Capitulo 4

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Suena el despertador, suena, suena, suena; otra vez debo ir a la escuela, otro día en el que mi "iresposabilidad va a relucir" o eso dice la profesora de biologia, que dicho sea de paso, hoy toca con ella a primera hora y no he hecho la tarea. De todas formas, nunca la hago.

Realmente no dormi mucho, nada se podria decir, estuve toda la noche pensando en aquel "asesino" al que me encontre hace algunos días, realmente esta historia estuvo ocupando gran parte en mi cerebro, y es frustrante, cada vez que lo pienso tiene menos sentido. Pero no importa, son las 6:10 a.m. y se hace tardisimo, entro a las 7:00 a.m. y literalmente ni me movi de la cama. Me estiro y con mucha parsimonia me destapo las 3 frazadas que tengo ¡QUE DIFICIL ES DEJAR LA CAMA CUANDO HACE FRIO! En cuanto llego al baño me saco el boxer que es el unico abrigo del frio que tiene mi cuerpo en este momento. Entro a la ducha, y la regulo lo mas caliente que puede soportar mi cuerpo, si, soy raro, siempre al salir de la ducha mi piel termina enrojecida, soy como masoquista creo.

Son las 6:20 y recien salgo de la bañera, seco mi cuerpo, y al hacerlo veo una vez más la transparencia de mi piel, si alguien se lo propusiera a contar mis venas yo creo que sin problemas lo podría hacer. Tambien me asombra lo delgado que estoy, no como lo suficiente para un Adolescente en crecimiento y me esta pasando factura. Dejo mojado mi cabello, me gusta la forma que tiene naturalmente, solo cuando esta muy parado lo peino con los dedos, pero hoy no es el caso. Salgo del baño solamente con la toalla colgada por mi cadera cubriendo mi cuerpo desnudo. Llego a mi cuarto muerto del frío, maldiciendome para mis adentros el no haber preparado el uniforme antes de desnudarme.
Bajo al comedor y como siempre esta mi madre con el café batido recién salido del microondas y unas tostadas con dulce de leche, le sonrió y notó lo hermosa que es, rubia igual que yo, delgada pero sólo lo suficiente. Levanta su rostro de los labores maternales y nota mi presencia, es el turno de ella de sonreír y mostrar por sólo un momento unas pocas arrugas, que inevitablemente vienen con la edad.

-Papa se tuvo que ir antes, tenía una importante reunión de negocios, y me dijo que te pida perdón por no poder llevarte hoy.

No me sorprende en lo absoluto, el es un hombre muy ocupado para estar pensando en mis asuntos. Muchas veces el maletín pesa más que el hogar y las finanzas más que la familia.

-Rápido cariño, se te hace tarde.

Tiene razón, mucha razón, rápidamente tomó mi café, que al estar recién hecho me quema y como mi tostada que estaba dura. Subo arriba por mi mochila y mi celular y salgo corriendo. Contaba con que hoy mi padre me llevara, cosa que no debería haber confiado en ello.
A duras penas logro alcanzar el colectivo, el cual esta vacío porque es muy tarde, escojo un asiento y lo tomo, miro por la ventana y pienso para mis adentros.

Así es como comienza otro día sin sentido.

Una tumba sin nombre (#Wattys2016)Where stories live. Discover now