Antes del fuego✔

3. ¡Tú otra vez!

Creo que aún no me repongo del inesperado encuentro con Jeremy, y como consecuencia no logro concentrarme en la clase del profesor Ferrer. Desde que dio inicio a la clase de química, solo habla incoherencias para mí, demasiadas fórmulas para memorizar. Mi móvil vibra en mi bolsillo haciendo que me sobresalte, y aprovechando que el profesor se está dirigiendo a alguien a quien ha puesto en un aprieto con una pregunta relativa a las diferentes composiciones del cloro, lo ojeo. Es un whatsapp de Cheryl y en plena clase.

―¿Ya sabes lo del sábado en la noche?

―No ―tecleo de vuelta.

―Entonces, ya te informo.

―No, esperemos a que acabe la clase y me lo cuentas todo completito.

―No me aguanto, esto no tiene espera.

―Si nos pilla el profe, nos echa de clase.

―Sería bueno. Esta clase aburre hasta la muerte.

―Paso, quiero graduarme y vivir la gran vida universitaria, para eso necesito buenas notas. Hablamos al rato.

Cierro y ella desde la otra esquina me mira y me tuerce los ojos. Esto no es algo que se deba hacer durante una clase, él asunto es que cuando Cheryl tiene una primicia no aguanta las ganas por contárnosla. Afortunadamente se espera hasta que Phoebe estuvimos sentadas en una mesa de la cafetería, y ella en particular no parara de gritar acerca de la gran noche que nos esperaba.

―¡Es mañana en la noche! ―Nos grita a ambas emocionada y se tapa la boca.

―En serio, quiero detalles ―Phoebe la inquiere, aunque no noto mucha emoción en ella.

―¿Que hay mañana en la noche? De que me estoy perdiendo ―pregunto confundida; porque lo único que hace es gritar y aun no suelta nada. Me empujo la hamburguesa que pedí de almuerzo en mi boca, lo cierto es que tengo hambre. ¡Muero de hambre!

―Em lo olvidaba, tú últimamente has estado en la luna. ―La crítica viene directa de Cheryl. Lo acepto, y quiero asesinar al culpable.

―No es mi culpa. Les he dicho que un lunático se le da por llamarme en la madrugada para atormentarme. ¡Es que acaso no ven mis ojeras! Parezco la reencarnación de Morticia. ―Me quejo y Phoebe toma una servilleta para limpiarme la salsa que ha quedado en mi boca, luego de darle un gran mordisco a mi hamburguesa. La tomo de sus manos para terminar de hacerlo yo misma y ella me mira compasiva.

―Está bien, te entendemos Em―dice.

―Kate Burns dará su fiesta de cumpleaños mañana en la disco bar Parnasus.

―¿Y? Ella siempre escoge el mejor lugar, bueno su padre que paga todo ―repongo indiferente.

La noticia de Cheryl no es nada nuevo. No desde que tengo memoria de sus súper fiestas, y a las que aún no hemos sido oficialmente invitadas; solo desde que Cheryl comenzó a salir con Jay, y este es Friends forever de Jeremy, el novio de Kate,por lo general nos colamos. Termino el resto de mi hamburguesa y trago soda dulce. Hasta ahora eso no es la gran cosa. No, si Kate esta vez sí nos invita de forma legal.

―Tampoco nunca nos invita ―Phoebe apoya mis pensamientos comiéndose sus papas rebosantes de cátsup.

También amo hacer eso; es solo que hoy no estoy de humor para hacerlo.

―Ya, no pongan esas caras, que lo que tengo que decirles les va a alegrar.

―Entonces dilo de una buena vez mujer, ahora sí que nos estás matando de curiosidad ―digo cansina hacia ella.