba para entrar en el cuarto en el instante en que para Mangel el suelo se desvaneció, vio todo aquel infernal espectáculo difuminarse mientras se hundía en la nada al final solo vio más luces centellantes y por último el sonido infinito volver a marcar un débil pero constante ritmo...

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