Capitulo 27

2.4K 306 8
                                    


Luhan me miró fijo a los ojos, sin decir absolutamente nada por unos cuantos segundos. Yo estaba por decir algo...
—No, yo no tengo nada que pensar —me dijo —No quiero nada contigo...
—¡Eres un necio! —le dije nervioso —¡Ni siquiera porque el chico más sincero y bueno del mundo te lo dice quieres entender!
—¿Y tú acaso lo pensarías?, no Sehun, ¡no seas cínico!. Al primer culo fácil que pase frente a ti, te irás corriendo detrás de él.
—Tal vez tengas razón y no haya nada que pensar... teniendo en cuenta lo poco que me conoces para decir una cosa así —le dije algo molesto —Me ofendes.
—¿Acaso no es así?, no me vengas con que te afecta eso ahora, porque no es verdad. Estoy completamente seguro que tienes una lista de hombres con los que te acuestas más larga que la de un hospital —dijo enojado.
—¡Pero tú no eres uno más de ellos! —le dije nervioso.
—¡¿No, no lo soy?!, ¡¿y que soy entonces?! —me preguntó con el mismo tono que yo utilicé.
Lo miré fijo, tratando de encontrar las palabras adecuadas pero tampoco exponerme tanto y decir una sarta de idioteces.
—Tú... tú eres lo mejor que he tenido —logré decir luego de un largo rato de silencio.
Entonces vi como sus ojos cambiaban esa forma acusadora, para mostrarme desconcierto y miedo, Luhan no quería escuchar eso... no esperaba escuchar eso.
—¿Otro de tus estúpidos discursos de convencimiento? —preguntó y dio media vuelta para comenzar a caminar —Con Tao o cualquier otro estúpido puede funcionar Sehun, pero conmigo no —dijo sin dejar de caminar hacia su auto.
¡Diablos, era tan testarudo!, ¡no quiere entenderlo, no quiere aceptarlo!
Digamos que yo tampoco, ¿verdad?, pero aún así, cuando logro decirle algo que me sale del corazón, no me cree. No quiere creerme.
—¡No es un discurso!, ¡es una afirmación! —le dije fuerte ya que se estaba subiendo al auto. Prendió marcha y salió rápidamente de allí, solté un cansado suspiro y me subí a Betty —Tú siempre vas a estar conmigo, ¿verdad Betty?, eres la única mujer en mi vida que nunca me ha pedido nada... y a ti si puedo decirte que te amo Betty.
La prendí y comencé a manejar hacia mi casa, me puse a pensar un poco en como estuvieron las cosas en general. Y bueno, no todo salió mal. Por lo menos Suho comprendió que no podía hacer nada con Luhan, pues él es mío.
¿Es mío?, ¿acaso puedo utilizar ese término?
Si, claro que puedo usarlo. Porque aunque lo niegue, aunque no lo acepte, aunque quiera huir y esconderse, Luhan sabe que es mío.
Y ahora que Junmyeon se hizo a un lado, ya puedo estar tranquilo. En realidad no puedo estar muy tranquilo oorque en cualquier momento puede salir el psicópata de Minseok al ataque y querer hacerle algo a mi castaño.
Ay Luhan, va a ser tan complicado hacerte entender que no eres como los demás, hasta para mi es complicado de entender, pero creo que poco a poco me voy dando cuenta de que es así. Pero quizás no lo sea, ¿y si quizás estoy confundido?
Tal vez lo que me pasa con Luhan es pasajero. Yo no quiero lastimarlo, él no se lo merece. Es un buen chico... es un chico inteligente, hermoso, simpático, dulce. Tiene una mirada que logra dejarte hecho un estúpido y esa forma tan excitante y al mismo tiempo relajante de besar... que juro que podría estar horas y horas simplemente besándolo. Pero ya, ya, ya, ya no voy a seguir pensando en esas cosas, no tienen sentido.
Llegué a casa y cuando entré mi celular comenzó a sonar, lo tomé y miré la pantalla: número privado, que extraño. Fruncí el ceño y decidí contestar.
—¿Hola? —dije al atender, no obtuve ninguna respuesta —Hola, ¿quién habla? —nadie contesto. Volví a mirar la pantalla, la llamada aún estaba —Luhan, ¿eres tú cariño?, ¿no quieres hablarme? —entonces la llamada se cortó.
No, ese no había sido Luhan, él sería incapaz de llamarme, pero, ¿quién pudo ser...mi padre? No lo creo, ¿Tao?, puede ser.
Pero de seguro que fue alguna de los locos esos que esta atrás mío y llamó solo para escuchar mi masculina e irresistible voz.

El fin de semana se pasó rápidamente, ya que solo me quedaba por disfrutar el domingo. Ese día me quedé en casa todo el día cocinando con Rose y como siempre que ella tenía oportunidad, lograba preguntarme por Luhan. Yo no se porque será, pero no entiendo porque lo quiere tanto, aunque esa pequeña caja de mentiras es fácil de querer.

Peligrosa Obsesión [HunHan]Where stories live. Discover now