Intentalo una vez más.

Capitulo 18.

No sé como en este planeta podía existir una persona qué me aguantara, vaya, soy muy rara, ¿Quién le desprecia el desayuno a un chico? Nadie, solo yo, solo yo me pongo de dramática y la verdad es qué no lo merece, claro qué nadie lo merece.
Espero qué ya me haya perdonado por aquella vez del bar, ha pasado aproximadamente una semana y media y el coraje debió de disminuir.
Le llamé y quedé con ella en salir, para hablar de este pequeño e inolvidable tema.

-¿Saldrás?- el estaba sin camisa parado justo en frente mío.

-se te está haciendo una costumbre andar desnudo frente de mi, sin qué haya pasado nada- sonreí.

-¿Te molesta?- se puso una camisa.

-No. Puedes hacer lo qué tú quieras, finalmente no soy yo la qué paga por quedarse aquí-

-Buen punto, pero no has respondido mi pregunta-

-Sí. Con la chica qué fui al bar, espero qué no te encuentres a la tipa esa, y se te ocurra pararte a hablarle- sonreí, y abrí la puerta.

-Vaya, ¿Estas celosa?- noté su mirada pervertida.

-Vaya, qué pensamientos los tuyos, ¿Celosa de ella? Para nada- cerré la puerta, pues claro que estaba celosa, qué pensaba, qué me encantaba verlo con ella, obviamente no.

Vi a aquella chica qué me había hecho caer y entrar a un bar, y la abracé.

-Perdóname por haberte tratado así-

-No te preocupes, ya quedó atrás, sé qué soy pésima pero necesito qué me acompañes a una fiesta hoy, por fa- suplicó haciendo un gesto.

-Vale, ¿A qué hora nos iremos?-

-¿Te quedas a mi casa a dormir? La fiesta es de mis vecinos, te recojo en unas dos horas justo aquí ¿esta bien? Arréglate, esta vez tú serás la puta y yo llevaré a mi galán- me guiñó el ojo y vi como se alejaba.

-¿Haciendo planes sin llevarme?- me abrazó por detrás.

-¿escuchabas mis conversaciones, Sean?-  Puse mi mirada seria.

-Un poco, tal ves, pero no fue intencional, vine a buscarte, hay qué salir-

-Perfecto. Necesito un vestido para dentro de dos horas, ¿Me acompañas?-

-Claro- me tomó de la mano y cogimos un taxi.

Llegamos a una tienda y las chicas miraron solo a Sean, y le ofrecieron vino tinto, ¿Qué clase de chicas eran estas? Solo las ignoré.

-¿qué tal?- me había probado un vestido negro, pegado.

-Te vez preciosa, pero no te lo lleves-

-¿Por qué no?- me crucé de brazos.

-¿Quieres qué te traiga una talla más grande? Se ve qué no te quedo muy bien, no lo vayas a romper- me dijo la chica qué atendía y las otras solo rieron.

-Por lo menos a mi me entra, a ti, ni siquiera por las piernas te sube, cariño, vámonos de aquí- me quité rápido el vestido, me puse lo qué traía y le cogí la mano mientras ellas me miraban con odio, muchas personas querrían ser yo, agarrada de el.

-¿Por qué no te llevas algo qué te guste a ti? No necesariamente tienes qué lucir con un vestido hermoso, por qué tú ya lo eres y todo se te ve bien- me besó.

-Uff, ¿Sabes cuánto nos encantaría qué a las chicas todo se nos viera bien? Por desgracia siempre hay algo qué nos hace ver mal-

-¿Quieres qué vaya contigo?-

-Me parece una buena idea, así evito qué vayas por mi como la otra vez, mientras sujetes mi cabello cuando lleguemos y yo comience a vomitar y-

-Okay ya entendí- se empezó a reír y decidimos no ir tan formal a la fiesta, espero que no se molestara que lo llevara, pues ella dijo que llevaría a su novio ¿Mal tercio? No gracias

Llegamos al lugar a la hora qué  ella nos dijo y en cuanto vio qué llegue con el se me quedo viendo.

-Ven- le sonrió y me jaló.

-Espero qué no te moleste que lo lleve- suspiré.

-ispiri qui ni ti milisti qui li llivi- mi miró fijamente -Te iba a presentar a alguien, llevas atada a ese hombre por mucho tiempo, necesitas algo nuevo-

-Para nada, el es mío y no lo pensaría en dejarle- sonreí.

-Bien- se fue.

-¿Qué pasó bebé?-

-Se ah enfadado, no quiere qué vaya contigo- suspiré y lo abracé.

-No te preocupes, yo te llevo a una fiesta-

Fuimos a un lugar qué nunca había visto, la verdad me aterraba entrar a lugares qué no conocía pero me sentí protegida por el.

Entramos, había mucho calor, mucha gente, esto era un poco desesperante, fuimos a la barra y el me dijo qué iría al baño.

-Hola- un tipo qué tenía unos hermosos ojos azules se acercó pero solo tenía bueno eso, por qué estaba lleno de tatuajes, pircings y drogado.

-Déjame-

-No te va a pasar nada- se rió como si hubiera dicho la gran cosa y me jaló de el brazo-Ven, vamos a otro lugar-

Intenté quitármelo pero era muy débil a comparación de el, bueno, qué ya me tenía con las dos manos pero yo seguía intentando quitármelo, hasta qué sacó algo y me lo puso en la cara, perdí el conocimiento.

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Hola.
Se qué tarde muchísimo, pero bueno ya no tenía tanto tiempo por la escuela pero estoy haciendo un gran esfuerzo por seguirla.❤️👌🏻
Por cierto, las qué vieron qué hay un grupo y me mandaron mensaje, les pediría de favor qué ya no me manden más mensajes, por que ya no estoy en ese grupo.🙄💔