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Noche

-Jo-Joven... encontró a la persona que estaba buscando? -preguntó la mujer conteniendo su sonrojo-

-Oh, sí... -dijo pausadamente y la miró fijo-

Señorita, tendría la amabilidad de llevarme hasta donde se encuentra este pasajero... ? -respondió acercándose a ella-

-Cl-Cla-Claro... solo deme el registro y veré si es posible 

A continuación Mikaela entregó el folder, la trabajadora lo recibió encantada y prosiguió a revisar los documentos del dicho pasajero, y en efecto su nombre estaba ahí la única variante era el apellido.

-Yuuichirou Amane...? 

Mmmm si esta es la persona que está buscando entonces su habitación es la.... -dijo mientras arrastraba el dedo sobre la hoja de registro hasta llegar al número de hospedaje-

201! -gritó animada-

201 es el número de la habitación -respondió mostrando una gran sonrisa y sintiéndose más aliviada- 

-Bien, le estoy agradecido -dijo sosteniéndola suavemente de la quijada con su mano derecha-

-N-N-No es n-nada... je... jeje -comenzó perder la compostura-

-Mmmm insisto, cómo debería agradecerle? -alzó una ceja-

-C-Cómo!!?? -exclamó sorprendida-

En ... En verdad no ha sido molestia yo... 

-Ya sé, tengo una idea -soltó la quijada de aquella e alzó el dedo índice como señal de haber encontrado un plan-

-P-Plan...? -respondió aturdida-

-Fingiré que nunca conversé con usted y eso arreglará el problema, no lo cree? -sonrío con los ojos cerrados-

-Yo... no lo entiendo... -pensó confundida-

-Qué quiere decir con es-eso?

-Qué es lo que quiero decir...? Uh... Es lo que me estoy preguntando ahora, que irónico no? -abrió los ojos-

-Qué es esto...? - se dijo ella aterrorizada-

Aquellos ojos amables ojos con los que entró  Mikaela a esa pequeña despensa, cambiaron en un segundo, se mostraban fríos, llenos de odio y dispuestos a cometer cualquier locura por conseguir sus objetivos.

-Por qué has puesto esa cara...? -dijo él acorralándola-

-Tsk... -rechinó ella los dientes sintiéndose impotente-

-Estás asustada? -agregó el echando la cabeza de lado-

Pero la pobre mujer no ponía resistencia y mucho menos hacía algún movimiento para evadirlo, ella no tenía salida.

 -Qué es lo que vas a hacer!? -dijo en su defensa-

-Yo...? 

No haré nada que te haga sufrir... ya que has sido eficiente conmigo.

Sería justo eso...? -añadió con una sonrisa sarcástica-

-Tengo otra opción? -respondió cabizbaja y con un tono quebrado-

-Oh, sí lo olvidaba!

Tienes que darme la copia extra de la llave de esa habitación, luego de que me la entregues pensaré si puedo darte otra opción, 

Ahora, dejemos de perder más tiempo y dame esa llave. -extendió su mano-

-Mierda... -pensó frustrada-