8.EPILOGO "Volveremos a verlas"

101 11 4
                                    

24 de diciembre de 2015

Noche buena.

-Sam- escuchó el grito de su madre y luego de darse una última mirada corrió hacia las escaleras para llegar al piso de abajo- Ya todos llegaron, ve y saluda a Jazz- Sam asintió y fue a la sala de estar.

El ruido de inmediato llegó a sus oídos, ya todos estaban ahí, las chicas con sus familias, su propia familia, incluyendo a su hermano mayor quien ahora tenía una linda esposa y una pequeña. Todos rodeaban la mesa del comedor, listos para la cena de navidad. Caminó hasta Jazz y de inmediato se vio en vuelta en sus fuertes brazos.

-Aquí está mi hermanita la criminal- dijo burlón mientras la apretaba aún más.

-Basta- dijo separándose de él- acabas de llegar ¿cómo te enteraste?

-Yo lo sé todo hermana- Sam giró los ojos.

-Claro que sí.- se apartó unos pasos y lo miró de pies a cabeza- Hey, tu cabello ya está creciendo- él pasó la mano por su cabeza y sonrió.

-Sí, ya soy un hombre, no quiero hacerme envejecer antes, caerá cuando deba caer.

-Es genial- ella le sonrió- cuando caiga ¿me lo darías? Ya lo prometí para caridad.

-¿Qué?- preguntó confundido pero Sam rio y antes de que pudiera decirle otra cosa, las chicas llegaron hasta ella y la halaron lejos.

-¿Ya lo hiciste?- le preguntó Beth ansiosa y Sam negó.

-No puedo creerlo Sam, creí que apenas llegaras a casa le enviarías un mensaje, así fuera- dijo Liza confundida.

-Vamos chicas ¿Qué podría decirle? Es Trevor Scott- dijo frustrada.

Luego de ese maravilloso beso del que fue testigo millones de personas, ella había bajado del escenario y luego todo había sido una locura. Trevor había intentado hablar con ella pero sus padres habían llegado y parecían querer matar a alguien así que justo antes de salir del lugar y sin despedirse de ninguno de los chicos un guardia la había alcanzado, y le había pasado una pequeña nota con las palabras "Estamos dispuestos a otro intento de secuestro ¿esta vez podemos ser nosotros los que llevemos las sogas y los moños de regalo?" y en la parte de atrás había un número y debajo de ellos las iniciales T.S.

Ninguna de ellas pudo cerrar los ojos después de aquella noche y Sam no había tenido el valor de comprobar si ese era el número real de Trevor, además de que estaba castigada hasta que muriera según sus padres. Así que aunque quisiera ni siquiera podía salir.

-Pues dámelo, yo lo haré- dijo Gianella buscando el celular de Sam en su vestido.

-Oye, deja de toquetearme.

-Sam, tenemos que saber si es real y si de verdad quieren volver a vernos- dijo Liza.

-¿Por qué me parece que no solo yo me muero por verlos? Uhh ¿quedaron enganchadas también?- les preguntó burlona y ellas resoplaron.

- De esos idiotas llorones, por favor- respondió Liza

-Prefiero a los rubios naturales- dijo Gianella y Sam levantó una ceja.

-¿Quien habló de Third en específico?- le preguntó riendo y su prima enrojeció.

-Cállate- dijo y se alejó de prisa. Sam rio con ganas y señaló a las otras dos- ¿También huirán?

-No hasta que hagas algo con ese número- dijo Beth y Sam suspiró mientras sacaba el teléfono.

-Ni siquiera sé que decirle.

-Algo como, no lose, ¿Besas bien? ¿Lindos labios?- dijo Liza picara y Beth rio.

-Amm chicas- les gritó Gianella desde el otro lado de la habitación y las tres giraron hacia ella, tenía un periódico en las manos y los ojos como platos.- deberían ver esto.

Caminaron hacia ella y la rodearon mientras veían lo que ella. Beth comenzó a toser de pronto y Liz a reír.

-Oh Dios- murmuró Sam mientras veía el encabezado de la noticia.


El celular de Trevoe sonó y lo tomó mientras reía al ver a su hermana golpear a Third por meter comida a su boca antes de que todos llegaran a la mesa. Habían decidido pasar la navidad juntos y todos se reunieron en la casa de su madre para pasarlo juntos.

Abrió el mensaje y sonrió mientras lo veía. Una imagen estaba en el. Ahí estaban, fue la foto que aquella mujer había tomado la noche anterior. Aumentó la imagen en un rostro en especial y rió mientras veía la expresión de sorpresa en la cara de Sam.

-¿Por qué ríes como estúpido?- le pregunto Max mientras se asomaba sobre su hombro para ver el mensaje- Hey somos nosotros- dijo y luego rió.

-Al fin envió un mensaje- dijo refiriéndose al hecho que había estado esperando que ella se comunicara y como nunca había estado ansioso. Bajó la imagen y se encontró con un texto al final- "En realidad tu beso terminó siendo el regalo perfecto. – Sam" –Trevor sonrió satisfecho y guardó el numero en su teléfono.

-Esa sonrisa dice que las volveremos a ver ¿no es así?

-¿Eso te gustaría?

-Eso sería interesante- le respondió con una sonrisa pícara y Trevor rió mientras lo golpeaba en el hombro.

-No puedo creer que le enviaran ese mensaje- les dijo Sam incrédula y Liza y Gianella rieron malvadas.

-Te dije que si no enviabas algo nosotras lo haríamos.

-Pero ¿tenían que poner que sus labios fueron el regalo perfecto para mí?- les gritó aun en shock.

-Bueno, es lo que estabas pensando aunque no lo dijeras- dijo Gianella y Sam gruñó.

-Además teníamos que hacer que pegara con el título de la noticia- dijo Liz mientras levantaba el periódico y las letras en negrilla resaltaban

BADFREE, EL REGALO PERFECTO

Y estas chicas lo saben.

-Por supuesto que lo sabemos- murmuró Liza mirando la foto.

-Los volveremos a ver ¿cierto?- preguntó Gianella y las tres miraron a Sam.

-Aunque tengamos que cometer un crimen.

FIN...



----------**-----------------**------------------**

Hola a todos y a todas!

Bueno decidí hacer esta pequeña novela ahora que se acerca navidad, ¡ ya el mes siguiente! y quería hacerlo con los chicos, porque ellos son el regalo perfecto para todas nosotras.

Una historia de risa donde vemos el poder de la amistad, la navidad y el amor <3

Espero que les haya gustado. No olviden votar y comentarme allá abajo sobre lo que pensaron de la novela.

Xoxo

y ¡FELIZ NAVIDAD!

-Marie



El Regalo Perfecto - COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora