do me a favour ☁ stylinson

t r e s.

El timbre se escuchó a lo lejos, sobresaltando a ambos que hicieron una leve mueca.

—¿Qué materia tienes? —Harry preguntó, levantándose y estirando su mano, para que Louis la tome y pueda hacer lo mismo. El menor lo hizo, alejándose de inmediato y con (cuándo no) sus mejillas rosadas y una sonrisa vergonzosa.

—Uhm, biología —pasaron unos segundos, en los que Harry pensó que no agregaría nada más y aprovechó a recoger su mochila. Louis ya la había colgado de su hombro cuando continuó—. ¿Tú?

—Matemática —hizo un gesto realmente adorable con los labios en el que Louis no pudo evitar enfocarse. Sobre todo, en el pircing en su labio inferior. Harry no se percató de aquello—. Creo que nos vemos después —ellos ya habían comenzado su camino al edificio. Louis sostenía las correas de su mochila, caminando con la mirada en el suelo, sin prestar atención al frente.

—Sí, eso cre- —el castaño fue interrumpido, ya que su cuerpo colisionó con el de otro chico, el cual se notaba, era físicamente más grande que él. Louis levantó su vista, comenzando a disculparse con Logan—. Oh, yo...

—¿Por qué no te fijas por dónde vas? —la voz enojada de Harry habló. Lo había escuchado hablar así solamente cuando lo empujó el día anterior, pero ahora no se dirigía a él, sino que al de pelo negro frente a Louis, quien lo miraba con enfado.

—No jodas, Styles —escupió el pelinegro, tomando a Louis por los hombros y empujándolo a un lado para poder pasar.

Louis vio cómo Harry lo seguía, su mirada destellando de enfado.

—Pf, quién se cree.

Louis sonrió bobamente, ésta vez mirando al frente mientras caminaba. No hablaron hasta que llegaron al aula de Louis.

—Bueno, Lou. Espero verte en el receso —el mayor sonrió, marcando uno de sus hoyuelos.

—Sí... —Louis murmuró apresuradamente, entrando en el salón. No sabía cómo despedirse del mayor y prefería no hacer el ridículo.

La clase pasó lentamente. Era una de las más aburridas, según Louis, y no prestaba mucha atención. Su mirada se desvió hacia sus manos y una sonrisa inconsciente se dibujó en su rostro al recordar a Harry tomando su mano y guiándolo a través de los pasillos, sin importarle si jodía su reputación de interesante chico malo.

Harry dijo que le caía bien. Harry pasó tiempo con él porque quería.

Su sonrisa decayó al pensar que el mayor sólo quería burlarse de él. ¿Y si era como todos los demás? ¿Y si ahora mismo se estaba riendo a sus espaldas contándoles a los demás la horrible forma en la que Louis tartamudea cuando habla? ¿O cómo se sonroja por todo? Se sonrojó ante el jodido pensamiento de ello.

Mientras tanto, Harry, en un salón algo más alejado del de Louis, miraba perdidamente la ventana a su lado. De por sí ésta es la materia que más odia, así que imposible que pueda prestar atención sin lloriquear por no entender nada. Se la pasó pensando en el pequeño castaño que había empujado su cuerpo el día de ayer. Él mismo sabía que la excusa del favor era estúpida, pero ahora estaba realmente interesado y sólo... quería conocer a Louis. Quería conocer todo sobre él y ni siquiera sabia de dónde salían aquellas ganas. Sólo sabe que está pensando en él en su jodida clase de matemáticas, en donde él usualmente piensa en cómo asesinarse con una regla, poniendo en una nota su odio hacia las ecuaciones.

Cuando el timbre que indicaba el receso sonó, prácticamente todos abandonaron el aula antes de que el profesor pudiese siquiera despedirse. Harry no los culpa, hizo lo mismo.

Se apresuró en llegar al aula de Louis, empujando un par de personas en el camino pero deteniéndose a pedir perdón ésta vez.

Cuando llegó, los adolescentes estaban saliendo desesperados detrás del profesor, apretándose en la minúscula puerta. Harry buscó a Louis con la mirada, pero no podía encontrarlo. Suspiró, adentrándose en el aula del más bajo para ver si andaba por ahí. Fruncio el ceño cuando vio que el menor estaba aún sentado, y ese tal Logan que lo había empujado estaba frente a él, otro chico a un lado de Louis.

—¿Así que ahora tienes noviecito? —Harry pudo escuchar. Miró a Louis negar con la cabeza, asustado, sin siquiera levantar la mirada de su pupitre. Sabía que debía entrar y hacer algo.

Pero lo que lo sacó de sus casillas fue el comentario del otro tipo.

—Qué va a tener novio, si es horrible. Está gordo —se rió, seguido del otro. Harry se encaminó hacia ellos, nada dispuesto a armar una pelea. No quería que lo suspendan. (Otra vez).

—Louis —Harry llegó a su lado, empujando algo brusco al rubio que le impedía el paso. Éste estaba a punto de decir algo, cuando miró hacia arriba para ver la cara de Harry y cerró la boca.

El menor levantó la vista, asintiendo. Le dedicó una media sonrisa antes de agachar la mirada nuevamente y tonar el libro que debía devolver a su casillero.

Los otros chicos no dijeron nada, sólo miraban a Harry, expectantes. Probablemente esperaban un golpe, se lo merecían.

Salieron de allí y Louis caminó rápido hacia su casillero, abriéndolo y aventando su libro para luego cerrarlo de golpe. Harry aun estaba a su lado, sin decir nada, preguntándose mentalmente si había hecho algo mal. ¿Quizás Louis quería que los lastime?

—¿Lou? —preguntó cuando el pequeño se quedaba frente a su casillero, sólo mirando el suelo. Harry se dio cuenta de que había utilizado un apodo. No le importó.

—Gracias por eso, Harry —murmuró, llevando las manos a los bolsillos de su jean—. Gracias por el favor.

El mayor fruncio el ceño mientras Louis se daba vuelta para caminar.

—No fue un favor, Louis. Son fui a buscarte a clase y me encontré con ellos- ¿te hicieron algo? ¿Te dijeron algo?

—No —contestó—. Porque apareciste tú. Gracias.

—No hay problema —murmuró Harry. Notó a Louis algo apagado y decidió hacer algo. Cualquier cosa para que vuela, aunque sea, a tartamudear alegre—. ¿Puedo hacerte compañía? —preguntó. Louis se volteó con una sonrisa, sus mejillas coloradas, y asintió.

Se volvieron a sentar bajo el árbol.  El rizado lo condujo nuevamente de la mano. Harry volvió a hablar sobre él. Louis también lo hizo. Harry descubrió que la materia favorita de Louis era matemática y estaba en clases avanzadas, que le gustaría hacerse un tatuaje pero no encontraba nada que significase mucho para él. Que su madre trabajaba casi todo el día y él cuidaba a su hermana cuando ella no estaba en el colegio. Louis se rió cuando Harry le contó una de sus anécdotas trabajando en el McDonalds, no como, una pequeña risa, una gran risa, su boca abierta y su cara hacia atrás. Harry quería hacerlo su tono de llamada, pero no se lo comentó.

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kabsakbska ya va a empezar lo lindo<3

les cuento que es una historia corta y capaz que no pase los diez-quince capítulos. sori:(