Capitulo 10 - Nuestro Amor

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Unos golpes en la puerta hicieron que ambos se sentaran de un salto sobre la cama, se quedaron callados pero los golpes continuaban.

Reverte: (desde afuera) ¡Roberta! Hija, ya tenemos que irnos. Ábreme se que estás ahí, te oí hablar.

Roberta se levanto rapidamente de la cama y entro al baño, enrollándose una toalla, volvió con Diego recogiendo su ropa y dándosela.

Diego: ¿es tu papa?

Roberta:(susurrando) no te preocupes metete al baño, córrele.

Diego:(susurrándole a Roberta) Me mata, Roberta es tu papá, me va a matar.

Roberta: tranquilo que no te va a ver, metete al baño y no hagas ruido.

Diego: ok pero si me cacha y me mata quiero que sepas que te amo.

Roberta: (besandolo) y yo a ti pero ya córrele al baño.

Diego se metió al baño y Roberta corrió a abrir la puerta.

Reverte: ¿qué hacías eh?

Roberta: estaba por meterme a bañar.

Reverte: Roberta te oí hablar con alguien.

Roberta: pá sería la tele, estoy sola.

Reverte: ¿seguro?

Roberta: seguro pá, pero a qué venías.

Reverte: venía a decirte que en una hora tienes que estar lista para salir.

Roberta: ok pa, nos vemos después.

Roberta dio un beso en la mejilla a su padre y se aseguro de que entrara a su habitación y entonces cerró la puerta y Diego salió del baño.

Roberta: (mirando a Diego) jajaja, mi amor estás pálido.

Diego: no te rías que no es gracioso.

Roberta: tú tuviste la culpa, tú te metiste en mi cuarto.

Diego: sí porque creí que había salido y que no volvería tan pronto.

De nuevo unos golpes en la puerta sobresaltaron a ambos.

Roberta: ¿Quién?

Miguel: ábreme Roberta, sé que Diego está contigo.

Roberta: (susurrando) ¿le dijiste que ibas a venir?

Diego: obvio no, ¿Quién crees que soy?

Miguel: Roberta ya ábreme si no quieres que los cachen de verdad.

Roberta entro al baño a vestirse mientras Diego se encargaba de abrir la puerta y dejar entrar a Miguel que venía acompañado de Mía. Roberta salió del baño y se puso pálida al ver allí a su hermana.

Mía: ay hermanita no te pongas así que conmigo no tienes que disimular.

Roberta: ay Mía, disimular qué por Dios.

Mía: bueno no creo que estuviesen viendo una película precisamente.

Diego, Miguel y Mía se rieron mientras Roberta empalidecía cada vez más.

Miguel: ay ya Roberta era una broma, pero bueno a lo que vinimos.

Diego: ¿y a qué vinieron o qué?

Mía: pues obvio a salvarlos de Reverte:

Roberta: ¿Qué? No me digan que se dio cuenta.

Diego: me mata, ahora si me mata.

Siempre A Tu LadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora