ANGEL SUICIDA

CAPITULO 12

Estuve jugando un rato sin quitar los ojos de encima de Alonso, hasta que Scott me miro.

-¿No es tu novio?

-lo mire-. Sí, lo es.

-¿Qué hace aquí alguien como él?

-Lo averiguare.

-No, Zoe-me detuvo-... no te metas.

-Ya me canse de que Alonso me mienta, necesito saber en que está metido.

-Iré contigo.

-No, tengo una mejor idea, vamos a esperarlo, sé cuál es su camioneta.

-Okey.

Salimos y yo me pare al lado de la camioneta de Alonso mientras Scott se despedía de los chicos, estos se fueron y luego mi hermano fue y se sentó en el suelo, a lado mío.

-Oye, Alonso paso por un lado de ti.

-Sí.

-Es obvio que no te reconoció, ¿Qué tal que le sacas información sin decir que eres Zoe?

-¿Cómo?

-Eres buena actriz, además con esa ropa nunca sospechara que eras tú.

-Conoce bien mi voz.

-Pues las voces pueden parecerse, pero la actitud no.

-Scott, Alonso me pone más nerviosa que las entregas de calificaciones finales, como le haré creer que no soy yo.

-Mm, buen punto.

-Ya veré que hago.

En eso el chico que peleaba con el guardia salió, Alonso salió detrás prendiendo un cigarro. Se acerco a la camioneta buscando sus llaves. Decidí hacerle caso a mí hermano y fingir. Me cruce de brazos y me recargue en su camioneta.

-Hola-dije, mi hermano me miro extrañado-.

-¿Te conozco?

-Desgraciadamente no-sonreí-.

-Bueno, muévete-me empujo y abrió la camioneta-. ¿Se te ofrece algo?

-¿Qué te traías con mi primo?

-¿Qué?

-Ese chico de haya es mi primo ¿Qué pasa con él?

-No es de tu incumbencia-saco un arma de su chamarra, mi corazón empezó a latir fuertemente-.

-acaricie su brazo desde el hombro-... Invítame un trago.

-¿Disculpa?

-O lo que sea.

-¿Cómo te llamas?

-"Mierda ¿Qué digo?". Amm...

-¿Qué?-se acerco-. No que muy, muy-sonrió, Dios mío esa sonrisa me desarma-.

-mordí mi labio inferior-. Camila. ¿Y tú?

-Alonso. Entonces, Camila... ¿whisky o vodka?

-Vodka.

-Sube.

-¿Qué?

-Sube, te llevare por tu... trago-sonrió pícaramente-.

-Entiendo. Hermanito, te veo en la casa.

-Claro.

Se levanto y se retiro, subí a la camioneta de Alonso y él condujo, llegamos a su casa, con que subes a cualquiera a tu camioneta ¿he? Entramos a su casa y este prendió las luces de la sala.

-Linda casa.

Me abrazo por la espalda y beso mi cuello, ¿Qué carajos hace?

-Te ves bien, mi amor-lo mire por encima del hombro-... ¿creíste que no te reconocí?-no dije nada, solo lo mire-. Al principio no, pero se te cayó la mentira con tu nerviosismo-me giro hacia él-. ¿Qué hacías en ese bar?

-Fui a jugar billar con mi hermano.

-¿Vestida así?

-Siempre me visto así cuando salgo con él y sus amigos.

-quito mi gorro y cabello, recogido en coleta, cayó-. Eres buena actriz.

-Ya dime la verdad.

-¿Sobre que?

-Sabes de que hablo-me aleje y le quite el gorro-... eso que tanto me ocultas.

-Te dije que entre menos sepas del tema mejor.

-¡No me interesa, quiero saber!

-Zoe, por favor, solo... olvídalo.

-No. No lo voy a olvidar.

-Entonces goza la decepción.

Paso por un lado de míevitando golpear mi hombro, subió las escaleras y entro a su habitación tras unfuerte portazo que me hizo llorar, me senté en el sofá y llore, solloce, estabaharta de las mentiras, Alonso me hacía muy feliz pero siento que debo saberesto, debo saber en que está metido.