CAPÍTULO 13

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Las semanas pasaron, en ocasiones ella se quedaba sola en su casa porque su mamá salía a trabajar afuera de la ciudad, esas noches hablábamos hasta casi la madrugada, y yo disimuladamente la intentaba convencer para quedarme a dormir con ella, hace mucho tiempo quería tener esa sensación, ya que siendo ella, sería muy bonito el poder dormir y verla a ella, como la primera persona al despertar.

A veces Jessica me llamaba de improviso para que fuera ese mismo día, hasta un día en que yo invité a mi mamá y hermana a ir a cine, obviamente yo no podía ir ese día, al yo contarle a ella la razón, se enojó mucho conmigo, reclamandome que yo siempre me la pasaba con ellas, y que en cambio yo con ella no salía casi, y luego de mucha discusión, terminamos la llamada. Al salir de cine y regresar a casa, la llamé de nuevo para ver cómo estaba y si se había calmado; afortunadamente sí, pero añadió una última frase que me dejó pensando:
- Ves por eso yo no podría ser tu novia, porque si tuviera ese interés en tí, yo te habría hecho un súper escándalo
Y ahora que lo pienso, eso no fue un "súper escándalo"? Será posible que Jessica sí sienta más cosas por mí de las que admite?

Y finalmente una noche de miércoles, Jessica me preguntó

-Santi ¿Vas a venir ésta noche? ¿A quedarte conmigo?

No puedo explicar la felicidad tan grande que sentí al escucharla; aunque no era la primera vez que dormía afuera, ya que algunas veces me quedé a dormir donde amigos en un colchón tirado en el suelo, nunca lo había hecho con una chica, era algo nuevo para mí; arreglé las cosas en mi casa para poder irme, llevaba un pijama, mi cepillo y crema de dientes, sin embargo, siendo ella, iba preparado en que como eran dos camas en su casa, cada uno iba a dormir en una por aparte.

Entré a su casa, Jessica me recibió de manera muy cálida, llevaba una especie de bata cuando me recibió, me pidió que me cambiara la ropa, al salir ella también se había quitado la bata, pude ver su pijama, su hermosa silueta era adornada por una blusa negra de tirantas, un short negro, y unas medias para el frío; vimos una película mientras comíamos algo y para cuando terminamos, ella ya estaba arrunchada, abrazándome, con una de sus piernas sobre las mías, le besaba ocasionalmente su frente, cruzábamos nuestras manos y dedos, le dije en broma

-Sabes "mi niña bonita" yo no sé bien cuál es el clítoris, ni conozco con propiedad la "cosita" de una mujer, aunque contigo he podido ver, no sé con detalle qué es cada cosa ¿tú no me podrías enseñar?

-Mmm cómo eres de curiosito tú ¿no? .... Pero bueno, ven sólo vayamos despacio, me da algo de pena, ven aquí abajo, ¡Pero no toques a menos que yo te dé permiso!

Sonreí, fui hacia sus contorneadas piernas, ella se quitó el short del pijama, debajo tenía unos cacheteros sencillos color beige, y Jessica me dijo

-Mira a otro lado y yo te aviso

Eso mismo hice, cuando me avisó ella, tenía sus piernas arqueadas, poco a poco las fue abriendo y bajando, sus manos cubrían su sexo, su rostro lucía rojo como una manzana, de veras tenía mucha pena ella, así que le dije

-Si te sientes más cómoda y para ser equitativos, yo voy a quitarme mi pantalón y pijama también

Jessica asintió, me quité la ropa, intenté contenerme, pero no lo logré, mi pene creció rápidamente, no pude ocultarlo, yo estaba todo depilado (Ya que a ella sí le gustaban los hombres así). Ella dejó una de sus manos cubriéndose, la otra la llevó a mi miembro, empezó a tocarlo, a apretarlo, tocó mis testículos, los intentó apretar un poco, pero rápidamente la detuve y le dije

-Con cuidado señorita, desconozco si hayas escuchado que lo más sensible en nosotros los hombres, son nuestras "bolas", pero es muy cierto, entonces por favor, no presiones con mucha fuerza

Ella hizo caso y me los masajeó un poco pensando que lo decía porque me había causado dolor, pero no, era sólo para que estuviera consiente sobre la cantidad de presión que podía hacer.

-Bueno ven ahora sí

Dijo ella ya con menos pena, quitó su otra mano, fue como llegar al paraíso, tenía vellos en su área púbica, a lo ancho cubría un poco en su entrepierna, a lo largo iba desde su pubis hasta que la línea de sus labios mayores se perdía en su cola, como un jardín con flores adornando la vista; aquellos labios, no sé si porque había nacido así o por uso (ya que Jessica no era virgen) son carnosos y sobresalen un poco, intenté tocarlos, pero ella me dio una palmada en la mano diciendo

-No Santi, me da pena, no me gustan mis labios así todos salidos

-Pero no te preocupes, son bonitos, a mí me gustan, así como están, no te sientas mal (Porque en serio me gustaron mucho, me imaginaba halándolos y mordiéndolos con mis labios un poco cuando le hiciera sexo oral)

-Bueno ya, continuemos (Dijo muy sonrojada y tímidamente)

Jessica tomó sus labios mayores de la parte superior, los abrió un poco y señalando un pequeño, diminuto bultico carnoso arriba de su vagina, me dijo

-Mira Santi, éste es el clítoris, cuando nosotras nos... "tocamos" allí es dónde jugamos y nos excitamos, para cuando estés con otra chica, aquí es el sitio al que tienes que apuntar

Yo nuevamente me desanimé un poco de ver que ella, me hiciera referencia a otras chicas, no entendía como no podía ver que a quien quería conmigo, y con quien quería aprender, experimentar y etcétera, era ella, ninguna otra mujer más.

-Chúpate un dedo, de manera que quede un poquito mojado y "babosito"

Hice caso a sus palabras, llevando a continuación mi dedo hacia su clítoris, me hizo moverlo de forma circular, de arriba abajo, y hacia los lados, Jessica, dio un gemido algo silencioso, rápidamente hizo gestos, abría su boca como queriendo más y más, rápidamente se empezó a lubricar su interior, nuevamente me detuvo.

-Espera un momento, mira, ése líquido, es para que en el momento de "tan tán" pues se deslice todo más fácil, me da algo de asco, además no sé si eres consiente que todo eso viene desde lo más profundo de mi ser, además que pasa por donde hacemos "chichí y guácala" pero pues si quieres...

Puse mi cabeza en medio, estiré mi lengua, mientras gentilmente lamía sus labios carnudos, los cuáles eran muy excitantes, metí un poco me lengua en su interior, me gustaba mucho, bebía todos los líquidos que ella iba produciendo, soltó unos gemidos Jessica, me tomó del cabello, lo haló y presionaba mi cabeza contra su pubis, sin embargo, de nuevo me detuvo.

friendzone   Nivel: SexualWhere stories live. Discover now