Bitter Sweet Symphony {Adaptación Camren}

Capítulo 15

Ser capturada por los brazos de Dianna y ver la sonrisa en su rostro, le hizo entender que había hecho lo correcto. Distraerse muchas veces era la clave para no dejar que la angustia y la depresión consuman a una persona. La miró de pies a cabeza para ver su vestido rosado, su apariencia cual Lady Gaga.

Dianna: ¿Te gusta? –Giró completamente- estaba disfrazada de una mujer del siglo 18 pero me cambié. -Miró a la morena, dándose cuenta de que había elegido un buen disfraz- Te ves increíble  -notó de reojo como todos la miraban como babosos- y creo que a los hombres también les agrada.

Camila: ¿No es un escote y disfraz algo atrevido? –se miró a si misma- Estoy vestida de Vedette, cabaretera, o no se lo que es, pero parezco una prostituta.

Dianna: ¡Ya basta! Tienes que recordar que posees un lindo cuerpo, no te ibas a disfrazar de una monja ¿o sí? –la tomó delicadamente del brazo mientras caminaban hacia su grupo de amigos.

Tal vez Agron tenía razón, con esto de ser VIH positivo se olvidó del cariño y el leve ego que se tenía así misma, había olvidado que era bonita. Con ella estaba conversando mientras caminaban hasta que pararon, debiendo girar el rostro para notar tres pares de ojos observarla. Las ganas de correr a taparse fueron enormes cuando notó que estaba frente a la doctora Jauregui.

Dianna: Verónica, Alexa, ella es Camila, ya les he hablado mucho de ella.

Vero: -tomó su mano y le besó el dorso- No sabía que Dianna tenía amigas tan "ricas", debería traerlas más seguido...-como había hablado en otro idioma, la morena no pudo entenderla, sólo sonrió tímidamente mientras Dianna le pegaba a la latina- ¡perdón! Bienvenida Camila.

Alexa: Un gusto conocerte de verdad, Dianna nos ha dado una imagen muy buena de ti  -la saludó cortésmente, ella no tenía una personalidad tan liberal como la de su mejor amiga.

De pronto la morena y la ojiverde fijaron miradas pues era turno de saludarla a ella. La cumpleañera no podía dejar de mirarla de pies a cabeza y corroborar que efectivamente era el mejor disfraz de la noche. Con cuidado se le acercó a Lauren y se paró de puntillas para poder darle un beso en la mejilla y esta bajó la cabeza para hacer lo mismo. Jauregui se sentía una pervertida pero al parecer a los demás no les molestaba parecer lobos de casería al mirarle las piernas cubiertas por medias. "Déjate de babear idiota, no creo que a ella le vayan las chicas como a ustedes" le dijo al oído Dianna a Vero para que Camila no captara el mensaje.

Antes de desprender su mano de la espalda de la morena, esta se quedó quieta al lado de su oído para susurrarle que le agradecía por toda la ayuda, por pagar los exámenes, por todo. Por alguna razón, a Lauren le agradaba recordar que era una doctora y ella una paciente, pero no dejaba de preocuparse por ella, por si algo malo le llegara a pasar otra vez.

Camila: Siento que no debería estar aquí, es decir, es una fiesta para... -se quedó callada y trató de sonreír- le he traído un regalo doctora Jauregui, un pequeño presente, pero está junto a los demás.

Lauren: No tenías que tomarte esa molestia Camila, gracias. -Ella asintió sin decir palabra alguna. Antes de retirarse hacia otro sector del hogar con la rubia, Lauren rápidamente le tomó la mano- Cualquier cosa, si te sientes mal nos avisas ¿vale? No te expongas demasiado. -Ella asintió mientras se alejaba con Dianna. Vero y Alexa se acercaron a su mejor amiga.

Vero: Ni que fuera una bebita Lauren -la aludida se volteó mientras tragaba saliva.

Lauren: Tiene tan sólo 18 años –la latina quedó boquiabierta, rascando su nuca como si hubiese cometido un error en mirar a alguien que ni siquiera era mayor de edad.

De pronto con un rostro perdido y algo confuso, Fiore apareció en las estancias de ese hogar. Encontrar un disfraz le costaba bastante pero recordó que era italiana y como cuando niña ahí los americanos la molestaban. Iba con un vestido negro, un sombrero del mismo color sobre la cabeza y un arma sobre la cintura. Estaba disfrazada de gángster, de "mafiosa". Cuando divisó a la cumpleañera y ésta a ella, en ambas se formó una sonrisa grande. D'Angelo se veía realmente atractiva, más aun vestida de tan oscura manera. Para que sus amigas no la molestasen, fue ella quien se acercó. Capturó su cuerpo entre sus brazos y le susurró cerca de los labios que la estaba esperando. Llevada por la tentación la besó, comprobando que efectivamente le encantaba Lauren Jauregui. "Buon Compleanno, bella" le murmuró a una embobado doctora mientras sus amigas se reían y decían que a la ojiverde le hacía falta un poco de sexo de inmediato.