Capítulo 001.

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Louis gimoteó con fuerza, sintiendo su garganta ardiente y un tanto dolorida. Sus párpados se presionaban con fuerza y su cabello se descolocaba con cada caricia de aquellas manos delicadas y pálidas. Los suspiros eran arrancados con fuerza desde sus brillosos labios.

-Mierda, ugh -jadeó él, mientras apretaba su mandíbula y se enterraba con fuerza en el cuerpo contrario. Sentía esa preciosa sensación de cosquilleo en los huesos de sus caderas y por debajo de su pelvis.

Las maldiciones eran algo normal en él, pero ahora eran lanzadas al ambiente el cuadriple de lo esperado. Louis enterraba los dedos de una de sus manos en las sábanas y los restantes en la cintura de la contraria.

-¡Louis, así, oh Dios! -gimió exageradamente la muchacha de piel de porcelana, ojos grises y cabellos negros como la noche. Las manos de ésta se paseaban por la fornida espalda del muchacho, acariciándola, rasguñandola con sus uñas pintadas de turquesa.

-¿Te gusta ésto? E-eres una perra v-vulgar -balbuceó éste, al borde del éxtasis y sintiéndo cómo su semilla comenzaba a brotar en el apretado interior de la preciosa chica. Ésta gimoteaba y agudizaba sus sonidos a cada embestida que recibía.

En la mente de Louis todo comenzaba a ponerse borroso, confuso, estaba perdiéndose a sí mismo en los abismos color carmesí del placer. Sus párpados se presionaron con violencia y fuerza, sus uñas se clavaron en la suave piel de quien sea que fuera la muchacha. Sus chillidos pasaron del placer al genuino dolor. El muchacho comenzaba a ser demasiado violento para ella.

-¡Louis, estás lastimandome! -anunció ésta, con terror y sintiendo cómo a cada estocada ella misma se abría para recibir al bien dotado miembro que éste cargaba.

Su semilla se anegó en el interior de ella, y su nudo comenzó a crecer, sembrando el dolor y el pánico en la femenina. Mientras todo era dolor en su perfecto, curvo y pálido cuerpo, en el del contrario era placer efusivo y arrebatador, por demás de abrasador y exuberante.

-Dios mío, Dios mío -jadeaba Louis mientras sentía su ser crecer y crecer, y sentía la húmeda y chorreante entrada de la muchacha contraerse alrededor del centro de su deseo. En aquél hotel existían dos versiones de la historia, una no iba a ser contada, por supuesto. A nadie le interesaban los lloriqueos de una mujer frígida, o eso era lo que la mente de Louis pensaba.

Su nudo acabó, se deshizo totalmente, arrebatándole ese tan precioso orgasmo que tomó su cuerpo..., Cuando Louis decidió por fin quitarse de encima de aquella frágil moza su ceño se frunció y su voz se elevó en el caliente ambiente.

-¿Es una broma? -gritó, con furia, observando cómo en las blancas sábanas que antes tenían olor a vainilla ahora había una roja mancha desproporcionada. Él bajó la vista hasta su entrepierna, fijando la mirada a su ya flácido miembro el cual también contenía rastros de la sustancia rojiza.

El siguiente movimiento fue rápido. La pequeña mano de Louis fue rápida y se guió por el aire hasta aterrizar en la mejilla de la muchacha, quien chilló asustada al sentir el impacto contra su suave y sonrojada piel.

-¡Me estás jodiendo! ¡Agh! -bramó Louis, mientras se levantaba de la cama y se dirigía directamente al baño.

Ella logró oír el ruido de la ducha, se sintió asquerosa, horrible, indigna. ¿Cómo podía haberla tratado tan mal por algo que él había provocado? La había roto internamente siento tan zote. Sus lágrimas se regaron por sus rojizas mejillas, en el lado en el cual él la había golpeado sus penas hacían un doloroso énfasis. Lentamente se sentó sobre la cama, sintiendo el dolor entre sus piernas.

Con la respiración agitada ella miró su ser, guiando dos de sus dedos para tantearse a sí misma. La imagen podía ser tosca, pero era lo que tenía que hacer para comprobar que la sangre que minutos antes había habitado en Louis era suya. Cuando alzó sus dedos para verlos su boca se entreabrió y un suspiro se le fue arrebatado...Sí, era suya, estaba lesionada y gracias al hijo de puta de Louis Tomlinson.

Mature Argentine Dogo {MAD} | A.U Omegaverse | Larry Stylinson.Where stories live. Discover now