Gratitud

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La actitud de Karamatsu ya le comenzaba a enojar, sabía perfectamente que su hermanito solo estaba tratando de alejarlos por un estúpido y retorcido sentimiento de cariño mal expresado... por un momento pensó si Karamatsu se había vuelto loco...

-Kara- no alcanzó a pronunciar su nombre cuando sintió que era tomado con fuerza del cuello de su sudadera y era arrastrado con fuerza lejos de Karamatsu -¿¡Q-que demonios!?- giró su cabeza para ver quien lo estaba tratando tan bruscamente y grande fue su sorpresa al ver a Ryoga con una sombría mirada... estaba realmente enojado... y Osomatsu sabía la razón, por lo cual decidió no forcejear.

-¡Osomatsu-nissan!- gritaron sus cuatro hermanos al unisono mientras los comenzaban a seguir, sin embargo el de amarillo se detuvo a medio camino para poder ver a su hermano mayor.

-Karamatsu-nissan es un mentiroso...- lo miró seriamente por unos segundos, pero rápidamente le dedico una amplia y sincera sonrisa -No te dejaremos sólo nissan- Aquellas palabras sorprendieron al mayor, quien ahora miraba como su pequeño hermanito comenzaba a correr tras los demás.

-Ya no vuelvan...- Susurró con sus ojos llenos de lagrimas -Se los ruego... ya-ya no vuelvan...- Se dejó caer de rodillas en el césped, apretando con fuerza su dolido corazón...

Un hilo de sangre comenzó a surgir de su boca...

(...)

Osomatsu fue arrojado con brusquedad dentro de la oficina del mayor, produciendo un leve quejido al golpear su trasero con el suelo -Eso duele... podrías ser mas amable...- No lo podía ver a los ojos, algo dentro de su cuerpo le decía que no debía.

-Tú...- Su apagada voz hizo estremecer al menor, quien ya comenzaba a imaginar lo que sucedería -Osomatsu...- El de rojo cerro sus ojos esperando a que algún golpe le llegase a su cuerpo, pero en vez de eso pudo sentir como Ryoga lo abrazaba con fuerza, acción que provoco que abriera sus ojos de par en par -Gracias...- 

-¿e-eh?- Trataba de procesar aquella palabra -¿por que me... agradeces...?- Estaba totalmente confundido.

Ryoga se quedo en silencio por algunos minutos, hasta que sintió la llegada de los demás -Gracias por haber cuidado... a Taiga...- 

-¿De-de que hablas...? Yo no... yo no pude cuidarlo...- Su voz se volvió apagada al recordar el pasado con aquel chico -Es como Karamatsu dijo... no pude protegerlo...- sentía como un nudo se le iba formando en la garganta.

-Si es así entonces tendré que molerte a golpes...- Deshizo el abrazo para poder mirar al menor a la cara -¿Eso quieres...?-

-Haz lo que quieras... me lo tendría merecido...-

-Entonces...- Ryoga formo un puño con su mano y sin fuerza y apenas con velocidad toco la mejilla de Osomatsu.

-¿Que fue eso...?-

-¿Acaso crees que podría golpear a la persona que hizo la vida de mi hermanito mas feliz y llevadera?- le dedicó una gentil sonrisa.

Osomatsu lo miró confundido con un leve sonrojo en sus mejillas -No te entiendo...- 

-Sabes... cuando pasaba tiempo con Taiga el solo me hablaba de una cosa...- Colocó su dedo indice en la frente del de rojo -De su querido sempai y de lo feliz que era a su lado...- Sus palabras exaltaron al menor -Siempre me decía lo genial y amable que era...- apartó su mirada -Aunque eso lo pongo en duda ahora- mencionó con tono burlón.

Osomatsu miro con nostalgia el suelo, estaba recordando todos los momentos agradables que pasó con el pequeño niño de cabellos desordenados. Cada recuerdo le sacaba una leve y fugaz sonrisa -Extraño que me acose todo el día...- murmuró suavemente -Lo siento... Ryoga...-

El medico estaba sorprendido, por primera vez escucho salir su nombre de la boca de Osomatsu -No te disculpes... no tienes porque hacerlo...- se levanto de donde se encontraba, al momento que le tendía su mano al menor para ayudarlo a levantarse -Taiga no me perdonara si acepto tus disculpas por algo que hiciste muy bien...- al verlo totalmente erguido acaricio sus cabellos -Hiciste que sus últimos días llenos de oscuridad... brillaran un poco...- Besó su frente con delicadeza -Gracias, Osomatsu-

-¿Q-Que haces...?- se exaltó y ruborizó al sentir aquel contacto.

-Eso fue de parte de Taiga- le sonrió gentilmente -Te besaría en la boca como Taiga quería pero no eres mi tipo-

-¿De-de que hablas? pervertido...- por instinto tapo su boca con ambas manos.

-Bueno, el deseo mas grande que tenía Taiga era salir con su amado sempai...- algo se revolvió en su estomago por un momento -Y ahora el saber que eres tú... creo que algo estaba mal con los ojos de Taiga...- 

-¿Cómo que ahora que lo sabes? ¿Qué acaso antes no lo sabías?- Infló levemente sus mejillas, denotando su descontento.

-Bueno, antes pensaba que era Karamatsu quien lo había ayudado...- miró a los chicos que estaban a su espalda -Ya que era al único que había visto antes... y por la descripción que Taiga me había dado de su sempai... creí que era él y no tú...- miró apenado al de rojo.

Osomatsu al recordar a Karamatsu cerro sus ojos con lentitud, su pecho comenzaba a doler nuevamente al pensar en la actitud que estaba adoptando su hermanito -Dejando esto de lado...- Llamó la atención de los presentes -¿Que quieren hacer chicos...? Hablo de Karamatsu...- Ante su pregunta todos se miraron los unos a los otros.

-Se cual sera la respuesta pero... ¿y si lo dejan sólo?- Sugirió Ryoga exaltando al resto -Digo... conozco a Karamatsu lo suficiente como para decir que él es realmente terco cuando se toma algo en serio... y esto para él es lo mas serio del mundo...- miró preocupado al mayor de los cinco.

-Si sabes la respuesta no digas algo así de estúpido...- Reclamó el de rojo -No podemos dejar a Karamatsu sólo, es solo un idiota que no sabe que mas hacer...- Sintió que algo se revolvía en su estomago -No pienso dejarlo solo... en estos tres últimos días...-

-Entonces ¿que haremos...?- Preguntó Ichimatsu -Ese idiota no dejara esa actitud de mierda tan fácilmente...- Miró decaído el piso.

-Solo seguiremos insistiendo- Aquellas palabras llenas de confianza extrañaron a los demás -Ya que... Karamatsu siempre termina cediendo cuando le insistimos demasiado ¿no?- Sonrió frotando la base de su nariz con su dedo.

-Sabes que no va a ser tan fácil Osomatsu-nissan...- suspiró resignado Choromatsu por la simplicidad con la que pensaba su hermano mayor.

-Vamos, solo tenemos que-

-¡Doctor Ryoga!- Una enfermera interrumpió la conversación de los jóvenes -¡Doctor Ryoga!- Se veía asustada y en pánico -¡El joven Karamatsu fue encontrado vomitando sangre en el jardín! ¡Lo necesitan con urgencia!- 

La sangre de los chicos se congelo ante aquellas palabras -¿eh...?-

Oscura esencia / Osomatsu-sanWhere stories live. Discover now