Awaken

647 44 1
                                    

Había pasado ya un mes desde que Klaus había tomado el poder, desde que Rebekah había abandonado la ciudad y desde que Lily yacía en un ataúd en una esquina del oscuro y frío garaje Mikealson.

Nueva Orleans llevaba un siglo acostumbrada a tener unos reyes que se habían preocupado por ellos, sin embargo, desde las ascensión de Niklaus la ciudad siente la falta de un monarca. No se ha preocupado por su trono, solamente lo quería porque otro lo poseía pero a la hora de la verdad el híbrido se pasaba los días pintando y con su nueva amante, la bruja renacida Genevieve. Elijah veía como su hermano pasaba del tema y durante todo lo que llevaban de mes intenta hacer recapacitar a su medio hermano pero este únicamente se digna de no cumplir con su deber. Vencido decide instaurar el orden él mismo, reuniendo a todos los seres con sus representantes y conseguir la paz entre ellos. A pesar de haberlo intentado todos ellos se gritaban y no llegaban a ningún acuerdo. Antes de que el desorden lo venciera decide buscar una última ayuda en la única persona que conocía a cada ser como la palma de su mano, esa misma persona que una vez había reinado.

A pesar de la verdad descubierta hacía unas semanas, el honorable se acercaba al ataúd de la que había sido su amada y miraba la cubierta brillante de madera que la contenía y siempre le venía a la mente el día que le pidió en matrimonio, declarando su gran amor el cual ella eufórica y con sus ojos radiando la felicidad extrema aceptó el compromiso. Se sentía dolido por haber averiguado que había sido ella quien había traído al padre de los Mikealson a la ciudad para expulsarlos y ahora se preguntaba si en verdad la había llegado a conocer alguna vez.

Aquel día mientras el cielo se oscurecía se acercó al garaje en donde rodeó uno de los coches más antiguos que había allí y se detiene al lado del féretro, lo mira durante unos segundos y con delicadeza abre la tapa dejando al descubierto el cuerpo grisáceo de Lily el cual alza entre sus brazos y lo lleva a una habitación destinada a los invitados y que hacía poco contenía un hechizo de aislamiento única y especialmente para ella. Posa su cuerpo en la cama neoclásica y retira la daga de su pecho, después se sienta en una silla también del mismo estilo a esperar a que la vampira despertase del sueño temporal.

Entre los Mikealson, únicamente habían sufrido la agonía de la daga Finn, Elijah, Kol y Rebekah, y los dos últimos concordaban que aquello era insufrible mientras pasaban por un terrible dolor. Lily ahora sabía que era tener una daga, era más que insufrible además todo estaba oscuro, no había un espacio en su mente en donde estuviera cerrada, no, no había nada y le era imposible crearlo ya que la terrible agonía y la sensación de que el fuego la devoraba a cada instante no se lo permitía. Deseaba arrancarse el corazón, pero no podía por la magia que desprendía la daga, la inmovilizaba. En el momento que le sacaron el puñal sintió al instante un alivio y como el dolor y el fuego aminoraban hasta que desapareció por completo. Aún seguía en la oscuridad pero ahora podía concentrarse y pensar, podía prestar atención a aquella lenta respiración. Lenta respiración. Estudió con su sentido auditivo a aquel sujeto. Era humano, o al menos lo había sido porque su corazón ya no latía, sabía que era un vampiro pero no adivinaba quien pudiera ser. Lentamente conseguía dominar su cuerpo, podía abrir los ojos pero de forma paulatina. Todo lo que sus ojos podían ver era el techo de una habitación, gira sus ojos a un lado y luego a otro descubriendo que estaba en la mansión. Con su oído sigue el ruido de la respiración hasta llegar a una esquina de la habitación en donde estaba Elijah tranquilamente sentado mientras la visualizaba. La cara de ambos expresan relajación cuando la de la vampira debería de expresar lo contrario.

Sin que el vampiro lo esperara ella salta sobre él en un solo y rápido movimiento pero el honorable la intercepta antes y la lanza sobre la cama en donde ella cae riéndose. Parecía que estuviera loca pero no lo estaba, simplemente le parecía raro que Elijah la atacara.

The Casquette Girl | The Originals #1Where stories live. Discover now