Sello

863 105 17
                                    

No tiene ni idea de lo que está diciendo... 

Qué es lo que trata de hacer mostrándome esa expresión!? -se dijo mostrando desgarro en su mirada- 

"Amor"?

Eso es algo que ya he olvidado hace mucho tiempo ...

Y regresando en si... 

Soltó la muñeca de éste.

-Hu...?  

-Vete... -dijo con un tono frío y volteó la mirada-

-Qué!? -exclamó desconcertado-

-Que te largues!! -gritó enfurecido volviendo los ojos a el-

-T-Tú... 

Tú... 

jamás vuelvas a acercarte a mi!!! -le gritó con la poca voluntad que le quedaba...-

-Quién va a buscarte, ah!? -refutó Mikaela empujándolo con sus manos-

-Ipp...Ghh.. -gimió impactado de su agresión pero rápidamente se sujetó de la baranda que tenía la escalera- 

-Te salve la vida  -si supiera que yo lo provoqué...-

y Tú fuiste quién insistió en agradecérmelo, 

Te acostaste conmigo sin pensarlo 2 veces llegando hasta el punto de romperte...

Pero eso no basta para decir que ...

-Que te amo!? -gritó confundido-

Tsk... 

-Ya... basta!! -agregó dándose media vuelta y bajó las escaleras-

-Mierda... 

A dónde quieres llegar!? -gritó Mikaela sorprendido de él mismo-

Sin remedio... corrió detrás de él.

En menos de 6 pasos se lanzó capturandolo nuevamente con sus brazos, los cuales abrazaban su cintura... 

-Suéltame! -gritaba Yuu desconsolado-

Por un momento Mikaela no se dio cuenta de ello, pero al escuchar su voz... la única sinfonía que pudo oír, era lo arruinado que estaba...

-Yuu-chan... susurró a su oído-

Pero el otro se negaba a escucharlo...

Estaba enloquecido por un amor no correspondido, la persona que removió por una noche el dolor que había retenido por lo últimos 7 años pensaba en alguien más, pero ... porqué tenía que ser precisamente él? porqué no podía dejarlo?, eran preguntas que atormentaban en su cabeza mientras forcejaba con éste tratando de liberarse

Y dejando su cuerpo al libre albedrío... 

Fue aprisionado nuevamente por el tacto de Mikaela.

-Yuu-chan... -volvió a susurrarle con calidez dándole un beso en el cuello-

-No me llames así... -respondió derrotado-

-Porqué...? -dijo estrujando suavemente su cintura, dejando caer sus manos por su vientre-

-Nn... 

Tsk... 

-No puedes decir nada...  ? 

Anda, necesito que me digas porqué no puedo...

llamarte así? -decía dejando suspiros en su oído-

-No puedes... eso es todo... -susurró agobiado-

Pero él no se iba a dar por vencido, por lo que... preguntó una vez más 

HYAKUYA.COMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora